Ya lo predijo Carrie Bradshaw: vuelve la ri?onera

Poco pod¨ªamos imaginar hace veinte a?os que las ri?oneras, aquel primer bolso de toda una generaci¨®n que bien nos serv¨ªa para guardar cosas cuando ¨ªbamos ir de excursi¨®n ¨Ccomo por ejemplo el chubasquero de turno¨C, iban a convertirse en el complemento de moda. Esta especie de bolsa que en principio se lleva sujeta a la cintura o ca¨ªda a la altura de la cadera, vivi¨® su ¨¦poca dorada en los ochenta y noventa gracias a la cultura callejera. Un ambiente muy alejado de sus humildes or¨ªgenes, que se sit¨²an en distintos puntos del globo a finales del medievo (estaban confeccionadas en cuero y serv¨ªan para llevar armas, herramientas y v¨ªveres). En la Inglaterra y Francia victorianas exist¨ªa la Chatelaine, un accesorio joya que llevaban las damas a modo decorativo, pendiendo de ¨¦l utensilios de todo tipo en tama?o reducido (tijeras, agujas, llaves, relojes y hasta perfumes). Mientras tanto en Espa?a, las mujeres del campo hac¨ªan usa de las faltriqueras, prendas de tela, pa?o o terciopelo que se colocaban bajo la ropa para llevar todo lo necesario para pasar el d¨ªa. Siglos m¨¢s tarde, la ri?onera volv¨ªa en forma de talega muntifuncional y uso eminentemente masculino, normalmente de tejido resistente y colores llamativos, inspirada en la bolsa ventral de los canguros.

Hoy ese mismo art¨ªculo no solamente ha sido recuperado por varias marcas de moda sino que se ha convertido en un aut¨¦ntico objeto de lujo del que se han apropiado diversos dise?adores y firmas a lo largo de las ¨²ltimas temporadas. Una de las primeras ense?as en apostar por ¨¦l fue Karl Lagerfeld a prop¨®sito de Chanel, con una versi¨®n reducida de sus bolsos acolchados ajustada al cuerpo normalmente con una cadena. La misma idea que retom¨® tambi¨¦n m¨¢s tarde Clare Waight-Keller en Chlo¨¦, y que ya han compartido Kendall Jenner o Kourtney Kardashian. De cara a esta temporada vuelve con fuerza de la mano de Off-White (en versi¨®n portafolios de piel lisa), Kenzo (malla met¨¢lica), N?21 (tipo minibolso de raso), Stella McCartney, Jil Sander, Moschino, Rag & Bone o Emporio Armani, por nombrar solo algunas.

Gucci, que populariz¨® de la mano de Carrie Bradshaw en Sexo en Nueva York uno de los modelos m¨¢s ic¨®nicos de la historia reciente de la moda (en lona estampada con el logo de la casa, varios compartimentos, y abrochada con una correa), apuesta esta temporada por perpetuar la ri?onera tipo cintur¨®n. Eso concluimos al menos de las ¨²ltimas colecciones de Alessandro Michele, cuyas propuestas, a modo de monedero ovalado o cuadrado tipo cartera, vienen embellecidas con piedras o aplicaciones met¨¢licas en forma de distintos animales. Otras ense?as como Louis Vuitton (en su colaboraci¨®n con Supreme) han sido lo m¨¢s fieles posibles a su dise?o m¨¢s b¨¢sico y deportivo pero elevando la calidad de sus materiales y acabados. En este caso, tal y como ha sostenido Alexander Wang, uno de sus mayores defensores sobre la pasarela, esta debe llevarse cruzada: a modo de bandolera.