¡°?Quieres saber lo que se interpone entre mis Calvin y yo?¡±: 40 a?os del anuncio de televisi¨®n que conmocion¨® a Estados Unidos

¡°Sobre la base del gusto¡±. No titube¨® Leslie Lillian, portavoz de la cadena de televisi¨®n ABC, cuando fue preguntada acerca de los fundamentos detr¨¢s de la censura el ¨²ltimo anuncio de Calvin Klein. En la emisora rival, la CBS, tampoco se anduvieron con rodeos. ¡°No re¨²ne los est¨¢ndares de aceptabilidad. Podr¨ªa haber sido detenido por su lenguaje, por su contenido o por todo¡±, declar¨® Jeff Erdel, un vocal de la emisora a la agencia United Press. Era un 19 de noviembre de 1980, faltaban apenas unos d¨ªas para la celebraci¨®n de Acci¨®n de Gracias y las cadenas de televisi¨®n no iban a permitir que a millones de familias se les atragantara el pavo viendo a una joven de solo 15 a?os mirar a c¨¢mara y entonar uno de los esl¨®ganes m¨¢s m¨ªticos de la industria publicitaria contempor¨¢nea: ¡°?Quieres saber lo que se interpone entre mis Calvin y yo? Nada¡±.

40 a?os despu¨¦s, la campa?a publicitaria fotografiada por el legendario Richard Avedon sent¨® las bases de la estrategia de comunicaci¨®n que convertir¨ªa a Calvin Klein en una de las grandes firmas de la moda internacional. ¡°Los vaqueros son como el sexo. Cuanto m¨¢s apretados, mejor se venden¡±, recordar¨ªa el dise?ador neoyorquino. Erotismo juvenil, ambig¨¹edad sexual y provocaci¨®n deliberada en busca de una indignaci¨®n generalizada que ampl¨ªe el eco medi¨¢tico del lanzamiento. En el caso de la marca minimalista, el esc¨¢ndalo es el anuncio. Y en el caso de la Lolita interpretada por Brooke Shields, la imagen m¨¢s definitoria de la d¨¦cada que acababa de empezar.

No fue ning¨²n Don Draper de turno, sino la pluma de la escritora y periodista Doon Arbus, hija de la m¨ªtica fot¨®grafa Diane Arbus, la que engendr¨® el eslogan de la campa?a. ¡°Doon, Dick Avedon y yo trabajamos cada noche juntos en el estudio de Dick (Avedon). Nos lo pasamos genial y lo hicimos nosotros mismos porque sab¨ªamos que pod¨ªamos hacerlo mejor que las agencias publicitarias de Madison Avenue¡±, confes¨® en una entrevista Klein, que hab¨ªa lanzado su primera colecci¨®n de vaqueros solo dos a?os antes, en 1978. Seg¨²n recuerda el New York Times, los pantalones eran tan estrechos que varias tiendas de Manhattan recurrieron incluso a la compra de sof¨¢s para que los clientes se tumbaran en ellos para poder abroch¨¢rselos.

La elecci¨®n de la modelo, aquella joven que insinuaba que no vest¨ªa ropa interior mientras se reclinaba en posturas imposibles luciendo una camisa burdeos desabotonada y vaqueros azules, tampoco fue casual. Sumergida en la industria desde antes incluso de cumplir el primer a?o de vida, y explotada por su madre y manager Teri durante el resto de su traum¨¢tica adolescencia, Shields ya era un rostro relacionado con la controversia cuando pos¨® ante la c¨¢mara de Avedon. Con solo 11 a?os hab¨ªa dado vida a una prostituta en el filme La peque?a, sobre la vida en un burdel de la Nueva Orleans de 1917, y en la que aparec¨ªa desnuda en varias escenas. ¡°Brooke Shields suscita el revuelo sobre la pornograf¨ªa infantil en el cine¡±, afirm¨® la revista People por aquel entonces, con ella en portada. Aunque la pel¨ªcula fue prohibida en ciudades como Toronto, la neoyorquina se convirti¨® en la nueva novia de Am¨¦rica, siendo c¨¦lebre tambi¨¦n por su ¡®estrecha¡¯ amistad con Michael Jackson y sus fiestas en el Studio 54 con personalidades de la talla de Andy Warhol.

¡°Miro esas fotos ahora y todav¨ªa me choca un poco que se convirtieran en legendarias. Para m¨ª fue solo un trabajo importante, al que fui un d¨ªa a las tres de la tarde despu¨¦s del colegio. De la foto en la que levanto la pierna solo recuerdo que me dol¨ªa el brazo. No puedes planear ser ic¨®nica¡±, evoc¨® la protagonista de las im¨¢genes al New York Post, que dijo no sentir sorpresa ante la pol¨¦mica originada por lo acostumbrada que estaba a convivir con ella. ¡°Los pantalones incluso superaban mi ombligo. En la imagen con la camisa desabotonada tampoco se ve nada. Comparada con las cosas que hab¨ªa hecho antes, esto era como llevar ropa de invierno¡±.

El estreno de la campa?a de Calvin Klein y la pel¨ªcula El lago azul en 1980 volvi¨® a llevar su nombre a los titulares por las m¨²ltiples escenas de sexo y desnudez que conten¨ªa su metraje. ¡°Toda esta sospechosa sexualizaci¨®n derivada de la premeditada elecci¨®n de una inocente Shields contin¨²a resultando a¨²n hoy bastante perturbadora. Muchos cr¨ªticos vieron y siguen viendo en esta pel¨ªcula una sombra de desagradable fetichismo, por lo que podr¨ªa tener de fantas¨ªa sexual madura construida en torno a una menor¡±, sostiene Blanca Lacasa en un reportaje publicado en S Moda. Hasta la mism¨ªsima actriz, que vio frenada a partir de entonces su mete¨®rica carrera en Hollywood, manifest¨® recientemente que ¡°no facilitar¨ªa¡± que sus dos hijas adolescentes aparecieran en pel¨ªculas como las protagonizadas por ella.

Aunque la pregunta ¡°?Quieres saber lo que se interpone entre mis Calvin y yo?¡± es la que ha conseguido perpetuarse en el imaginario popular, no fue la ¨²nica sentencia p¨ªcara pronunciada por Shields. ¡°Tengo siete Calvin en mi armario y, si pudieran hablar, me arruinar¨ªan¡±, ¡°Cuando tengo dinero me compro mis Calvin y, si sobra, pago el alquiler¡± o ¡°Leer es a la mente lo que mis Calvin son a mi cuerpo¡± tambi¨¦n escandalizaron a la sociedad de la ¨¦poca. En 2017, como muestra de su ascendencia en la cultura pop, otra ic¨®nica actriz adolescente, Millie Bobby Brown (Eleven en Stranger Things) decidi¨® homenajear el anuncio en su cuenta de Instagram, sumando m¨¢s de cuatro millones y medio de reproducciones.

Antes incluso de llegar a emitirse los spots publicitarios, las cadenas de televisi¨®n ya hab¨ªan recibido cartas y llamadas de ¡°padres enfadados¡± mostrando su rechazo a la publicaci¨®n de los mismos. Despu¨¦s de la repercusi¨®n de la campa?a, Calvin Klein ha reincidido de forma recurrente en hacer de la controversia su mejor campa?a publicitaria, indignando incluso al mism¨ªsimo presidente Clinton a mediados de los noventa. Desde las m¨ªticas fotograf¨ªas que catapultaron a Kate Moss o Mark Wahlberg al estrellato (¡°La mejor prevenci¨®n contra el SIDA es dejarte los Calvin puestos¡±, alegaba el actor), pasando por iconos adolescentes que pegaban el estir¨®n en las marquesinas de los autobuses como Justin Bieber o la colecci¨®n ¡®Er¨®tica¡¯ de 2016 protagonizada por Kendall Jenner, entre otras. Casi cuatro d¨¦cadas despu¨¦s del anuncio que escandaliz¨® a la televisi¨®n estadounidense, en 2017 Brooke Shields volvi¨® a reunirse ¨Cesta vez sin censura¨C con sus ¡®Calvin¡¯.