El retorno del Herv¨¦ L¨¦ger, el inc¨®modo y sexual vestido fetiche de las celebridades de los ochenta y los dosmil
El revival de los dos mil ha alcanzado el mundo de la noche, y la noche de este periodo llevaba la firma de Herv¨¦ L¨¦ger: analizamos el regreso del vestido bandage a nuestros armarios.
El Museo Madame Tussaud de Londres present¨® en 2015 la primera figura de cera con la que pod¨ªas hacerte un selfie. Era, como no pod¨ªa de ser de otra forma, la figura de cera de Kim Kardashian, vestida con una r¨¦plica exacta del minivestido blanco perlado de Balmain que la celebridad luci¨® en su despedida de soltera, celebrada en Par¨ªs en 2014. El matrimonio conformado por Kanye West y Kim Kardashian inici¨® una nueva era en el estilo de esta, que dej¨® a un lado sus conjuntos de party girl para rendirse a las siluetas ajustadas, el nude y el minimalismo a la Kim y, el Balmain escogido por el museo de cera de Londres representaba a la perfecci¨®n aquella transici¨®n. Cinco a?os antes el Museo Madame Tussaud de Nueva York hab¨ªa escogido otro vestido para inmortalizar el esp¨ªritu de 2010 a trav¨¦s de la figura de cera de Kim Kardashian: un ajustado vestido de bandas en rosa chicle firmado por Herv¨¦ L¨¦ger.
Herv¨¦ L¨¦ger fue la marca fetiche de las famosas hacia el final de los 2000: Lindsay Lohan se pon¨ªa sus vestidos tanto para asistir a alfombras rojas como para salir de fiesta, tambi¨¦n Paris Hilton los luci¨® en m¨¢s de una juerga nocturna. Victoria Beckham, Mischa Barton, Gisele B¨¹ndchen, Rihanna, Miranda Kerr o Jennifer Lopez se enfundaron en sus Herv¨¦ L¨¦ger para pisar c¨®cteles, presentaciones y estrenos. La marca alcanz¨® un pico de popularidad en 2009, cuando Serena Van Der Woodsen, el personaje interpretado por Blake Lively, lo llev¨® en varios cap¨ªtulos de Gossip Girl. Kim Kardashian fue quien m¨¢s veces luci¨® la marca en sus apariciones p¨²blicas al tiempo que su fama iba en aumento y quiz¨¢s Herv¨¦ L¨¦ger fuese precisamente la chispa que alumbr¨® la idea de la marca Skims.?Herv¨¦ L¨¦ger se convirti¨®, de la noche a la ma?ana, en el uniforme favorito de las chicas populares que sal¨ªan de fiesta. Y luego desapareci¨®.
La marca naci¨® en 1985, fundada por el dise?ador Herv¨¦?Peugnet, quien hab¨ªa comenzado su carrera en el mundo de la moda con Karl Lagerfeld, para quien trabaj¨® como ayudante tanto en Fendi como en Chanel. Fue precisamente Lagerfeld quien le recomend¨® cambiar su apellido de cara a construir su propia firma y que buscase algo ?m¨¢s ligero?. Y de ¡®ligereza¡¯ en franc¨¦s (l¨¦g¨¨ret¨¦), se invent¨® L¨¦ger.?Desde sus inicios, Herv¨¦ L¨¦ger apost¨® por el tipo de vestido que terminar¨ªa convirti¨¦ndose en icono: bandas el¨¢sticas de tela que se ajustaban a la piel y marcaban la silueta femenina. As¨ª se cre¨® el vestido bandana o bandage?que a finales de los ochenta y principios de los noventa lucieron arriba y abajo de las pasarelas supermodelos de la talla de?Cindy Crawford, Eva Herzigova o Carla Bruni. Los precios del vestido estrella de la firma oscilaban entre los 500 y los 2.000 d¨®lares.
En 1989, el cantante Robert Palmer lanz¨® el videoclip de su tema Simply Irresistible e, inmediatamente, convirti¨® los vestidos bandage en sin¨®nimo de sensualidad y objetos de deseo. En el videoclip, Palmer aparec¨ªa rodeado de las modelos?Julie Pankhurst, Patty Kelly, Kathy Davies, Mak Gilchrist y Julia Bolino, quienes bailaban enfundadas en vestidos bandage en rosa, naranja y morado. La hipersexualizaci¨®n femenina del videoclip de Palmer convirti¨® este tipo de vestidos en un aut¨¦ntico fetiche er¨®tico. Tras el boom de inicios de los noventa, en 1998 la firma fue adquirida por el grupo BCBG Max Azria y Herv¨¦ L¨¦ger volvi¨® a su apellido original para lanzar una nueva marca. Entonces llegaron los dos mil.
?El vestido bandage?es un it dress arquet¨ªpico porque muy pocas mujeres se ven bien con ¨¦l, que es el punto central de un it dress?, escrib¨ªa la periodista brit¨¢nica Tanya Gold en el a?o 2008 en una ¨¢cida cr¨ªtica en el diario Daily Mail, despu¨¦s de que famosas como Cheryl Cole, Lindsay Lohan o Kate Winslet empezaran a llevarlo en las alfombras rojas.??Me encanta c¨®mo lucen, pero parecen un poco inc¨®modos?, escribi¨® la periodista Elle Fowler en 2010 sobre su colecci¨®n primavera-verano en la edici¨®n estadounidense de la revista Marie Claire, ?parecen demasiado r¨ªgidos y probablemente sea dif¨ªcil sentarse con ellos¡ pero la moda no siempre es c¨®moda?. Aquella incomodidad, as¨ª como un dise?o que, ci?¨¦ndose tanto a la silueta, tambi¨¦n marcaba cualquier defecto y lo hac¨ªa apto solo para aquellas mujeres muy seguras de s¨ª mismas, eran lo que convert¨ªan los vestidos de Herv¨¦ Leg¨¦r en iconos improbables y, sin embargo, acompa?aron a las famosas en el periodo de los dos mil caracterizado por las salidas nocturnas y las fiestas.
En 2015, la marca pas¨® por una pol¨¦mica que termin¨® en despido: el director general en Inglaterra de BCBG Max Azria, Patrick Courderc, declar¨® al?Daily Mail?que las mujeres ?voluptuosas? y aquellas con ?caderas muy prominentes y un pecho muy plano? deber¨ªan evitar los Herv¨¦ L¨¦ger, tambi¨¦n declar¨® que ?si eres una lesbiana comprometida y has llevado pantalones toda tu vida, desde luego no querr¨¢s comprar un vestido de L¨¦ger?. La pol¨¦mica, unida a que los vestidos de la firma se hab¨ªan vuelto tan populares que los grandes outlets de moda ya los hab¨ªan imitado en todas sus posibles variaciones y colores, hizo que las celebridades poco a poco comenzasen a olvidar sus Herv¨¦ Leg¨¦r en el fondo de sus armarios.
En 2022 est¨¢n regresando muchas de las tendencias de los dos mil: desde el ch¨¢ndal de terciopelo de Juicy Couture que puso de moda Paris Hilton a las gorras Von Dutch, pasando por los controvertidos y poco populares vaqueros de tiro bajo o los zapatos de plataforma. Y tambi¨¦n el vestido bandage de Herv¨¦ L¨¦ger ha hecho su reaparici¨®n. Tal y como teorizaba la periodista Liana Satenstein en un art¨ªculo para la edici¨®n estadounidense de Vogue, la vuelta de este vestido puede estar relacionada con la vuelta de la noche a nuestras vidas: ?Tengo la hip¨®tesis de que el regreso del vestido se puede atribuir al regreso de la vida nocturna. Si las personas tienen la oportunidad de salir, quieren que las vean, quieren vestirse bien y llevar cosas que no han usado antes. Cuando te pones un Herv¨¦ L¨¦ger, realmente hace maravillas?. La periodista reconoc¨ªa haberse vuelto a enamorar de la firma tras llevar un vestido a un evento. Hacia esa misma teor¨ªa apuntaban en un art¨ªculo de The Cut?titulado Vuelve la tiran¨ªa del vestido ¡®bandage¡¯, donde explicaban c¨®mo la b¨²squeda de vestidos Herv¨¦ Leg¨¦r hab¨ªa ido en aumento en p¨¢ginas?de ropa de segunda mano especialmente en 2022: ?La gente se est¨¢ rebelando contra la vestimenta pr¨¢ctica y c¨®moda que ha sido su uniforme durante los ¨²ltimos a?os. Ahora se visten y salen, optando tanto por estilos que muestran la piel como por el cuerpo?. Parece que en 2022 las mujeres est¨¢n deseando salir de fiesta, y no hay mayor inspiraci¨®n para las salidas nocturnas que el vestido de party girl por excelencia.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.