Encima de maltratada, apaleada

"?l, un hijo de puta y su mujer que lo perdon¨® y lo defiende, una tonta perdida".

"Y despu¨¦s de eso, ?se casa con ¨¦l? ?l es un sinverg¨¹enza, ella es tonta de remate".

"Y luego se casa con ¨¦l, qu¨¦ piensa, ?que va a cambiar cuando est¨¦n casados? Nadie la juzga a ella, se juzga solita".

Estos son algunos de los comentarios y reacciones que se pudieron leer ayer en la p¨¢gina de Facebook y en la noticia que El Pa¨ªs public¨® a prop¨®sito de la expulsi¨®n de la NFL de Ray Rice, el jugador que agredi¨® a su pareja el pasado mes de febrero y que ha sido desterrado del f¨²tbol americano despu¨¦s de que TMZ filtrase un v¨ªdeo en el que se comprueba la brutal agresi¨®n que propin¨® a la que por aquel entonces era su novia (y ahora esposa), Janay Palmer. La joven, que pidi¨® en su d¨ªa perd¨®n por "su papel la noche del incidente", ha criticado duramente la expulsi¨®n de su marido y ha salido en defensa de ¨¦ste y de "su amor verdadero" en su cuenta de Instagram. "Quitarle algo al hombre que amo, por lo que se ha esforzado al m¨¢ximo toda su vida, s¨®lo para ganar audiencia, es terrible. ?Se trata de nuestra vida! ?Por qu¨¦ no lo entienden? Si sus intenciones son lastimarnos, avergonzarnos, hacernos sentir solos, quitarnos toda la felicidad, entonces lo han logrado en muchos niveles. Por ahora continuaremos creciendo y mostr¨¢ndole al mundo lo que es el amor verdadero", apuntaba en la red social.

Sus declaraciones y actitud de apoyo total frente a su marido y agresor han provocado un alud de cr¨ªticas en las redes sociales, incapaces de comprender por qu¨¦ una mujer llega a casarse con un hombre capaz de escupir sobre su cara, golpearla brutalmente y arrastrar por el suelo sin miramientos (Ray y Janay se casaron en marzo, semanas despu¨¦s de que un v¨ªdeo parcial de la agresi¨®n del ascensor se filtrase. En junio celebraron una ceremonia privada, donde la hija de ambos, Rayven ¨Cen honor al equipo de Ray, los Ravens¨C, baila el Happy de Pharrell en lo que parece una fiesta id¨ªlica). La incredulidad de la opini¨®n p¨²blica, no obstante, puede caer en un nuevo caso de agresi¨®n. Comentarios como "es tonta de remate" o "si sigue con ¨¦l, es culpa suya" reflejan c¨®mo la sociedad sigue tendiendo a generar una doble victimizaci¨®n sobre aquellos que padecen violencia dom¨¦stica. Por un lado, existe la agresi¨®n de su pareja. Por otro, ve como su entorno social culpabiliza y menosprecia la decisi¨®n de convivir y mantener la relaci¨®n con un maltratador.

La v¨ªctima no es culpable

"Desde fuera todo parece muy f¨¢cil y de soluci¨®n instant¨¢nea, pero las mujeres necesitan una recuperaci¨®n integral para salir de este tipo de relaciones. El proceso que pasa una v¨ªctima de violencia de g¨¦nero dura una media de 10 a?os. Hasta que ha pasado esa fecha, la agredida no se plantea salir de la situaci¨®n que vive", explica la directora de Violencia de G¨¦nero y Asistencia a V¨ªctimas de la Junta de Andaluc¨ªa, Encarnaci¨®n Aguilar. La complejidad emocional de este tipo de relaciones afectivas acent¨²a la dificultad de su tratamiento y el "?por qu¨¦ diablos sigues con ¨¦l?" no es el mejor acercamiento. "Probablemente nos enfrentamos a otras situaciones de maltrato verbal, violencia sexual y psicol¨®gica y una fuerte dependencia emocional que debe trabajarse sin caer en la doble victimizaci¨®n", apunta Aguilar, que tambi¨¦n dirige el congreso anual para el estudio de la violencia contra las mujeres.

El estudio Permanencia de la v¨ªctima en una relaci¨®n de maltrato, a cargo de los catedr¨¢ticos en psicolog¨ªa cl¨ªnica Pedro J. Amor y Enrique Echebur¨²a, ya destaca "la importancia de respetar las decisiones de las v¨ªctimas con objeto de prevenir la victimizaci¨®n secundaria" y apunta a dos factores psicosociales que son aut¨¦nticas barreras para el abandono de la relaci¨®n: la dependencia econ¨®mica del agresor (Rice ganaba m¨¢s de 35 millones de d¨®lares anuales en los Ravens, cuando pidi¨® la mano de Palmer, le regal¨® un anillo de compromiso dentro de un Acura a estrenar) y la presencia de hijos peque?os a cargo de la v¨ªctima (antes de que terminase la universidad, Palmer se qued¨® embarazada y no pudo acabar sus estudios hasta despu¨¦s de dar a luz).

Por qu¨¦ segu¨ª, un hashtag para concienciar

A ra¨ªz de la filtraci¨®n del v¨ªdeo de la brutal agresi¨®n de Rice, en Twitter ha despegado con fuerza el hashtag #WhyIStayed (por qu¨¦ segu¨ª), donde m¨¢s de 92.000 mujeres (y algunos hombres) han compartido en 140 car¨¢cteres sus historias personales de abuso y maltrato y han ahondado en la paradoja de continuar en una relaci¨®n con violencia dom¨¦stica. La conversaci¨®n virtual la inici¨® Beverly Gooden, una escritora que ha narrado en una cadena de tweets por qu¨¦ tard¨® tanto en salir de una relaci¨®n t¨®xica y por qu¨¦ los que cargan contra Janay Palmer est¨¢n equivocados:

I stayed because I was halfway across the country, isolated from my friends and family. And there was no one to help me. #WhyIStayed

I had to plan my escape for months before I even had a place to go and money for the bus to get there. #WhyIStayed

La historia de Gooden ha abierto la puerta a un crudo debate sobre el arduo proceso de abandonar a un maltratador. "No puedo hablar por Janay Rice, solo puedo hablar por m¨ª", explicaba ayer? en una entrevista a Mic, "pero cuando vi que la gente se preguntaba en Twitter ?Por qu¨¦ se cas¨® con ¨¦l? o ?Por qu¨¦ no lo dej¨®? sent¨ª verg¨¹enza, la misma verg¨¹enza que sent¨ª cuando viv¨ª mi matrimonio violento. Una especie de culpa que me manten¨ªa en una coraza plagada de silencios. As¨ª que hoy, por una raz¨®n que no puedo explicar, he dicho basta. Sab¨ªa que ten¨ªa una respuesta para aquellos que se preguntan por qu¨¦ las v¨ªctimas de violencia se quedan". Vaya si lo ha conseguido. Miles de personas han contado su historia para que aquellos que culpabilizan a la v¨ªctima reflexionen antes de menospreciar y proferir insultos. No todo es tan f¨¢cil y simple como parece.