Desde los volantes de Naomi Campbell a las sogas de Delf¨ªn: diez momentos cumbre en la historia de Cibeles

28 a?os, m¨¢s de cincuenta ediciones celebradas en la Plaza de Col¨®n, la Casa de Campo, el Palacio de Congresos y finalmente el pabell¨®n 14 de IFEMA. Un cambio de nombre con miras internacionales y m¨¢s de un centenar de dise?adores. La pasarela anteriormente conocida como Cibeles ha dado nombres y momentos casi hist¨®ricos. Muchos son recordados por la mayor¨ªa, otros han pasado casi desapercibidos. Recordamos algunos de ellos:

1. La moda como evento. La ¡°Moda de Espa?a¡±

Cibeles nace con el fin de ser la pieza clave de un entramado mayor: el Plan Nacional de la Moda impulsado por el Ministerio de Industria. Bajo la etiqueta ¡°Moda de Espa?a¡±, muchos dise?adores decidieron unir fuerzas para poder rentabilizar y exportar su trabajo. En aquel momento, la Movida madrile?a daba sus ¨²ltimos coletazos, y el ambiente creativo que a¨²n pod¨ªa respirarse en la capital logr¨® que aquellos desfiles se convirtieran en un acontecimiento celebrado y esperado por muchos. Tanto es as¨ª que Francis Montesinos decidi¨® presentar su desfile en Las Ventas, acompa?ado de los personajes m¨¢s famosos de la ¨¦poca y ante cerca de 15.000 asistentes.

2. La huella imborrable de Manuel Pi?a

Cuando decidi¨® ser formar parte de este Made in Spain e impulsar la creaci¨®n de Cibeles, Manuel Pi?a ya vend¨ªa en Nueva York, Italia o Alemania? y hab¨ªa creado varias colecciones para Galer¨ªas Preciados. El dise?ador manchego nos deleit¨® durante cinco a?os con fabulosos desfiles marcados por novedosos estampados, vol¨²menes nunca vistos, exploraci¨®n en? tejidos o un original di¨¢logo entre el colorismo y lo siniestro o entre el folclore y el futurismo. En 1990, con su nombre todav¨ªa sonando en los circuitos internacionales, se declar¨® en bancarrota y tuvo que cerrar su empresa. Muri¨® poco despu¨¦s y hoy, tras treinta a?os, seguimos record¨¢ndolo como uno de los nombres clave del dise?o nacional.

3. Las ¡°sybillas¡± nacionales

Aunque ya hab¨ªa realizado desfiles, su presentaci¨®n oficial tuvo lugar en 1986 dentro del Museo del Ferrocarril, sede por aquel entonces de la pasarela Cibeles. Su peculiar forma de entender la moda, centrado en los cortes de sus vestidos y en ese aire, entre la sacerdotisa y el hada, que aporta a sus creaciones, convirtieron a Sybilla en una de las dise?adoras m¨¢s importantes de la d¨¦cada. Vanity? Fair dijo de ella que era el nombre con m¨¢s proyecci¨®n internacional. Y lo era. Poco despu¨¦s se march¨® de Espa?a, donde su producci¨®n a¨²n se mantiene, ha colaborado con marcas como Vuitton y un pu?ado de c¨¦lebres clientas contin¨²an si¨¦ndole fieles 25 a?os despu¨¦s.

4. El a?o de las supermodelos

El desfile de primavera/verano 94 de Vittorio y Lucchino lo cerr¨® Naomi Campbell con un traje de faralaes deluxe. Javier Larra¨ªnzar, por aquel entonces dise?ador emergente, hizo lo propio con otra modelo que tambi¨¦n comenzaba a dar sus primeros pasos: Kate Moss. Todos conocemos los arrebatos de Naomi y su pasi¨®n por la cultura flamenca, pero quiz¨¢ muchos no sab¨ªamos que en 2006 estuvo a punto de no desfilar en Gaud¨ª Novias para la dise?adora Patricia Avenda?o porque se encaprich¨® con volver a caminar llena de volantes en el desfile de los andaluces, que se celebraba minutos despu¨¦s. De Kate no conocemos filias espa?olas (a¨²n), pero lo que s¨ª podemos decir bien alto es que 1994 fue el a?o en que las dos modelos m¨¢s conocidas del mundo vinieron a visitarnos.

5. Las sogas de la discordia

En Septiembre de 2002, David Delf¨ªn debuta en la pasarela madrile?a con Cour de Miracles, una colecci¨®n inspirada en Los Amantes de Magritte y en algunos fotogramas tomados de la filmograf¨ªa de Bu?uel. Pero nos encontr¨¢bamos en los tensos momentos que precedieron a la guerra de Irak y no est¨¢bamos acostumbrados a contemplar este nivel de experimentaci¨®n en la moda nacional: la gente no supo ver en las capuchas y las sogas un homenaje al surrealismo sino una apolog¨ªa del burka y la opresi¨®n femenina. En cualquier caso, dicha pol¨¦mica logr¨® que no quedara nadie en el pa¨ªs sin conocer a este dise?ador, que lleva m¨¢s de diez a?os presentando sus propuestas (ya no tan transgresoras) dentro del calendario oficial.

Montesinos sale a hombros de Las Ventas tras su m¨ªtico desfile (atenci¨®n a Andoni Ferre?o en la esquina izquierda de la fotograf¨ªa)

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Alegr¨ªa y alboroto en el desfile de Montesinos en Las Ventas.

6. La vez que casi fuimos Galliano

Trabaj¨® en Givenchy, desfil¨® en Par¨ªs (pertenec¨ªa a la Fed¨¦ration fran?aise dela Couture) y ya hab¨ªa obtenido varios premios internacionales antes de 2008, el a?o que desfil¨® por primera vez en Cibeles. Jos¨¦ Castro debut¨® en Madrid con Redrum, una colecci¨®n basada en El Resplandor. Un pu?ado de trajes (ensangrentados) espectaculares, de factura impecable, con salidas dignas de Galliano o Mcqueen ¨C incluso se rumore¨® que suceder¨ªa al dise?ador ingl¨¦s al frente de la firma. Hac¨ªa tiempo que una colecci¨®n no despertaba tanta expectaci¨®n y, sin embargo, Castro dur¨® un a?o en el calendario madrile?o. No recibi¨® ayuda para sufragar una nueva colecci¨®n. A veces rentabilidad y buen dise?o son categor¨ªas inversamente proporcionales. O quiz¨¢, como reza la frase de la pel¨ªcula Querelle y la nota de prensa de Redrum, ¡°cada hombre mata lo que ama¡±

7. El front row m¨¢s m¨ªtico

Ella, con sus largas piernas, sus facciones marcad¨ªsimas y su mirada rasgada. La amiga de Dal¨ª, el icono de Blow Up y su infinitas reformulaciones est¨¦ticas, la imagen m¨ªtica de la sahariana de Yves Saint Laurent. Veruschka, una de las modelos m¨¢s importantes de la historia, apareci¨®, con 67 a?os, zapato plano y ropa de sport, sentada en las gradas de Cibeles. En 2008, Ailanto eligi¨® la archiconocida pel¨ªcula de Antonioni como inspiraci¨®n para su desfile de primavera/ verano? y enviaron una invitaci¨®n a la modelo alemana sin esperanza alguna pero conscientes de que invitar a las musas, si est¨¢n vivas, es de justicia. Su estatura y sus prominentes p¨®mulos, por supuesto, no pasaron desapercibidos para los asistentes. Sin embrago, pocos supieron identificarla como uno de los mitos m¨¢s decisivos de la moda. Pero ella estuvo all¨ª, y probablemente sea a¨²n hoy? una de las caras m¨¢s vip que ha presenciado nuestra pasarela.

8. El merecido homenaje

En septiembre de 2009 Cibeles decidi¨®, por fin, rendir tributo a los m¨¢s de cincuenta a?os de profesi¨®n que avalan a Elio Bernhayer. Con m¨¢s de un centenar de colecciones a sus espaldas, Elio? presentaba en aquel momento su en¨¦sima propuesta, una revisitaci¨®n de los elementos que lo convirtieron en imprescindibile durante varias d¨¦cadas. Hacia la mitad del desfile, aparecen todas sus modelos de cabecera, esas modelos que todos conocemos y que asociamos inmediatamente con la moda espa?ola: Nieves ?lvarez, Helena Barquilla y Judith Masc¨®, entre otras, lanzan rosas rojas a un p¨²blico en pie y a un Elio emocionado. Despu¨¦s vendr¨ªan otros homenajes, pero ninguno tan aut¨¦ntico y emotivo como ¨¦ste.

9. El tributo a la Costura y sus clientas

Juan Duyos suele dise?ar en los m¨¢rgenes que separan y aproximan al glamour de los ¡¯50 con el colorismo setentero. Su colecci¨®n para la primavera de 2011 no fue la mejor, pero quiz¨¢ s¨ª la m¨¢s medi¨¢tica de la edici¨®n: el dise?ador decidi¨® subir a la pasarela a cuatro mujeres mayores. Entre ellas Eloisa Bercero, famosa compradora de Alta Costura y fan confesa del dise?ador. Tal vez lo sea porque Duyos, sin ser couturier, reivindica la moda espa?ola de antes, la que se erige bajo los cimientos de Elio Bernhayer, Pedro Rodr¨ªguez o Balenciaga. Por eso, un a?o despu¨¦s present¨® una colecci¨®n inspirada en la edad dorada de la Costura espa?ola. Jeanette cantaba en directo y esta vez volvi¨® a ser el desfile m¨¢s medi¨¢tico pero tambi¨¦n el mejor de aquella edici¨®n.

10. El Off ya no es el bot¨®n de apagado

Desfiles extra oficiales ha habido siempre. Pero quiz¨¢ la senda hacia el circuito independiente la abrieron Alvarno en el palacio de Fern¨¢n N¨²?ez all¨¢ por el 2010. Tres a?os y siete desfiles despu¨¦s, a su propuesta de presentar las colecciones fuera de los m¨¢rgenes? de Ifema se han unido otras marcas como Rabaneda, Anjara, Juan Vidal, Etxeberr¨ªa o Beba¡¯s Closet. Algunos se han integrado en el calendario oficial de la MBMFW, pero otros han venido a engrosar las listas de este circuito OFF. Alvarno present¨® el pasado lunes en el Torre de Cristal de la Castellana su ¨²ltimo ejercicio de sofisticaci¨®n y detallismo. D¨ªas antes tuvo lugar el Madrid Fashion Show, entre el Museo del Traje y el maravilloso Cuartel de Conde Duque. Hay vida m¨¢s all¨¢ del pabell¨®n 14, hay desfiles que se disfrutan de forma pausada y se sienten casi como un evento ¨²nico? pero, sobre todo, hay una clara intenci¨®n por hacer de esta semana un evento cultural que ocupa edificios emblem¨¢ticos, implica a la ciudad y crea sinergias interesantes entre arquitectura, decoraci¨®n y moda. Como ocurre en las grandes capitales.

El desfile con sogas de David Delf¨ªn fue uno de los m¨¢s pol¨¦micos de la pasarela.

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Manuel Pi?a celebra el desfile homenaje a Camar¨®n de la Isla en Cibeles.

Antes de ser Bibiana Fern¨¢ndez, Bibi Andersen desfil¨® para Manuel Pi?a en su homenaje a Camar¨®n de la Isla.

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