Diez libros que te har¨¢n olvidar a ?Cincuenta sombras de Grey?

A no ser que hayas vivido aislado de la realidad los ¨²ltimos seis meses, sabr¨¢s perfectamente cu¨¢l ha sido el bombazo literario del verano. Sabr¨¢s qui¨¦n es Anastasia Steele, la recatada virgen universitaria que se rinde a los placeres del bondage, el sadomaso y los azotes que le propina el apuesto y enigm¨¢tico multimillonario Christian Grey. La trilog¨ªa en torno a Cincuenta sombras de Grey no s¨®lo ha encendido el imaginario sexual de millones de lectores y enfurecido por igual a la cr¨ªtica literaria; el fen¨®meno arrasa en ventas (lidera el ranking de Best Sellers del New York Times desde haces semanas) y su autora Erika Leonard James se ha convertido en la m¨¢s vendida de la historia en la web brit¨¢nica de Amazon.?

Ahora que J. K. Rowling ha sido destronada del imperio de las ventas y los lectores han cambiado la varita de Howgarts por las fustas y esposas del romance sadomasoquista; el mundo editorial, como era de esperar, se ha propuesto sacar tajada del fil¨®n sexual literario. Existen aventuradas apuestas como la de trasladar el 'porno para mam¨¢s' a los cl¨¢sicos, u otras que reeditan ediciones del pasado bajo el lema ¡°Si te gust¨® Cincuenta sombras de Grey, amar¨¢s a¡­¡±. Como sabemos que el mono de CSDG est¨¢ afectando a tu sistema nervioso, te proponemos una lista de 10 t¨ªtulos er¨®ticos para aliviar esta fiebre literaria. Porque, seamos realistas, ?ha reconfortado a los fans que la ¨²ltima novedad de E. L. James sea un disco con las canciones que le inspiraron mientras escrib¨ªa la trilog¨ªa?

Cincuenta sombras de Grey ha encendido el imaginario sexual de millones de lectores.

Cordon Press

10. El Libro de Jade. Si existe la encarnaci¨®n espa?ola de E. L. James, pasada por tintes vamp¨ªricos y sobrenaturales, es Lena Valenti. Mientras la brit¨¢nica populariz¨® sus inicios con adaptaciones er¨®ticas de Crep¨²sculo, esta autora barcelonesa esta alz¨¢ndose como el fen¨®meno literario del panorama patrio con romances basados en mitolog¨ªa escandinava. Las escenas subidas de tono con vampiros y hombres lobo (Vanirios y Bersekers) triunfan entre una red de seguidores hiperactiva. Cada a?o se organiza una fiesta anual en torno a la saga Vanir (Valenti ha publicado cinco de las diez novelas que la conforman), hay juegos de rol comercializados, una l¨ªnea de tatuajes, merchandising e incluso una bebida oficial. Este a?o, adem¨¢s, se estrenar¨¢ un documental sobre el fen¨®meno.

9. No te escondo nada. El clon de CSDG ya est¨¢ en tu librer¨ªa m¨¢s cercana. La escritora Silvya Day estrena la trilog¨ªa Crossfire calcando la estructura que tanto ¨¦xito ha reportado a E. L. James (hasta la portada es sospechosamente parecida: donde hab¨ªa una corbata, aqu¨ª hay unos gemelos). En sus p¨¢ginas, Eva Trammel y Gideon Cross viven una t¨®rrida relaci¨®n, con trauma infantil de por medio, mientras disfrutan de los lujos millonarios de Nueva York. Nada nuevo en el horizonte, pero sirve como suced¨¢neo efectivo.

8.? Readerotica, erotica for your electronic reader. Porque no hay nada mejor que poder leer er¨®tica desde el anonimato que da tu Kindle o iPad, esta colecci¨®n de historias cortas en ingl¨¦s es gratuita y perfecta para medir tu atrevimiento en transportes p¨²blicos.

7. Ingl¨¦s para pervertidos. Si te has descargado el eBook de arriba y no te enteras de nada, la modelo, actriz y escritora Venus O'Hara tiene la soluci¨®n perfecta a las barreras del idioma. No s¨®lo aprender¨¢s que 'foreplay' son los preliminares del sexo o que las 'Ben-Wa-Balls' son las bolas chinas ¨Cpor poner unos ejemplos¨C; esta gu¨ªa desvela todo lo que tu profesor de ingl¨¦s nunca te quiso explicar y te convertir¨¢ en una erudita sexual muy sassy.

6. Delta de Venus. La literatura er¨®tica le debe mucho a Ana?s Nin (1903-1977), amante de Henry Miller e hija del pianista y compositor espa?ol Joaqu¨ªn Nin. Compa?era de batallas de los surrealistas, sus relatos te permitir¨¢n hacerte una idea de c¨®mo era el sentimiento antiburgu¨¦s que se viv¨ªa en el Par¨ªs de entreguerras, ahondando en tab¨²s de otros tiempos como el lesbianismo o el adulterio.?

5. Claudine en la escuela. No pod¨ªamos mentar a Ana?s Nin y omitir a Sidonie Gabrielle Colette (1873-1954). Por haberse vengado de su marido ad¨²ltero bailando en el Music Hall parisino, por despojarse de las ataduras morales apostando por aventuras con otras mujeres y por defender los placeres carnales femeninos, esta escritora y periodista regal¨® a los lectores una de las mejores series de la er¨®tica literaria: Claudine. Azotainas entre colegialas, profesoras que flirtean con alumnas y amantes desesperados. Claudine en la escuela desentra?a el libertinaje de principios del siglo XX (se escribi¨® en 1900) y su protagonista acompa?ar¨ªa a Colette paralelamente durante su vida. L¨¢stima que en un principio la firma se la (auto)atribuyese uno de sus maridos, Willy.

Sidonie Gabrielle Colette es una de las escritoras que forman parte de nuestra lista.

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4. Historia de O. Un cl¨¢sico del g¨¦nero. Chocante y rompedora en su d¨ªa por desenmara?ar los secretos del BDSM (Bondage, Disciplina y Dominaci¨®n, Sumisi¨®n y Sadismo, Masoquismo), la novela de la francesa de Anne Desclos (1907-1998), ¨Caunque firm¨® el libro como Pauline Re¨¢ge y fue conocida como Dominique Aury¨C, act¨²o como una aut¨¦ntica revoluci¨®n en la Francia moralista de los 50. Prohibida durante a?os, la historia de la fot¨®grafa de moda que se embarca en el mundo de la perversi¨®n sexual por amor, multiplic¨® su fama gracias a la pel¨ªcula que se estren¨® en los setenta.

3. Lace. ¡°?Cu¨¢l de vosotras tres zorras es mi madre?¡±. Poco antes de convertirse en la dulce coprotagonista de Gremlins, Phoebe Cates enton¨® una de las mejores frases de la televisi¨®n barroca de los ochenta, aquella en la que los cardados y las hombreras estratosf¨¦ricas eran uniforme oficial del tubo cat¨®dico. Emitida por Telecinco en los 90 como Lazos Secretos, la mini serie estaba basada en la novela de Shirley Conran, un superventas que rompi¨® moldes 30 a?os antes de que Cincuenta Sombras de Grey acaparase titulares. Publicitada como ¡°el libro que toda madre esconder¨ªa a su hija¡±, la historia narra c¨®mo una actriz del porno, abandonada al nacer, re¨²ne a tres amigas para averiguar cu¨¢l de ellas es su progenitora. Imprescindible.

2. El rapto de la bella durmiente. Anne Rice no s¨®lo ha escrito historias de vampiros. En los 80, bajo pseud¨®nimo, ide¨® una trilog¨ªa er¨®tica sobre la Bella Durmiente que r¨ªete t¨² de Walt Disney. ¡°Las mujeres tienen el mismo derecho a la pornograf¨ªa que los hombres, y estoy hablando de pornograf¨ªa literaria, literatura er¨®tica. Si una mujer quiere ser abordada por un pirata, est¨¢ en su derecho¡±, explic¨® al New York Times hace unas semanas, ahora que el tir¨®n de E. L. James ha propiciado la reedici¨®n de su trabajo. Firmes creyentes del ¡°y comieron perdices¡±, abstenerse. Aqu¨ª el Pr¨ªncipe esclaviza sexualmente a una Bella que ya despierta desnuda de su hechizo.

1.? Por siempre ?mbar. Tal y como ocurre con E. L. James, la estadounidense Kathleen Winsor (1919-2003) fue ridiculizada por la cr¨ªtica y venerada por el p¨²blico. He aqu¨ª 972 p¨¢ginas que desgranan el libertinaje sexual que se vivi¨® en la corte del rey Carlos II de Inglaterra durante el siglo XVII. Beneficiada por la pol¨¦mica que gener¨®, Por siempre ?mbar estuvo prohibida en 14 estados en los a?os cuarenta. El fiscal general de Massachussets justific¨® el veto alegando las 70 referencias a encuentros sexuales, 39 embarazos ileg¨ªtimos y los siete abortos que aparec¨ªan en sus p¨¢ginas y la Iglesia Cat¨®lica tild¨® al libro de ¡°indecente¡±. Las aventuras sexuales de la hu¨¦rfana ?mbar, una hero¨ªna disfuncional para los c¨¢nones de la ¨¦poca, fueron edulcoradas en su adaptaci¨®n a la gran pantalla en 1947, pero propici¨® que Amber fuese uno de los nombres m¨¢s populares en EEUU durante la segunda mitad del siglo XX.