El genio que se reencontr¨® con sus musas
Josep Font se siente a gusto en su nueva piel como director creativo de Delpozo. Su primer desfile ha dejado claro que tiene otros planes para una firma que abandona el clasicismo y apunta hacia una actitud mucho m¨¢s contempor¨¢nea e internacional.
Madrid le sienta bien. Se instal¨® en la ciudad hace seis meses, justo cuando la noticia salt¨® a los medios: Josep Font ser¨ªa el nuevo director creativo de la firma Jes¨²s del Pozo, hoy llamada Delpozo, un nuevo nombre, de car¨¢cter m¨¢s internacional, que forma parte de la estrategia de relanzamiento de la marca. El dise?ador est¨¢ contento y satisfecho, especialmente despu¨¦s del desfile de su primera colecci¨®n, que tuvo lugar el pasado jueves en el buc¨®lico y on¨ªrico parque El Capricho (un escenario muy Font) y que inaugur¨® la Mercedes-Benz Fashion Week. No pod¨ªa salir mal. ?Estoy tan convencido del trabajo que he hecho y el resultado me gusta tanto, que lo que diga la cr¨ªtica no es algo que pueda afectarme?, comentaba Josep Font para S?Moda d¨ªas antes. El reto no era f¨¢cil, pero a alguien con su grado de exigencia no hay nada que le pueda apetecer m¨¢s que un desaf¨ªo. ?Para m¨ª fue decisivo que en mi primera entrevista con los responsables de Perfumes & Dise?o ¨Cempresa que adquiri¨® el 100% de las acciones de Jes¨²s del Pozo S.?A. tras el fallecimiento del dise?ador¨C me dijeran que ten¨ªan la intenci¨®n de internacionalizar la marca. Eso y la ilusi¨®n que me transmitieron. Todo el mundo est¨¢ tan deprimido en este pa¨ªs que, cuando vi su ¨¢nimo y su optimismo, no pude negarme?. El creador catal¨¢n lo vive como un paso adelante en su carrera.
?Yo no lo veo como una fusi¨®n de estilos, sino como una evoluci¨®n de ambos. Mi intenci¨®n, desde el primer momento, ha sido introducir c¨®digos nuevos que permitan darle a la marca un aire m¨¢s contempor¨¢neo?. La base de la que part¨ªa era muy s¨®lida. ?A Jes¨²s, como a m¨ª, le gustaba modelar sobre maniqu¨ª, las prendas estructurales, los vol¨²menes, ten¨ªa una espl¨¦ndida sensibilidad para los tejidos y los colores. En ese sentido, me siento muy identificado con ¨¦l. Y tambi¨¦n, tras indagar en sus archivos, me he dado cuenta de que los dos consideramos que la mujer es la verdadera protagonista, una persona que trasciende a la est¨¦tica, muy femenina y nada vulgar, muy sensual pero nada sexual?. Quiz¨¢ lo ¨²nico que los distingue es que Jes¨²s del Pozo era m¨¢s intuitivo; sin embargo, Font es meticuloso hasta la saciedad. ?S¨ª, soy bastante obsesivo, pero con los a?os creo que tanto mi equipo como yo hemos aprendido a llevarlo bien [r¨ªe]. Creo que los trabajos creativos conllevan una b¨²squeda de la perfecci¨®n constante?.
?Cada prenda tiene su historia, sus problemas y sus virtudes. Para este abrigo hicimos muchas pruebas de tejido y conseguimos darle un volumen especial?, dice Font.
Tom¨¢s Javier Biosca
Su metodolog¨ªa de trabajo lo demuestra. Cada colecci¨®n que comienza parte de dos o tres temas, aparentemente antag¨®nicos o de dif¨ªcil conexi¨®n. El objetivo es profundizar en ellos y acabar encontrando nexos en com¨²n. En el caso de su primera aventura para Delpozo ha planteado un juego de contrastes entre las elaboradas formas de la alta costura y la ingenua feminidad de las menonitas, una comunidad religiosa, presente en casi todos los estados mexicanos, con una muy particular forma de ver la vida y de sentir la est¨¦tica. ?Para ello hemos utilizado una gran variedad de t¨¦cnicas artesanales que ensalzan la costura cl¨¢sica y enfatizan el valor de lo hecho a mano?, comenta. Tanto es as¨ª que, por ejemplo, hay una chaqueta que ha tardado un mes y medio en hacerse, o una torera bordada que est¨¢ compuesta de 4.650 piezas (dos semanas de trabajo de una sola persona). Nada se ha dejado al azar. ?Lo realmente interesante para un dise?ador es que sus prendas est¨¦n muy elaboradas, con patronajes complicados, investigaci¨®n en los tejidos (hay sedas, algodones, linos, en varios gruesos y texturas, mezclados entre ellos, con bordados ¨²nicos) y que, sin embargo, tengan una apariencia sencilla, ligera y que se pueda usar?. Sin duda, una herencia de la alta costura, por la que siente aut¨¦ntica pasi¨®n (otro punto en com¨²n con Jes¨²s del Pozo), especialmente por Pedro Rodr¨ªguez ¨C?tuve la suerte de que fuera mi profesor durante unos meses?¨C, Pertegaz, Balenciaga, Poiret y madame Vionnet.
Pero el desfile en Espa?a ya ha sido, y ahora hay que pensar en el futuro y en el proyecto internacional. Delpozo ya tiene un showroom comercial en Nueva York donde se va a presentar la primera colecci¨®n. Aunque a¨²n no se han dado fechas definitivas, el objetivo es afianzar la firma en Madrid, donde abrir¨¢n un buque insignia, y proseguir con aperturas de tiendas en ciudades como Mosc¨², Shangh¨¢i o Dub¨¢i. De hecho, ya se est¨¢ trabajando para que tanto la ubicaci¨®n de los puntos de venta como la decoraci¨®n sean coherentes con el cambio que est¨¢ desarrollando la marca. ?Hoy en d¨ªa, tal y como est¨¢ la situaci¨®n de este pa¨ªs y los problemas que existen, los dise?adores no tienen m¨¢s remedio que tener una visi¨®n mucho m¨¢s global si quieren sobrevivir. En mi caso, hace muchos a?os que me lanc¨¦ al vac¨ªo [ha desfilado en Madrid, Barcelona, Mil¨¢n, Par¨ªs o Tokio]. Fui atrevido y me sali¨® bien, pero as¨ª es como yo entend¨ªa mi trabajo, no lo ve¨ªa solo en Espa?a. No s¨¦ qu¨¦ piensan los creadores nacionales, he pasado mucho tiempo fuera y no tengo mucha relaci¨®n con la gente de la moda de aqu¨ª, pero lo que est¨¢ claro es que hay un problema de comunicaci¨®n con el exterior. Y es una pena, porque en este pa¨ªs hay gente con mucho talento?.
??El pantal¨®n carrot evoca a las menonitas y a su look de campo, pero con un punto sofisticado?, asegura el dise?ador.
Tom¨¢s Javier Biosca
El mundo, sin duda, est¨¢ cambiando y hay que prepararse estrat¨¦gicamente para lo que pueda venir. ?Al pensar en una colecci¨®n que funcionara internacionalmente, tuve muy claro que deb¨ªa hacer todo lo contrario de las grandes cadenas. Ten¨ªa que crear un proyecto muy exclusivo, un proyecto icono muy especializado. Creo que con esta crisis la gente apostar¨¢ por el buen hacer, porque se ha cansado de ser marquista. Ahora se quiere invertir en prendas que aporten verdadero valor, personalidad y atemporalidad. Fuera ya est¨¢ pasando. En China hay un p¨²blico que busca firmas distintivas, marcas que quiz¨¢ no son tan conocidas por su nombre pero que ofrecen la misma calidad?, comenta Font, quien, dentro de sus planes, no descarta volver a lo m¨¢s alto. En 2007, el dise?ador catal¨¢n fue invitado por la F¨¦d¨¦ration Fran?aise de la Couture para presentar sus colecciones en la Semana de la Alta Costura de Par¨ªs, y esto lo convirti¨® en el tercer espa?ol, tras Balenciaga y Paco Rabanne, que as¨ª lo hac¨ªa. ?Esos a?os fueron maravillosos y estimulantes. Supusieron tambi¨¦n mucha presi¨®n, pero result¨® muy gratificante debido a la gran cultura de moda que tienen los franceses. Adem¨¢s, me sent¨ª muy apoyado. Fue un m¨¢ster que me dio experiencia y que me ha sido muy ¨²til para afrontar esta nueva etapa. Ser¨ªa genial volver a repetir con Delpozo, pero una vez afianzado el proyecto internacional?.
Queda claro que, tras un a?o de forzoso silencio ¨Cfue retirado de la firma que lleva su nombre tras ciertos desacuerdos legales con la sociedad encargada de su producci¨®n y distribuci¨®n¨C, Josep Font regresa con las ideas muy claras. ?Ese par¨¦ntesis lo dediqu¨¦ a mis amigos, a leer mucho y a descansar en el Empord¨¤, mi oasis. He recargado energ¨ªas y estoy listo para volver a batallar?. Al o¨ªrlo hablar con ese ¨ªmpetu cuesta entender a quienes lo tachan de introvertido. ?Es un sambenito que me han colgado desde que empec¨¦ en el mundo de la moda, y me molesta, porque yo no soy t¨ªmido, soy discreto. No me prodigo en muchas fiestas porque lo que realmente disfruto es trabajar en mi estudio y con mi equipo?.
Su primer grupo de trabajo, sin saberlo, lo mont¨® de peque?o. Lo formaban su madre y ¨¦l. Entonces ya mostraba cierta sensibilidad hacia la imagen y su progenitora se lo llevaba a comprar a elegantes tiendas barcelonesas como Santa Eulalia o Todo para la mujer. ?Mi madre, que era una persona con mucho criterio, siempre me preguntaba: ¡°?Te gusta?¡±. Si yo le dec¨ªa que no, no se lo compraba. Supongo que haber compartido mi infancia con alguien a quien le atra¨ªa tanto la moda me ayud¨® a desarrollar algo que yo ten¨ªa dentro. Al menos es lo que asegura mi padre [r¨ªe], a quien no le hac¨ªa demasiada gracia, y por quien estudi¨¦ Arquitectura. Hoy, que ya est¨¢ contento con mi profesi¨®n actual, debo agradecerle que me empujara a acabar la carrera porque me ha permitido desarrollar otras visiones est¨¦ticas que han enriquecido mi trabajo?. Para Jes¨²s del Pozo, la arquitectura tambi¨¦n era una inspiraci¨®n esencial.
?He introducido el bordado, que en la casa no exist¨ªa, y he ampliado la gama de colores. El objetivo es darle a la firma un aire m¨¢s fresco?, se?ala Josep.
Tom¨¢s Javier Biosca
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