9 fotosNueve datos sorprendentes sobre Elsa Peretti: la joyera estrella de Tiffany & Co. que viv¨ªa en un pueblo de GironaLa italiana, dise?adora de joyas y uno de los nombres imprescindibles del Nueva York de los setenta, ha fallecido a los 80 a?os.Patricia Rodr¨ªguez20 mar 2021 - 15:18CETWhatsappFacebookTwitterBlueskyLinkedinCopiar enlaceElsa Peretti lleg¨® a Nueva York a finales de los a?os sesenta del pasado siglo, con una mano delante y otra detr¨¢s, a probar suerte como modelo en la Gran Manzana. Como cont¨® unos a?os despu¨¦s en The New York Times, era un fr¨ªo d¨ªa de febrero de 1968: "Llegu¨¦ con un ojo morado, de mi amante, que no quer¨ªa que me fuera". Pero lo que pocos sab¨ªan entonces en Manhattan era que la italiana pertenec¨ªa a una de las familias m¨¢s importantes de Europa. Naci¨® en Florencia, en 1940, la m¨¢s joven de las hijas del magnate del petr¨®leo Ferdinando Peretti. Su madre, Maria Luisa Pighini, era un personaje fundamental de la alta sociedad italiana de la ¨¦poca. "Mi madre se vest¨ªa entonces en los mejores modistos de Roma y a m¨ª me hac¨ªa dos trajes al a?o. La recuerdo bebiendo t¨¦, rodeada de libros y de amigos con los que manten¨ªa largas tertulias. Era una intelectual. Pintaba, escrib¨ªa. Muy fumadora, como yo", recordaba la dise?adora en una entrevista en esta revista en 2012.Estudi¨® en Roma y Suiza, pero seg¨²n crec¨ªa descubr¨ªa que no encajaba en el ambiente opresivo de la burgues¨ªa romana de los a?os cincuenta. Con 21 a?os se escap¨® de casa. "No aguantaba a nadie. Me fui a Suiza donde ejerc¨ª como maestra de italiano, monitora de esqu¨ª y otras cosas divertidas". No volvi¨® a hablar con sus padres durante a?os. Con su padre se reconcili¨® poco tiempo antes de la muerte de este. Se estren¨® como modelo en Barcelona, aunque nunca le apasion¨® aquella profesi¨®n. "Entonces conoc¨ª a Dal¨ª, nos hicimos amigos ¨Cme gustar¨ªa tenerlo ahora para poder conversar con ¨¦l¨C. Era la ni?a mimada de Barcelona, aunque tuve un amor dif¨ªcil con el escultor?Xavier Corber¨®".En Nueva York enseguida se convirti¨® en una de las imprescindibles en las fiestas interminables en Studio 54 y en mejor amiga de los dise?adores Sant¡¯Angelo y Halston. Precisamente ellos fueron los primeros en confiar en sus joyas de siluetas org¨¢nicas para acompa?ar sus creaciones sobre la pasarela. Halston fue el que la introdujo en Tiffany & Co., joyer¨ªa emblem¨¢tica para la que pronto empez¨® a dise?ar, y el que la ayud¨® a negociar su primer contrato con la casa. Por el mismo la italiana conserv¨® su nombre y el derecho sobre sus dise?os. Su amigo sab¨ªa muy bien el peligro que supon¨ªa vender el nombre: ¨¦l hab¨ªa cometido el error de deshacerse del suyo un a?o antes.Cuando Halston preparaba su primera fragancia femenina, en 1975, le pidi¨® a su amiga que se hiciera cargo del dise?o del frasco. Ella propuso una botella de l¨ªneas curvas, inspirada en una l¨¢grima. Los ejecutivos de Max Factor se llevaron las manos a la cabeza al ver la creaci¨®n y defendieron una alternativa m¨¢s rectangular. Gan¨® Peretti y gan¨® la compa?¨ªa: aquel se convirti¨® en uno de los lanzamientos m¨¢s exitosos de la historia de la perfumer¨ªa y en un best seller durante a?os.Donde Elsa Peretti alcanz¨® el estrellato fue en Tiffany & Co., como dise?adora para la joyer¨ªa. Se estren¨® tambi¨¦n rompiendo con los estereotipos y proponiendo piezas en plata. Sobre su posible fichaje, escrib¨ªan en 1974 The New York Times: "Es un gran paso para la modelo reconvertida en dise?adora y posiblemente uno de los m¨¢s grandes para la tienda. La se?orita Peretti trabaja fundamentalmente con plata y Tiffany no usa joyas de plata desde hace un cuarto de siglo". Su primera pieza para la ense?a fue tambi¨¦n la m¨¢s famosa: el brazalete Bone que se ha convertido en uno de los grandes cl¨¢sicos de la joyer¨ªa casi medio siglo despu¨¦s. "Lo hice con Abad, un platero con el que pasamos noches enteras trabajabando", recordaba en 2012. "Colaborar con artesanos es fascinante. Uno puede ser un artista, pero si la persona que ejecuta no tiene alma, no sale nada".Seg¨²n Vanity Fair los dise?os de Peretti suponen anualmente un 10% de las ventas de la compa?¨ªa. Un gigante que en 2018 ten¨ªa un valor global estimado de 20.000 millones de d¨®lares seg¨²n la consultora Bain & Co.Pero antes de trasladarse a Nueva York, Elsa Peretti se hizo con algunas casas en ruinas en el municipio de Sant Mart¨ª Vell, en Girona, por unos 3.000 d¨®lares de la ¨¦poca. Al pueblo regres¨® tras su paso huracanado por Manhattan y all¨ª fallec¨ªa esta semana, a los 80 a?os. El rinc¨®n se lo descubri¨® la fot¨®grafa Colita: "En medio de la sofisticaci¨®n neoyorquina esto era la aventura. No hab¨ªa luz ni agua corriente".Nunca se cas¨®, pero fue amante de varios hombres c¨¦lebres. Con el fot¨®grafo Helmut Newton protagoniz¨® una instant¨¢nea inolvidable de aquella ¨¦poca. Una en la que aparece vestida de conejita de Playboy en una azotea. La creativa recordaba as¨ª el momento en Vanity Fair: "Helmut y yo ten¨ªamos una aventura. ?l era escorpio y hay algo entre los escorpio y los tauro. Una ma?ana me dijo: 'Quiero hacerte una foto'. No sab¨ªa qu¨¦ ponerme. Fui a mi armario y sal¨ª con este disfraz que hab¨ªa usado en una fiesta con Halston. Helmut estaba at¨®nito. Me llev¨® a la terraza y tom¨® la foto. Eran las 11 de la ma?ana".Su legado va mucho m¨¢s all¨¢ del dise?o o la fotograf¨ªa. Con la fortuna que hered¨® de su padre cre¨® una fundaci¨®n con su nombre, la Nando and Elsa Peretti Foundation, con la que se ha encargado de apoyar a causas de todo tipo en casi 70 pa¨ªses: conservaci¨®n de la vida silvestre, defensa de los derechos humanos, la salud o la educaci¨®n.