Los 9 mejores restaurantes para cenar en un jard¨ªn (que no en una terraza)
Para¨ªsos para comer al fresco y rodeados de vegetaci¨®n. Un placer para las c¨¢lidas noches de verano.
Bailara (Bidania-Goiatz, Guipuzcoa)
?Siempre que el tiempo del norte lo permita, se puede cenar en los jardines del Iriarte Jauregia, un palacio restaurado del siglo XVII, situado en una zona rural cerca de Guip¨²zcoa y a 30 kil¨®metros de la costa.
Este hotel posee un restaurante, Bailara, a cargo del chef mexicano Enrique Fleischmann, que propone una sencilla cocina de autor, donde la materia prima y la t¨¦cnica son las protagonistas. Productos locales y de temporada, procedentes de las granjas, huertos cercanos o del mar Cant¨¢brico, ya que aqu¨ª la naturaleza es la que manda. En la carta nunca faltan la menestra de verduras, la merluza en salsa verde o los tacos de carne que este chef hace a la manera mexicana, muy hechos por fuera y crujientes por dentro.
Aunque el calor apriete, en el norte hay que llevar siempre una chaqueta para disfrutar de este jard¨ªn, con un cierto aire ingl¨¦s, cuando cae el sol.
Precio: Desde 50 euros. Men¨² degustaci¨®n, 65 euros.
El Jard¨ªn de Miguel ?ngel (Madrid)
Es uno de los refugios, lugares-premio u hombros en los que llorar para los Rodr¨ªguez que se encuentran solos en la capital; ya que, adem¨¢s de hacer olvidar a uno que se encuentra rodeado de asfalto en pleno mes de agosto, posee el siempre recomendable tratamiento de rodearse de belleza, naturaleza y tranquilidad.
Entre plantas y p¨¦rgolas se puede cenar recetas de cocina mediterr¨¢nea moderna, lo que traducido al plato puede convertirse en una ensalada templada de sepia y pimientos asados, un bogavante con falso risotto de pasta o el excelente postre que se ha hecho ya famoso entre los clientes habituales: la inolvidable e inigualable espuma de arroz con leche y crujiente de canela. Existe tambi¨¦n una zona de showcooking y c¨®cteles variados para esperar mientras llega la cena y so?ar con las vacaciones que a¨²n nos esperan o las que nos supieron a poco.
Precio: Desde 45 euros.
Combinar lo r¨²stico con la exclusividad es una cualidad que muchos catalanes dominan y que est¨¢ patente en esta mas¨ªa del siglo XVII, en la que se puede cenar en su jard¨ªn con la iluminaci¨®n perfecta, vistas a una fachada de piedra tapizada por una buganvilla y rodados de plantas y palmeras.
Can Travi Nou es toda una experiencia por su privilegiado entorno, su trato impecable y su cocina catalana-mediterr¨¢nea, que lo convierte en uno de los templos gourmets de la ciudad condal. Ideal para cenas rom¨¢nticas, en las que un poco de clasicismo, velas y falta de elementos que nos distraigan, a parte de lo que hay sobre la mesa, propician que nos centremos en el tema a tratar: el amor con todos sus aperitivos, entrantes y postres.
Precio: Desde 50 euros.
?El Jard¨ªn del Califa (Vejer de la Frontera, C¨¢diz)
?Imprescindible para los amantes de los sabores ¨¢rabes, ya que la cocina de su chef, el marroqu¨ª Khadija Essaadi, mezcla recetas de su pa¨ªs, egipcias, libanesas o argelinas, con un toque mediterr¨¢neo patrio.
El entorno, un jard¨ªn con fuente, plantas tropicales y palmeras, hace el resto para que al cenar en este restaurante uno tenga la sensaci¨®n de que est¨¢ algo m¨¢s al sur de C¨¢diz, pasando el Estrecho. La carta es extensa y llena de sabores especiados, como el cusc¨²s agridulce, la pastela o el mezze del Califa, variedad de entrantes con hummus y tabul¨¦. Pero lo mejor de este lugar son sus muchos espacios -aljibe, p¨¦rgola, interior abovedado- y sus buenas materias primas locales , algunas de ellas, de su propia huerta.
Precio: Desde 30 euros.
Hospedarse en el Ritz no est¨¢ al alcance de cualquiera, pero tomarse unas tapas en su jard¨ªn, simulando que se tiene una econom¨ªa desahogada y un trabajo a la altura, es ya algo m¨¢s asequible a la mayor¨ªa de los mortales.
Las tapas del Ritz, aunque son fieles a la tradici¨®n madrile?a, y entran dentro del imaginario colectivo, a saber: croquetas, ensaladilla rusa, tortilla, chipirones, alitas de pollo o calamares, tiene algo diferente que las pone a tono con el exquisito entorno en el que son servidas. Para los seguidores de la filosof¨ªa: ¡°un d¨ªa es un d¨ªa y siete una semana¡±, hay tambi¨¦n placeres m¨¢s caros como las ostras con caviar, el men¨² degustaci¨®n o el men¨² Hendrick¡¯s, novedad de esta temporada para los jueves que combina la comida con un c¨®ctel realizado con esta selecta marca de ginebra.
Precio: Men¨² degustaci¨®n, 55 euros; men¨² Hendrick¡¯s, 78 euros.
Ecocentro (Santa Gertrudis, Ibiza)
?En una finca payesa, en pleno campo de la alternativa Ibiza, se encuentra este centro que, adem¨¢s de restaurante bio-vegetariano cuenta con un bar saludable, una ecotienda y una sala de actividades para conferencias, clases de yoga, pilates u otros asuntos entorno a la vida sana.
La carta gourmet para la cena esta compuesta de productos de temporada, de agricultura ecol¨®gica y local -seg¨²n disponibilidad-, con preparaciones internacionales, orientales y mediterr¨¢neas. Seit¨¢n, tofu, pastas y arroces integrales con verduras y dem¨¢s exquisiteces de la comida vegetariana con nombres sugestivos. Todo en medio de un jard¨ªn tranquilo y fresco, muy lejos de la Ibiza insomne y ruidosa de la que todos hemos o¨ªdo hablar.
Precio: desde 20 euros.
El jard¨ªn de este establecimiento, a pocos pasos de la Giralda, se encuentra de puertas adentro y creciendo en las paredes, ya que se trata de uno vertical con alrededor de 500 plantas que los encargados cuidan con esmero. La decoraci¨®n moderna, funcional y arriesgada hace a La Mamarracha un restaurante at¨ªpico en la capital andaluza.
Aqu¨ª, casi todo se pasa por la brasa: carnes, pescados y verduras. Productos frescos y de temporada en los que el toque especial de la casa se consigue gracias al carb¨®n de quebracho que los cocina. Sardinas en espeto, pulpo, pollo de campo al ladrillo o caballa soasada con hummus y ensalada de pepino y s¨¦samo, son algunos de sus platos estrella.
Precio: Desde 25 euros.
La Casa del Estanque (Sevilla)
Las noches del t¨®rrido verano sevillano se hacen m¨¢s llevaderas lejos del asfalto, en una finca con 500 metros cuadrados de jardines por los que pasear y donde poder cenar. La Casa del Estanque, adem¨¢s de una fuente y de espacio suficiente para que sea uno de los lugares preferidos para la celebraci¨®n de eventos, cuenta con unas tapas basadas en la uni¨®n de la cocina mediterr¨¢nea y los sabores orientales, que pueden probarse de mayo a octubre. El jam¨®n ib¨¦rico convive aqu¨ª en harmon¨ªa con el niguiri de buey, y las croquetas de pato y pasas o de cecina y queso hace otro tanto con el tataky de salm¨®n.
Precio: Desde 25 euros.
El nombre de este restaurante significa -en catal¨¢n- ropa tendida, ya que eso es parte del panorama que se divisa desde lo alto de esta azotea, en pleno barrio g¨®tico barcelon¨¦s. Dentro del Hotel Neri pero abierto a todo el mundo, el lugar es uno de los puntos clave a visitar en la capital catalana. Woody Allen tambi¨¦n estuvo aqu¨ª y rod¨® escenas de Vicky Cristina Barcelona (2008) en una de sus terrazas que da a la plaza de San Felip Neri, enclave que cuenta con un sustancioso pasado ya que all¨ª se llevaron a cabo fusilamientos durante la Guerra Civil, era uno de los lugares preferidos por Gaud¨ª para pasear y, en junio, las flores de los ¨¢rboles de tipuana tapizan el suelo de amarillo.
La carta de Roba Estesa se compone de hamburguesas -las hay tambi¨¦n de at¨²n o vegetarianas- y chuletones, adem¨¢s de otras delicias para picar como sus croquetas caseras.
Precio: Hamburguesa m¨¢s bebida o c¨®ctel, 18 euros.
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