Olor a manzanilla y embajadores ¡®outsider¡¯: as¨ª reinventa Gucci la perfumer¨ªa
Alessandro Michele da la vuelta al orden establecido en la moda y el ¡®beauty system¡¯ a golpe de aguja y notas olfativas
El 28 de mayo nac¨ªa en Roma una nueva clase social: la raristocracia. Sus estatutos, hilvanados por Alessandro Michele, calaron hondo en la retina de los espectadores del ¨²ltimo desfile de Gucci: referencias hist¨®ricas, excentricidad y talento en cada metro cuadrado de tela que formaba la colecci¨®n. Togas romanas, aires castrenses, accesorios tribales, joyas casi arqueol¨®gicas y un conjunto de texturas y estampados tan arriesgado como acertado. Entre las estatuas del Museo Capitolino, a oscuras, y con una iluminaci¨®n de deje fantasmal, desfilaron modelos con m¨¢s porte que belleza can¨®nica, que se alejaban de cualquier estereotipo est¨¦tico para dar la ¨²ltima vuelta de tuerca al engranaje que Michele puso en marcha hace cuatro a?os, cuando aterriz¨® en Gucci como director creativo. El ¨²ltimo enfant terrible de la industria se doctor¨® con nota cum laude.
Provocar es f¨¢cil, pero en este caso todo formaba parte de un coherente guion. Michele no da puntada sin hilo y ha firmado, no una colecci¨®n, sino toda una declaraci¨®n de intenciones que, dicen, inaugura un nuevo orden social.
En su obsesi¨®n por crear un mundo alrededor de la firma, la rama cosm¨¦tica no desentona en el conjunto. Los visuales de la campa?a de sus primeros labiales (a¨²n no disponibles en Espa?a) se sellan sobre dentaduras imperfectas. Personajes outsider como Jared Leto o Lana del Rey ejercen de embajadores de sus aromas Gucci Guilty¡ Si algo faltaba en este universo entre on¨ªrico y posapocal¨ªptico, eran un perfume y una campa?a ad hoc que condensaran la esencia y los nuevos aires a trav¨¦s de los sentidos m¨¢s primitivos.
No fue casual que M¨¦moire d¡¯un Odeur (as¨ª se llama la fragancia) se presentara al mundo durante la fiesta posterior al desfile en un palacio tan desmesurado como decadente en el que la tropa del dise?ador comparti¨® con la prensa el spot. All¨ª estaban, en la pantalla y en carne y hueso. La campa?a nos permit¨ªa intuir que el olor no dejar¨ªa indiferente. ?El elemento gu¨ªa es la idea de la libertad, de la no-era, del no-lugar, de lo no-social. Me imagin¨¦ un mundo que fuera como el fresco de una vida mitol¨®gica en la que la familia es una comunidad privada con su propio marco social, en el que prevalece la libertad total de expresi¨®n y donde los roles de las personas y las cosas no est¨¢n claros?, lo defini¨® el director creativo.
Si en algo no se la jug¨® fue en ordenar su desarrollo a Alberto Morillas, uno de los perfumistas m¨¢s prestigiosos de Espa?a, y aunque el encargo no era f¨¢cil ¨Clas ¨²nicas directrices que recibi¨® el nariz fueron que oliera a camomila, que fuera una emoci¨®n y que todo el mundo la entendiera de manera inmediata¨C, el perfumista ha creado la que aseguran ser¨¢ la fragancia de los nuevos tiempos. En 1994, CK One, tambi¨¦n creada por Morillas, revolucion¨® el mundo de la perfumer¨ªa con sus notas unisex y unos visuales en los que los primeros skinny boys de la moda se confund¨ªan con las modelos andr¨®ginas. Ha habido que esperar un cuarto de siglo para asistir al nacimiento de un nuevo concepto olfativo (y social).
El t¨¦rmino genderless se queda corto para definir la esencia de M¨¦moire d¡¯un Odeur. Es atemporal, inclusiva y libre de etiquetas. ?Todo viene de mi obsesi¨®n por los aromas. Materializa las emociones que parten de los recuerdos, se salta el eje cronol¨®gico?, confes¨® Michele. El lanzamiento inaugura, aseguran, una nueva familia olfativa, la mineral. Los ingredientes t¨ªpicos de la perfumer¨ªa est¨¢n excluidos y, como a?ade Morillas, ?hay algo sorpresivo en ella, es adictiva y tiene mucho poder. M¨¢s que una fragancia, es un medicamento para el alma que toma su fuerza de la naturaleza y no se parece a ninguna otra?. Elaborar un perfume que fuera al tiempo muy masculino y muy femenino y no entendiera de los l¨ªmites del tiempo ha sido uno de los grandes retos del perfumista. ?Para m¨ª, es una fragancia elemental, una simbiosis ¨²nica que nos transporta a alg¨²n lugar entre lo l¨ªquido y lo s¨®lido, y es limpia y misteriosa?.
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