Vicky Luengo: ¡°Una actriz tiene que tener misterio. Si ense?ara mi vida en redes har¨ªa peor mi trabajo¡±
El rostro, la voz y el cuerpo de la Laia de ¡®Antidisturbios¡¯ o de la Elena de ¡®Suro¡¯ pertenec¨ªan a esta actriz, pero el alma de los personajes que encarna esta int¨¦rprete sobrenatural viene de alg¨²n lugar que ni ella misma sabe. Hablamos con ella ahora que protagoniza ¡®Reina Roja¡¯
Vicky Luengo es un ectoplasma. No tiene cara. No tiene cuerpo. Es decir, s¨ª lo tiene, y es reconocible, pero es tan maleable como el mercurio l¨ªquido de Terminator 2. Todos la vimos en la serie Antidisturbios, de Rodrigo Sorogoyen, donde encarnaba a una polic¨ªa de asuntos internos con garra. O en Suro, en la que era Helena, la urbanita trasplantada a un bosque. Pero yo me di cuenta tras ver su mon¨®logo Prima Fascie, en el que encarna a un...
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Vicky Luengo es un ectoplasma. No tiene cara. No tiene cuerpo. Es decir, s¨ª lo tiene, y es reconocible, pero es tan maleable como el mercurio l¨ªquido de Terminator 2. Todos la vimos en la serie Antidisturbios, de Rodrigo Sorogoyen, donde encarnaba a una polic¨ªa de asuntos internos con garra. O en Suro, en la que era Helena, la urbanita trasplantada a un bosque. Pero yo me di cuenta tras ver su mon¨®logo Prima Fascie, en el que encarna a una feroz abogada que es violada. Tras verla poner en pie a todo un teatro, sal¨ª a tomar aire. Me estaba yendo a casa cuando o¨ª que alguien gritaba mi nombre. En una esquina, arrebujado en un anorak enorme y bajo una capucha, hab¨ªa un cuerpo que me saludaba con la mano. Parec¨ªa Kenny, el dibujo animado de South Park, pero no era un dibujo animado, sino una personita que me hablaba con voz suave. La voz de Vicky Luengo. Acababa de ver a un hurac¨¢n en el escenario, una mujer que ten¨ªa que medir al menos dos metros y medio, con un torrente de voz, ?qui¨¦n era esta joven que me hablaba?
Luengo (Palma de Mallorca, 33 a?os) es una Houdini de la actuaci¨®n. Hace lo que quiere. Y hace que te lo creas. Tras a?os de trabajo duro en teatro, cine y televisi¨®n, ahora ha estrenado su serie m¨¢s internacional, Reina Roja, que adapta las exitosas novelas de Juan G¨®mez-Jurado. Durante una hora desgrana su trabajo, sus ¨²ltimas lecturas ¡ªcita a Luis L¨®pez Carrasco, bell hooks y Graham Greene¡ª con un torrente de palabras e ideas bien estructuradas y despu¨¦s se va. ?Por d¨®nde y hacia d¨®nde? No lo s¨¦. Lo ha vuelto a hacer.
Su papel en Reina Roja tiene algo de superhero¨ªna, es distinto a otras cosas que ha hecho. Para empezar, es una superproducci¨®n. ?C¨®mo sienta el viraje?
Una de las cosas m¨¢s dif¨ªciles ha sido traer esta sensaci¨®n de superhero¨ªna a la realidad, porque Antonia es una mujer con una depresi¨®n de caballo. El reto era retratar audiovisualmente su cabeza. Ha sido muy divertido porque he rodado persecuciones en coche, ataques de monos, jam¨¢s hab¨ªa rodado algo as¨ª. Era como un parque de atracciones. Aprend¨ª a rodar efectos con cromas, sin que hubiera ni un objeto, teniendo que imaginar. Aunque ahora que lo pienso, estar en medio de un plat¨® verde se parece mucho al teatro, porque tienes que hacer imaginar al espectador que hay algo ah¨ª que en realidad no existe.
?Qu¨¦ supuso para usted Antidisturbios?
Soy afortunada porque nunca me ha faltado trabajo. Pero s¨ª recuerdo que mi vida profesional antes de Antidisturbios era muy cansada. Porque es muy frustrante sentir que tienes que volver a empezar cada vez, por m¨¢s que haya ido bien, nunca acabas de relajarte. Me di cuenta m¨¢s tarde de que mi ¨¦xito era que llevaba trabajando 10 a?os. Antidisturbios me ha tra¨ªdo una peque?a sensaci¨®n de que he entrado en un oasis de tranquilidad, que puede durar un a?o o dos m¨¢s o acabarse ma?ana. He podido dejar de tener la sensaci¨®n de que ma?ana no me van a llamar. Pero me puede volver, lo hemos visto mil veces.
Ha dicho que quiere que la llamen Victoria, no Vicky. Tambi¨¦n quiere hacer papeles en los que su personaje sea feliz. ?Tiene algo que ver?
Tiene m¨¢s que ver con c¨®mo me veo yo que con los dem¨¢s. Eleg¨ª Vicky con 14 a?os para hacer mi primer papel porque Victoria me parec¨ªa nombre de se?ora, pero ahora que ha pasado el tiempo me empieza a escamar firmar los proyectos como Vicky, me empieza a parecer que no soy yo, aunque no me importa que me llamen Vicky. Mi familia me llama Victoria, mi chico tambi¨¦n. Como es un tema de autopercepci¨®n, tambi¨¦n me doy cuenta de que hago muchos papeles en los que sufro mucho, me gustar¨ªa hacer otros donde sea m¨¢s feliz (r¨ªe).
?Es casual que le ofrezcan papeles en los que sufre tanto?
No he tenido hasta hace muy poco el privilegio de elegir mis papeles. Me gustar¨ªa darte una respuesta m¨¢s elaborada, pero es algo intuitivo. Elige mi cuerpo m¨¢s que mi cabeza. Me pas¨® con Suro, con Prima Fascie. Suelen ser proyectos en los que yo me sienta identificada moral y pol¨ªticamente. Que sea algo que no haya hecho hasta entonces, comedia f¨ªsica, por ejemplo. Y que pueda hacer un personaje rodeada de gente que me interese: guion, reparto, direcci¨®n.
?Qu¨¦ tal ha sido volver a trabajar con Hovik Keuchkerian?
En Antidisturbios solo ten¨ªamos una secuencia y Sorogoyen nos pidi¨® que, como era un interrogatorio, que no hablara con ¨¦l ni con el resto de los actores antes, as¨ª que tuvimos un ¨²nico ensayo pero no hablamos. Y el d¨ªa del rodaje est¨¢bamos en salas distintas hasta que nos toc¨® rodar. ?l ha dicho que en ese momento pens¨®: ¡°Tengo a un toro delante¡±. Y yo pens¨¦ lo mismo, tiene una energ¨ªa tan potente... En Reina Roja ha sido genial. Es muy terrenal, muy leal, de las personas m¨¢s leales que conozco. Muy trabajador y muy divertido. Fue un rodaje largo, de seis meses y medio, muy cansado. Cuando te faltan las fuerzas es fant¨¢stico que alguien te haga re¨ªr.
Antes las actrices y actores no ten¨ªan tanta exposici¨®n como desde que existen las redes. Muchas actrices muestran su casa, su intimidad, su cuerpo. Hay mucha gente que trabaja tanto de actriz o actor como de influencer. No es su caso.
He estado en conflicto con la exposici¨®n durante mucho tiempo, me anticipaba a lo que me podr¨ªan exigir. Yo estoy enganchada a las redes como mucha otra gente, y sin juzgar lo que hagan los dem¨¢s, a m¨ª me parece que un actor o una actriz tiene que tener misterio. Si me ves en todos los momentos de mi vida, cuando me veas en una peli siempre me ver¨¢s a m¨ª detr¨¢s del personaje. Ser¨ªa peor actriz si ense?ara mi vida.
Tampoco juega mucho a mostrar su f¨ªsico.
Aunque parezca de autoayuda, cuando me he empezado a querer y a aceptar, me ha empezado a ir bien. Cuando ten¨ªa 19 o 20 a?os iba a los castings y me pon¨ªa sujetador de relleno, me maquillaba much¨ªsimo, intentaba ser la actriz que yo pensaba que los dem¨¢s quer¨ªan. Me llamaban para castings de series para hacer de prota despampanante y yo no entro en ese patr¨®n. En consecuencia, ten¨ªa m¨¢s inseguridades f¨ªsicas que nunca. Haciendo teatro me di cuenta de que lo que destacaba de m¨ª era otra cosa, y empec¨¦ a usarlo. Para el casting de Antidisturbios fui con un mo?o y la cara lavada. Tengo m¨¢s conflictos ahora con c¨®mo vendemos la feminidad en la industria cinematogr¨¢fica.
?A qu¨¦ se refiere?
No es tanto f¨ªsico como ideol¨®gico. Me cuestiono c¨®mo vendemos qu¨¦ es una mujer, la belleza, el erotismo, la sensualidad. En ese sentido, lo que estoy intentando es ser coherente: lo que no me parece bien es ir yo en sandalias y vestido de tirantes a un estreno en febrero, mientras mi compa?ero de reparto va tranquilo en traje y yo, en cambio, me pillo una gripe. Si me quiero poner un tac¨®n, poder pon¨¦rmelo, pero ser lo m¨¢s coherente posible con mi bienestar, y mi salud.
En Prima Fascie, el texto y su trabajo actoral le hacen entrar en conflicto con debates contempor¨¢neos sobre consentimiento, sexualidad y qu¨¦ es una mujer hoy.
A trav¨¦s de Prima Fascie he explorado mucho estos temas. Es un mel¨®n enorme. ?Deber¨ªa, como dice bell hooks, hacer ver a los hombres que ellos ganar¨ªan si interiorizaran las ense?anzas del feminismo? Me lo cuestiono mucho. Al menos he aprendido a tener una opini¨®n sobre con qu¨¦ feminismo contempor¨¢neo quiero colaborar.
?Y cu¨¢l es?
Como estamos hablando de igualdad, para m¨ª en la igualdad tambi¨¦n est¨¢ incluida la responsabilidad. Estoy a favor de ayudar a trav¨¦s del amor, de la comunicaci¨®n, para que la gente abra los ojos. Pero lo har¨¦ si t¨² aceptas como hombre la misma responsabilidad que acepto yo como mujer en ser feminista. En Prima Fascie yo digo: ¡°La ley ha sido moldeada por generaciones y generaciones de hombres¡±. Bueno, la imagen de lo que es una mujer deseable tambi¨¦n. Entonces, como mujer, yo quiero generar la imagen de la mujer que quiero ser.
?C¨®mo prepara cada papel?
Cada personaje me pide hacer una cosa diferente. Con Antonia Scott [la protagonista de Reina Roja] yo quer¨ªa que dentro del c¨®digo de la serie t¨² la creyeras, que vieras a esa chica en su casa, con agorafobia, ansiedad, que le da miedo salir. Eso mueve la serie: el dolor de Antonia. Para eso me le¨ª todos los libros que hay sobre gente con altas capacidades. Muchas veces les molestan los ruidos, los sonidos altos o las etiquetas de la ropa, puedes ver en la serie que a veces me rasco, me agarr¨¦ a esas cosas para crear el personaje.
?En teatro es distinto?
En Prima Fascie aprend¨ª primero el texto y luego cre¨¦ un mapa del cuerpo, un mapa emocional. En una escena voy a probar a ver qu¨¦ pasa si me duele la barriga, en otra que me sudan las manos... Era encontrar sensaciones f¨ªsicas, porque para m¨ª la pregunta que plantea la obra es qu¨¦ le pasa a un cuerpo que ha sido agredido sexualmente. En el teatro la informaci¨®n tiene que estar en el cuerpo, en la tele est¨¢ en los ojos.
?Cu¨¢l es su sue?o como actriz?
Un Oscar, un Goya... y sobre todo una peli con los Hermanos Dardenne. Ser¨ªa incre¨ªble.