La obra de Ang¨¦lica Liddell sobre los feminicidios que Rosal¨ªa tiene en su mesilla de noche

Entre tuits sobre nuevos prop¨®sitos e im¨¢genes festivas, ayer, d¨ªa de A?o Nuevo, en las redes sociales se hizo viral la noticia de que Rosal¨ªa hab¨ªa dejado de fumar. Lo anunciaba la propia cantante el d¨ªa de Nochevieja con un selfi en el que sosten¨ªa un cigarro. ¡°Prop¨®sito del a?o: ¨²ltimo ¡®sigarrito¡¯ del a?o¡±, escrib¨ªa. Esa noche, tal y como documentaba en sus stories de Instagram, la pas¨® como media Espa?a: con sus amigos en casa entregada al karaoke cantando Estopa y Miguel Bos¨¦. Pero hubo una imagen que hasta hoy ha pasado desapercibida.

En el carrusel de im¨¢genes que Rosal¨ªa subi¨® para despedir 2023 y que ya cuenta con casi un mill¨®n y medio de ¡®me gusta¡¯, la artista aparec¨ªa en una de ellas somnolienta en la cama, mirando su m¨®vil y con un libro en la mesilla de noche.

¡°Buenos d¨ªas, Rosal¨ªa, que ¡®La casa de la fuerza¡¯ de Ang¨¦lica Liddell te acompa?e¡±, tuiteaba la editorial La U?a Rota, que public¨® el texto de la dramaturga en 2011 , por el el que Liddell gan¨® el premio nacional de Literatura dram¨¢tica el a?o siguiente. Como era de esperar, los fans han empezado a alabar la elecci¨®n en la red social. ¡°No era la noticia que sab¨ªa que necesitaba para empezar bien el a?o¡±, tuiteaba uno de ellos.

Puede que no sea casual que Rosal¨ªa haya subido esta imagen aparentemente espont¨¢nea. ¡®La casa de la fuerza¡¯ revolucion¨® el teatro nacional en su momento y consagr¨® a Liddell como una dramaturga ¨²nica tanto a su aproximaci¨®n a las grandes tem¨¢ticas universales como a su puesta en escena: apoyada en ¡®Las tres hermanas ' de Ch¨¦jov, esta vez trasladadas a M¨¦xico, la autora catalana realiza una exploraci¨®n sobre los ingentes da?os que causan los hombres a las mujeres, un retrato descarnado del patriarcado y de su idea del amor como posesi¨®n. Dadas las noticias que la artista ha tenido que protagonizar a lo largo del ¨²ltimo semestre del a?o, la elecci¨®n de publicar una fotograf¨ªa con dicho texto, aunque sea espont¨¢nea, dar¨¢ alas a sus fans, siempre dispuestos a analizar hasta el ¨²ltimo gesto de la cantante.

Sin ir m¨¢s lejos, hace dos veranos la editorial Anagrama tuvo que publicar en Twitter cu¨¢l era el libro que estaba leyendo la catalana, que sub¨ªa una imagen de sus pies en la que tambi¨¦n aparec¨ªa una contraportada con el caracter¨ªstico color amarillo de la editorial. Era ¡®En la tierra somos fugazmente grandiosos¡¯, del vietnamita Ocean Vuong, y que narra las crudas vivencias de un joven migrante y homosexual. Este verano, tras su ruptura, otra imagen de su instagram revelaba que estaba leyendo ¡®Feminismo pasado y presente¡¯, de Camile Paglia, aunque la artista, en un directo en la red social el pasado julio, cont¨® que entonces estaba leyendo ¡®Agua y Jab¨®n¡¯, el tratado sobre la elegancia involuntaria de la periodista Marta D. Riezu y que, aunque ya era un ¨¦xito, agot¨® existencias tras las declaraciones de la artista.

Rosal¨ªa no ha llegado a montar un club de lectura ¡®prescriptor¡¯ como Dua Liapa o Kaia Gerber, pero es consciente de que sus recomendaciones se convierten casi en mandamientos para miles de seguidores. No ser¨ªa de extra?ar que la U?a Rota tuviera que imprimir una nueva edici¨®n de ¡®La casa de la fuerza¡¯. Tampoco que la cantante est¨¦ dejando pistas de alguna colaboraci¨®n o plan de futuro. No sabemos si la artista y Ang¨¦lica Liddell se conocen, pero s¨ª , por ejemplo, que ambas ya colaboraron en el ¨²ltimo disco del Ni?o de Elche, ¡®Flamenco. Mauselo de celebraci¨®n, amor y muerte¡¯.