Cinco incre¨ªbles portales de Barcelona escondidos del turismo masivo
Lujosos, futuristas, brutalistas o llenos de mosaicos sorprendentes. Escondidos dentro del entramado urbano, Barcelona cuenta con un conjunto de vest¨ªbulos que son verdaderas joyas del interiorismo y la arquitectura
M¨¢s all¨¢ de Gaud¨ª, de la Pedrera y del modernismo, en Barcelona se pueden encontrar una serie de edificios construidos en las d¨¦cadas de los 60 y los 70 que adaptaron muchas de las corrientes arquitect¨®nicas de la ¨¦poca ¨Cbrutalismo, racionalismo, organicismo¨C al estilo y los materiales de aqu¨ª. En muchos de estos edificios, la mayor¨ªa situados en barrios de alto poder adquisitivo (sobretodo en Sarri¨¤-Sant Gervasi y Les Corts), los constructores no escatimaban en gastos y los arquitectos tuvieron manga ancha para decorar las porter¨ªas con una serie de elementos distintivos (obras de arte, mobiliario, buzones, luces¡) que sin duda las convierte en visita obligada para cualquier amante del dise?o de interiores. Sin ¨¢nimo de ser exhaustivos, hemos seleccionado cinco que destacan sobre el resto.
Mari¨¤ Cub¨ª, fantas¨ªa sci-fi
Lo de esta porter¨ªa es algo inexplicable. Situada a dos pasos de la plaza Gala Placidia, este vest¨ªbulo que da acceso a un edificio de oficinas parece dise?ado por el mismo Stanley Kubrik. La combinaci¨®n de colores, las formas curvas del escritorio, el espejo, el techo, los buzones¡ todo aqu¨ª tiene un aire muy parecido al lobby del hotel orbital Hilton de 2001: Una odisea en el espacio. Teniendo en cuenta que la obra de culto de Kubrik data de 1968 y el edifico de Mari¨¤ Cub¨ª de 1976, no es descabellado pensar que el interiorista ?se qued¨® prendado de los sets de la pel¨ªcula e intent¨® replicarlo en la porter¨ªa de este edificio.
Como se trata de un edificio no residencial, la puerta acostumbra a estar abierta, as¨ª que es f¨¢cil echar un ojo. Desde el exterior, tambi¨¦n vale la pena levantar la vista para ver los mosaicos que pueden verse bajo las ventanas. Hechos con baldosas de cer¨¢mica, se trata de composiciones geom¨¦tricas con las mismas formas curvas que podemos ver en el vest¨ªbulo, aunque aqu¨ª con colores marrones y verdes.
Una pecera con toques nipones
Amplitud, materiales nobles, moqueta, sobriedad y elegancia es lo que transmite este vest¨ªbulo que da acceso al edificio Tokio que Francesc Mitjans realiz¨® en 1957. Adentrarse en esta porter¨ªa es como pasearse por el set de Mad Men, aunque aqu¨ª se mezcla el lujo americano de los 50 con un toque japon¨¦s, que puede verse tanto en los jardines que rodean el edificio (hay incluso un estanque con tortugas) como en la gran esfera de papel que irradia una c¨¢lida luz cuando cae la noche.
El edificio, situado en la avenida Pedralbes, est¨¢ levantado sobre pilotis de hormig¨®n armado, lo que permite que el vest¨ªbulo est¨¦ separado de la fachada y que los curiosos puedan ver su interior a trav¨¦s de sus grandes cristaleras. Una escalera helicoidal y un muro revestido de piedra con reminiscencias a Mies van der Rohe son los dos principales elementos que nos encontramos al entrar en esta porter¨ªa, que tambi¨¦n cuenta con unos lujosos sof¨¢s, un techo cubierto de madera y un ascensor con la puerta acolchada con cuero. Todo clase y distinci¨®n.
Antoni de Moragas: brutalismo mediterr¨¢neo
El vest¨ªbulo que da acceso a este edificio de Moragas situado en la V¨ªa Augusta, llama la atenci¨®n inmediatamente. Su combinaci¨®n de ladrillo visto y hormig¨®n le dan un aire fr¨ªo y brutalista, pero las baldosas t¨ªpicas catalanas que recubren el techo y algunas paredes lo acercan m¨¢s a la calidez del mediterr¨¢neo. Las l¨¢mparas setenteras, los sof¨¢s y la mesa de m¨¢rmol rematan esta curiosa combinaci¨®n d¨¢ndole ese toque lujoso que tienen la mayor¨ªa de porter¨ªas del Upper Diagonal
Para el presentador, guionista y gran aficionado al dise?o y la arquitectura ?scar Dalmau, esta es la joya de la corona de las porter¨ªas de Barcelona. Dalmau sabe de lo que habla, pues lleva tiempo pate¨¢ndose Barcelona y documentando estos vest¨ªbulos singulares (en su cuenta de?instagram se pueden ver muchos de ellos) para editar una gu¨ªa de esta Barcelona retro que seguramente aparecer¨¢ en primavera del a?o que viene.
Hormig¨®n, moqueta y espejos
El enorme vest¨ªbulo que da acceso a Les Escales Park, el edifico que Josep Llu¨ªs Sert construy¨® en Pedralbes, recuerda mucho a los edificios de Le Corbusier. El s¨ªmil no es casual: la idea de Sert era adaptar el modelo del suizo de los Inmuebles-Villa (bloque de viviendas d¨²plex), pero a?adi¨¦ndole elementos mediterr¨¢neos, como las persianas de librillo, los techos de bovedilla y la cer¨¢mica vidriada que puede verse en las terrazas y la fachada.
Para entrar a este complejo situado en la calle Sor Eulalia de Anzizu, hay que recorrer una peque?a rampa, pues el nivel de acceso es inferior al de la calle. Una vez dentro, un largo corredor acristalado con paredes cubiertas de espejo nos permite ir a los diversos ascensores que conectan con los apartamentos, y justo a la derecha, un gran sof¨¢ de hormig¨®n con cojines blancos nos da la bienvenida.
El vest¨ªbulo, que ya no conserva su moqueta original, es sobrio y espacioso, e igual que la porter¨ªa de Moragas, se acerca al brutalismo. Predomina el hormig¨®n visto, y si no fuera por la moqueta rojiza que recubre las paredes que rodean los ascensores, parecer¨ªa m¨¢s bien que estamos en un moderno museo (en los corredores hay incluso varias esculturas sobre pedestales) que en la porter¨ªa de un edificio residencial. El inmueble, que no lleg¨® a ser construido tal y como Sert lo hab¨ªa proyectado debido a la aprobaci¨®n en 1970 del Plan General Metropolitano, recibi¨® el premio FAD de arquitectura en 1974.
Un Bofill desconocido
Mucho menos ¡®instagrameado¡¯ que el Walden 7 o la Muralla Roja de Calpe, este edificio de Ricardo y Emili Bofill construido a principios de los 60 merece tambi¨¦n una visita a su vest¨ªbulo.
Situado en el n¨²mero 2 de la calle Johann Sebastian Bach y catalogado como Bien Cultural de Inter¨¦s Local (en la misma calle hay otros dos inmuebles protegidos, uno de Coderch y otro tambi¨¦n de Bofill, en el n¨²mero 28), el edificio destaca por la celos¨ªa de ladrillo que recubre toda la fachada, as¨ª como por varios elementos de claro car¨¢cter escult¨®rico como son los vierteaguas, las barandillas de los balcones o las chimeneas del ¨¢tico, que recuerdan a las de la Pedrera de Gaud¨ª.
La porter¨ªa, de peque?as dimensiones, se abre a la calle a trav¨¦s de una gran cristalera de reminiscencias art d¨¦co y destaca por sus paredes de terciopelo turquesa, el suelo de m¨¢rmol y el elegante ascensor que nos recibe inmediatamente despu¨¦s de entrar al portal. El mismo edifico cuenta con otra porter¨ªa en la calle Francesc P¨¦rez-Cabrero, pero en esta escalera los apartamentos son de renta limitada, y el vest¨ªbulo es bastante menos lujoso.
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