La drag que acaba de hacer historia en los Oscar

Quedan m¨¢s de dos meses para que veamos a las estrellas pisar la alfombra m¨¢s famosa del mundo, la del Dolby Theatre. Desconocemos hasta los nominados, o aquellos posibles favoritos que salieran triunfantes de los Globos de Oro. Pero los Oscar empiezan mucho antes del mes de febrero y esta edici¨®n, sin haberse celebrado, ya es historia. La Academia acaba de aprobar la candidatura de Kelly Mantle, una conocida cantante, actriz de variedades y concursante del reality RuPaul: Reinas del drag, para ser elegible tanto en categor¨ªa masculina como femenina. Es la primera potencial nominada de la historia de los premios, en sus 88 ediciones, a la que se le permite la doble participaci¨®n. A pesar de que se declara como g¨¦nero fluido, nos referiremos a ella utilizando el femenino para evitar poner dos art¨ªculos durante todo el texto y dificultar la lectura del mismo.

Mantle interpreta a una prostituta transg¨¦nero en la pel¨ªcula Confessions of a Womanizer (Confesiones de un mujeriego), una actuaci¨®n alabada por la cr¨ªtica y denominada de ¡°espectacular robaescenas¡±. Dirigido por Miguel Ali, el filme consigui¨® una gran repercusi¨®n en el circuito cinematogr¨¢fico alternativo del pa¨ªs, alz¨¢ndose con dos premios en el festival underground de Los ?ngeles. Seg¨²n la web The Wrap, los productores se vieron envueltos en un dilema tramitando el papeleo para optar a los Oscar, que les ped¨ªa clasificar como hombre o mujer a su int¨¦rprete. Finalmente, solicitaron que se estimara el trabajo de Kelly Mantle en cualquiera de las categor¨ªas, una petici¨®n aceptada en el d¨ªa de ayer. Mantle explic¨® en su cuenta de Twitter que se sent¨ªa ?honrada? por la consideraci¨®n.

En los ¨²ltimos a?os, aquellos que interpretan a personajes transexuales son nominados en la categor¨ªa del sexo de nacimiento del actor en cuesti¨®n. Los ¨²ltimos casos m¨¢s reconocidos, los de Eddie Redmayne en La chica danesa o Jeffrey Tambor por Transparent. A pesar de que la candidatura de Mantle no tiene ninguna posibilidad de competir con las grandes pel¨ªculas de estudio en la carrera hacia el Oscar, su mera existencia supone un hito en los premios y un ¨¦xito para la comunidad LGTB. Los tiempos est¨¢n cambiando.