¡®Made in Spain¡¯: cantera artesana, moderna y exportable

Las 18 escuelas de Arte y Dise?o del pa¨ªs cambian la imagen a nuestros productos hechos a mano. ?Los j¨®venes que salen ahora de ellas crean y producen sus propias piezas, lo que antes se conoc¨ªa como el prototipo de una labor tradicional. Pero marcan una diferencia, ahora estos j¨®venes prefieren denominarse dise?adores o profesionales de las industrias creativas?, nos cuenta Manuel Gonz¨¢lez, presidente de la Organizaci¨®n de los Artesanos de Espa?a (OAE).

La formaci¨®n est¨¢ cada vez m¨¢s valorada, como se desprende del ¨²ltimo informe realizado por Business Insider sobre los empleos m¨¢s cotizados en el mundo de la creatividad. Y t¨ªtulos como director creativo, ilustrador de moda o dise?ador de accesorios se cuelan entre los diez puestos m¨¢s solicitados. Una situaci¨®n que no es exclusiva de mercados extranjeros. En nuestro pa¨ªs encontramos ejemplos de manufacturas de ¨¦xito que defienden el made in Spain de dise?o.

Deux Souliers y Ailanto

Ser mujer y tener una cara ani?ada se lo puso dif¨ªcil a la hora de abrirse paso en el mundo del calzado a medida. ?Fue cuesti¨®n de persistencia y valor hasta encontrar mi lugar?, recuerda sobre sus comienzos Nunu Solsona, fundadora de Deux Souliers, la firma que se lanz¨® en 2010 con una producci¨®n de solo cuatro modelos. En los talleres de Mu?oz Vrandecic y el maestro ortopedista Josep Cunillera, ambos en Barcelona, guiaron sus primeros pasos. Hoy hace zapatos pr¨ºt-¨¤-porter con una colecci¨®n de 25 modelos ?que luego las boutiques personalizan con nuestro cat¨¢logo de pieles?. Dise?os realizados en f¨¢bricas de Alicante, Albacete y Menorca que atienden los pedidos desde 60 puntos de venta repartidos en once pa¨ªses. Adem¨¢s de en tiendas online como Oak New York, Yoox, Asos o Shoescribe.

Aunque se define como una firma femenina, son muchos los hombres que se acercan a ella. ?Nos gusta la idea de que un producto tenga cierta asexualidad, eso da m¨¢s juego?. Los hermanos Ailanto son dos de las personas que se han quedado atrapadas por su trabajo, haciendo que sus modelos vistieran sus pies de Deux Souliers en el desfile del pasado invierno. ?El apoyo a los oficios nacionales es parte de nuestra filosof¨ªa. As¨ª, hemos colaborado, adem¨¢s de con esta marca, con j¨®venes como Apr¨¨s Ski, Paulina Barcelona, Juan Antonio L¨®pez o Espinela?.

Sandalias Plein y Buckle (ambas 175 €).

Germ¨¢n Saiz

Manuel Bola?o

En L¨ªbano, las mujeres pasean con sus bodies de croch¨¦. Junto con las catalanas, son sus principales compradoras. ?Aprecian el trabajo que hay detr¨¢s?, comenta Manuel Bola?o mientras nos ense?a uno de ellos. ?Se tardan unos dos meses y medio en realizar cada pieza, con un precio a la venta de 1.500 euros. Un coste con el que no cubrimos ni siquiera el salario?, explica el dise?ador catal¨¢n en su atelier en Barcelona.

Desde que hizo su primera colecci¨®n, primavera-verano 2009, siempre incluye al menos una de estas piezas. Con ellas regresa a los veranos en Galicia, donde se crio: ?Recuerdo los ratos con mi abuela y mi madre en la calle, hablando con las vecinas, mientras hac¨ªan labores de punto o bordado?.

Con tres mujeres, dos que conoc¨ªa de Galicia y una joven que se ha incorporado de la Ciudad Condal, elabora cada temporada cerca de 20 prendas de artesan¨ªa. ?Los j¨®venes valoran cada vez m¨¢s estas t¨¦cnicas y quieren aprenderlas?. As¨ª lo demuestra la pasarela de Nueva York, donde Maria Ke Fisherman muestra sus vestidos de ganchillo hechos por monjas de clausura. O Jos¨¦ Matteos, que triunfa en Off de la MBMFW con sus piezas de encaje de Camari?as.

?Las artesanas mayores no estaban acostumbradas a hacer cosas especiales, nos costaba entendernos, pero de esa falta de comunicaci¨®n sal¨ªan cosas muy interesantes?, recuerda el dise?ador Manuel Bola?o junto a una joven empleada.

Germ¨¢n Saiz

Abarca Shoes y Mirto

?La m¨²sica hab¨ªa dejado de sonar?, dec¨ªa el personaje de Jeremy Irons en la pel¨ªcula Margin Call (J. C. Chandor, 2011) sobre la crisis financiera. Una frase que resume, para Pedro Mart¨ªnez-Abarca, la situaci¨®n que vivi¨® en 2010. A?o en el que abandon¨® el da?ado mercado de la gesti¨®n inmobiliaria para reinventarse a s¨ª mismo. ?Pens¨¦: si te es absolutamente necesario dedicarte a otra cosa, al menos haz algo que te apasione?. Con un cr¨¦dito de 20.000 euros produjo su primer muestrario. ?Lo m¨ªnimo para ir de tienda en tienda, a puerta fr¨ªa, y que vieran el producto?.
As¨ª naci¨® en Murcia, en 2011, Abarca Shoes, con una peque?a colecci¨®n realizada por un artesano, un modelista y un experto en podolog¨ªa y biomec¨¢nica. ?Quer¨ªamos a?adir todo lo que actualmente se sabe en el perfeccionamiento de la comodidad?. Un peque?o equipo que en cuatro a?os ha alcanzado los cien profesionales.

Visitamos con ¨¦l la regi¨®n para descubrir el proceso de fabricaci¨®n con los especialistas de la zona. ?En cada uno de los modelos intervienen 20 manos. Nunca barajamos sacar la producci¨®n fuera. Si quieres retomar una artesan¨ªa milenaria de nuestro pa¨ªs, es importante que sea con nuestros profesionales, no con los de cualquier otro lado?, dice rotundo Mart¨ªnez-Abarca. Un ejemplo del porqu¨¦ es la t¨¦cnica con la que una experta hace el cosido 'punto ojal' de la suela de cada zapato. ?Tardan m¨¢s de media hora solo en hacerlo. Personalmente, pensar que llevo en los pies algo que necesita tanto tiempo me reconforta?.

Gracias a todos estos principios ha conseguido conquistar 300 zapater¨ªas de diez pa¨ªses, entre los que est¨¢n Israel, Rusia y Jap¨®n. Adem¨¢s de atraer a firmas como Mirto. ?Un miembro de la empresa encontr¨® unas abarcas, las compr¨® y se las ense?¨® a representantes de la casa. Les pareci¨® que era lo que buscaban para calzar a las modelos en los desfiles y al personal de los showrooms. Ojal¨¢ el mundo fuese siempre as¨ª de simple?, dice con humor.

Elena Fraguas, consejera adjunta a presidencia de Mirto, compara la situaci¨®n que vive la artesan¨ªa nacional con la de otros pa¨ªses como Francia o Italia: ?All¨ª se valora la especializaci¨®n de estos oficios, porque son cultura y aportan valor al producto?. Y lamenta su discriminaci¨®n respecto a otras disciplinas art¨ªsticas: ?Los estamentos correspondientes deber¨ªan valorar lo que aportan y ser ecu¨¢nimes con todos, no solo con una parte de la cultura?.

Pedro Mart¨ªnez, de Abarca, y Elena Fraguas, de Mirto.

Germ¨¢n Saiz

Centro Cer¨¢mico de Talavera

Gracias al arte no cerraron. ?Las colaboraciones que hacemos con nuevos creadores suponen, hoy por hoy, el 75% de nuestra producci¨®n?, nos cuenta satisfecha Ana Fern¨¢ndez Pecci, una de las tres fundadoras de este taller, junto con Juan Carlos Albarr¨¢n y Ram¨®n Gonz¨¢lez.

Hace 25 a?os decidieron cambiar el concepto de la cer¨¢mica tradicional de la ciudad realizando nuevos moldes. ?Y fracasamos?. Pero no cejaron en el empe?o. Azulejos, premios para asociaciones o detalles institucionales les permitieron mantener el negocio a flote. Unos encargos que todav¨ªa realizan y que se han reducido al 25% de su dedicaci¨®n.

Para entender su fama entre nuestros artistas hay que remontarse a 2008, cuando celebraron su decimoquinto aniversario. Un amigo, el dise?ador industrial Jos¨¦ Luis Espinosa, decidi¨® comisariar una retrospectiva con piezas suyas pero, adem¨¢s, convoc¨® a nuevos nombres para que reinterpretasen la tradici¨®n. ?A Jos¨¦ Luis se le fue la olla y hubo un despliegue tremendo. Uno de los invitados fue el colectivo Rub¨¦nimichi (Rub¨¦n, Michi y Luisjo), que ilustraron con su iconograf¨ªa tres albarelos (los cl¨¢sicos tarros de botica o herbolario)?. Las vasijas se bautizaron como Suerte, Poder y Milagro. Algo que no les ha faltado. Esta obra pas¨® de la exposici¨®n a la producci¨®n. ?Es la composici¨®n hecha en colaboraci¨®n con el centro de la que m¨¢s orgullosos no sentimos. Aunque la obra m¨¢s vendida, que sali¨® de sus hornos, sea nuestra manzana?, nos comenta el grupo.?

Pronto les siguieron otros artistas, como Aitor Saraiba, que hab¨ªa estudiado con el hijo de Fern¨¢ndez-Pecci. ?Era 2011, regresaba de vivir en Los ?ngeles, sin un duro y con un mont¨®n de ganas de hacer cosas nuevas. Ellos me ofrecieron hacer alguna colaboraci¨®n juntos. Entonces estaban deseando empezar algo nuevo, porque ten¨ªan la sensaci¨®n de que si no lo hac¨ªan iba a terminar todo para su empresa. Compusimos una calavera con una frase de una canci¨®n de The Smiths, nuestra primera pieza. A la que han seguido otras 25 distintas?, comenta.

Tras ¨¦l llam¨® a su puerta Guille Garc¨ªa-Hoz, ?con quien lleg¨® la revoluci¨®n?, dice entre risas Fern¨¢ndez-Pecci. El interiorista produce aqu¨ª su cabeza de ciervo Gerardo. ?Sirve de jarr¨®n, de aplique o de l¨¢mpara. Y ya hemos vendido 500?. Aprovecha para presentarnos a la elefanta Maribel, que mantiene su filosof¨ªa de obra multiuso: ?Puede ser un macetero o una champanera?, explica. La lista no se detuvo. Abraham Men¨¦ndez, m¨¢s conocido como Abe the ape; realiza aqu¨ª sus jarronejo, carnerejo y leonejo (jarrones decorados con cabezas de conejos, carneros o leones). Tambi¨¦n salieron de este horno los galleteros de Emo D¨ªaz; los mes¨ªas de Bakea o los clavos de Jacinto de Manuel. ?Todos los d¨ªas tenemos que decir que no a proyectos.

Si tienes que ampliar y contratar a un equipo mayor pierdes el control. Queremos quedarnos como estamos, con nuestra parcela, en la que avanzamos desde la tradici¨®n?, explica Ana. Antes de realizar la fotograf¨ªa, todos curiosean entre las obras de sus compa?eros. Aitor intenta convencer a Ram¨®n Gonz¨¢lez para llevarse un c¨¢liz agrietado. Rub¨¦n y Michi debaten sobre cu¨¢l de los azulejos con escenas de caza es su favorito. Y Guille pregunta si puede quedarse con todas las pruebas de las calaveras. Provocar esta fascinaci¨®n es su verdadero ¨¦xito. ?En Espa?a nos encanta comprar piezas que tengan una historia detr¨¢s, que nos la cuenten y contarla. Los procesos deshumanizados no tienen encanto ni personalidad?, concluye Garc¨ªa-Hoz.

Michi, de Rub¨¦nimichi, junto a Juan Carlos Albarr¨¢n y Ana Fern¨¢ndez Pecci, su mujer y socia en el Centro Cer¨¢mico de Talavera. A su lado Rub¨¦n (de Rub¨¦nimichi), Aitor Saraiba, Guille Garc¨ªa-Hoz y Luisjo, de Rub¨¦nimichi.

Germ¨¢n Saiz

Laut¨¥m, Mois¨¦s Nieto y Ubrique

Dos, ese es el n¨²mero de las semanas de la moda en las que ha aparecido esta firma de solo un a?o de vida. Dos presentaciones muy opuestas. Una fue sobre la pasarela, en el desfile oto?o-invierno 2015-2016 de Mois¨¦s Nieto. La otra fue en Par¨ªs, como accesorio de Solange Knowles cuando se dirig¨ªa al desfile de la maison Carven.?

Este ¨¦xito todav¨ªa sorprende a Elena Garc¨ªa Silva, su dise?adora y fundadora, que ha visto c¨®mo su producci¨®n inicial se ha duplicado, de 200 a 400 unidades, con unos precios que oscilan de los 548 a los 648 euros. Am¨¦n del incremento de puntos de venta. Sus dise?os se exhiben en templos de la moda como Sincerely Tommy (Brooklyn), Wolf and Badger (Londres), O Concept Store (Dub¨¢i), Aalis (Hong Kong) y Outspoke (Pa¨ªses Bajos); adem¨¢s de otras boutiques espa?olas en Madrid, Barcelona y Alicante.

A partir del adverbio latino 'laut¨¥' (de forma excelente, con magnificencia, elegantemente), Elena cre¨® esta firma junto a su socio, Roberto Vercellotti. ?Y con el sello made in Spain, que interpretamos como un compromiso con la artesan¨ªa?, nos cuenta Garc¨ªa Silva. Es precisamente ese compromiso el que sabe que encarece su producto. ?Estos oficios hay que pagarlos con salarios en condiciones y procurar unos derechos laborales concretos que, adem¨¢s, van unidos a su calidad. Para m¨ª es maravilloso conocer las manos que hacen realidad tus creaciones?. Y con el fin de poner rostro a los artesanos emprendemos un viaje hasta el taller de Gino Vittorio en Ubrique, C¨¢diz, que realiza sus bolsos. Nos acompa?a Mois¨¦s Nieto, el creador que subi¨® a Laut¨¥m a la pasarela en su ¨²ltimo desfile en la MBMFW.

Mois¨¦s Nieto y Elena Garc¨ªa Silva, fundadora de Laut?m, la firma de bolsos con la que el dise?ador desfil¨® en la pasada MBMFW.

Germ¨¢n Saiz

Al entrar nos recibe el director de la f¨¢brica, Jes¨²s Ortega. ?No s¨¦ si fuimos nosotros quienes elegimos esta manufactura o fue a la inversa, porque tambi¨¦n es su apuesta. Somos una marca joven con una producci¨®n peque?a y ellos nos ayudan much¨ªsimo. ?l nos entendi¨® en seguida. Al resto del taller le cost¨® un poco m¨¢s, por ser tan diferente a lo que est¨¢n acostumbrados?, explica Elena.

Los dos creadores se sientan en una de las mesas de encolado. Ella, entre risas, recuerda la primera vez que vino a trabajar aqu¨ª. ?Intentaba aprender con ellos y no era capaz ni de extender la cola con el dedo. Digamos que se estuvieron 'divirtiendo' conmigo?.

Mois¨¦s atiende a las manos que hacen realidad unos dise?os por los que sinti¨® un flechazo.?Los conoc¨ª en una feria, pas¨¦ por su stand y no pude evitar coger uno de esos bolsos. No fue solo por su dise?o arquitect¨®nico, me atraparon sus acabados. No era un accesorio m¨¢s, tienen una delicadeza especial?, recuerda. En esas fechas ¨¦l trabajaba en su colecci¨®n inspirada en La casa de Bernarda Alba de Lorca, y comprendi¨® que pod¨ªan ser grandes compa?eros. ?Solo necesitamos una cita en Madrid para hablar de materiales y colores y nos pusimos a trabajar?. As¨ª surgieron los bolsos en pelo y cuero negro con el que caminaron las modelos.

Proceso de cosido de los bolsos en el taller de Gino Vittorio en Ubrique, C¨¢diz.

Germ¨¢n Saiz

En Gino Vittorio, los operarios no se detienen un minuto. La marroquiner¨ªa ha crecido en esta localidad un 117% respecto al a?o anterior, lo que supuso una facturaci¨®n de 1.739,35 millones de euros. De las 1.591 empresas que se dedican a los accesorios de piel en Espa?a, 500 est¨¢n aqu¨ª. Y de los modelos que salen de sus f¨¢bricas, son los bolsos los que m¨¢s viajan, ya que se exporta un 51,92%, seg¨²n la Asociaci¨®n Espa?ola de Fabricantes de Marroquiner¨ªa, Art¨ªculos de Viaje y Afines (ASEFMA). ?La marroquiner¨ªa espa?ola est¨¢ creciendo mucho como consecuencia de la vuelta de las grandes marcas que hab¨ªan apostado por pa¨ªses m¨¢s baratos?, comenta Elena.

Esta es su lucha por crear l¨ªneas con las que competir frente a casas internacionales. ?El hecho en Espa?a es un sello de calidad que habla por s¨ª solo. Tenemos las mejores materias y manos. Nuestra obligaci¨®n es crear nuevos dise?os que atraigan al consumidor y que actualicen y fomenten estos oficios. Un producto bueno y diferente es algo que agradece un comprador informado?, concluye Nieto