Los mejores planes literarios

1. C?MPLICES DEL PAPEL. Tres grandes figuras del panorama literario patrio nos descubren al autor responsable del ¨²ltimo libro que les ha mantenido en vilo.

La excusa: la fiesta grande de los libros, el pr¨®ximo 23 de abril. La idea: ?qui¨¦n mejor que un escritor reconocido para descubrir a otro? Madrid, que acoge este a?o la IX Noche de los Libros, con Salman Rushdie como invitado de lujo, es el escenario propicio para tres encuentros historiados.

El primero, el del maestro de la novela negra, Lorenzo Silva, con el responsable de una de las trilog¨ªas de este g¨¦nero m¨¢s populares de los ¨²ltimos tiempos: C¨¦sar P¨¦rez Gellida. Tambi¨¦n ha tenido un padrino de excepci¨®n: Juan Marqu¨¦s. El que ha sido su primer editor ¨Cel ensayista, novelista y poeta Andr¨¦s Trapiello¨C hoy no escatima en elogios para su pupilo. Y no deja de ser curioso que Mar¨ªa Due?as, la autora de El tiempo entre costuras, cuya adaptaci¨®n televisiva ha sido un ¨¦xito arrollador, haya elegido a un autor que procede de este medio, el guionista Miguel S¨¢ez. De los porqu¨¦s y c¨®mos de la literatura trataron las conversaciones.

Andr¨¦s Trapiello y Juan Marqu¨¦s. El joven poeta (que acaba de publicar La extensi¨®n de mi cuerpo, en N¨®rdica Libros) con su colega y primer editor, en La Italiana (Corredera Baja de San Pablo, 10; Madrid).

Mirta Rojo

DUE?AS Y S?EZ: CONEXI?N TET?AN

Acaban de conocerse hace unos minutos y los encontramos enfrascados en una animada charla. ?Apaches es una de esas novelas que caen en tus manos y no la puedes soltar?, comenta con entusiasmo la autora de Misi¨®n olvido (Temas de Hoy). ?De poder, habr¨ªa agarrado el tel¨¦fono para que Miguel me hablara de su l¨ªnea divisoria entre realidad y ficci¨®n?.

Que esta sea difusa es parte de la magia de esta historia de delincuencia ambientada en un barrio obrero de Madrid. Justo el que comparte nombre con la ciudad del norte de Marruecos donde se ubica parte de la acci¨®n del superventas de Due?as: Tetu¨¢n, una coincidencia que ambos encuentran divertida. El propio autor protagoniza unos hechos que le sucedieron a su familia hace 20 a?os, cuando su padre, ?un h¨¦roe ca¨ªdo al final de su vida?, entr¨® en quiebra econ¨®mica y moral.

Del estilo de este escritor con piel de guionista (ha trabajado en series como Al salir de clase o Sin tetas no hay para¨ªso), Mar¨ªa dice que es ?fluido, fresco y ¨¢gil. Pura dinamita?. Sin embargo, lo que la ha conquistado es c¨®mo mezcla ese ritmo trepidante con un sustrato tierno y emocional: ?Combina una escena realista y desgarrada con reflexiones sobre la lealtad, el afecto, la familia, la responsabilidad, la amistad¡­?. Valores que S¨¢ez considera perdidos en la sociedad actual y que le gustar¨ªa rescatar en una pr¨®xima novela, otra historia familiar en la que homenajear nuevamente a su padre, pero esta vez relatando su infancia. ??Ya me dan ganas de pedirle lo que tenga en el ordenador sobre esa precuela!?, exclama la escritora.

Lorenzo Silva y C¨¦sar P¨¦rez. Gellida El prescriptor de la novela negra y su heredero debaten sobre verosimilitud, polic¨ªas y psicopat¨ªas varias en Ocho y Medio (Mart¨ªn de los Heros, 11; Madrid).

Mirta Rojo

TRAPIELLO Y MARQU?S: ADMIRACI?N, NO ADULACI?N

??La relaci¨®n entre un joven y un viejo es siempre complicada: o es de igualdad o es inviable?, sentencia Andr¨¦s, quien en oto?o publicar¨¢ El final de Sancho Panza y otras suertes (Destino). Intenta describir las ?afinidades electivas? que le unen con Juan, a quien conoci¨® en 2006 en la Residencia de Estudiantes, en cuyo equipo de investigaci¨®n trabajaba Marqu¨¦s como becado.

Dos a?os y algunas excursiones al Rastro despu¨¦s, Trapiello editaba Abierto, en Pretextos, el primer libro de poemas de Juan. ?De no ser por Andr¨¦s, nunca se me habr¨ªa ocurrido publicar?, a?ade el joven cr¨ªtico literario y poeta. Comparten el respeto por la literatura que, para Andr¨¦s, ?es un estado de espera atenta?. Juan reconoce, casi orgulloso: ?El alquiler no se puede pagar con versos, pero, en realidad, yo me alegro de eso. Si la poes¨ªa fuese lucrativa, me temo que podr¨ªamos llegar a lamentarlo?.

SILVA Y P?REZ GELLIDA: ELEVANDO EL G?NERO POLICIACO

Lorenzo Silva es, adem¨¢s de escritor y consumado lector de literatura policiaca, abogado. Por eso, se rinde ante ?la documentaci¨®n concienzuda y rigurosa, acompa?ada de la falta de complejos y la maestr¨ªa en el lenguaje, de la escritura de C¨¦sar?.

La trilog¨ªa Versos, canciones y trocitos de carne (Suma de letras), cuya tercera y ¨²ltima entrega, Consummatum Est, acaba de publicarse, ha hecho que se hable de P¨¦rez Gellida como el Stieg Larsson espa?ol: ?La etiqueta, con la que no me identifico, me beneficia m¨¢s que me perjudica?, explica el joven, quien se atrevi¨® a pedir a su admirado Lorenzo Silva que escribiera el pr¨®logo de este thriller. ?Cuando vi el nombre del maestro del g¨¦nero en el libro impreso, pens¨¦: ¡°Hostia, va a ser verdad que soy escritor¡±. Me sent¨ª parte del gremio?. Lorenzo, que el 3 de junio publicar¨¢ Los cuerpos extra?os, la s¨¦ptima entrega de la serie protagonizada por Bevilacqua y Chamorro, cumple dos a?os como editor de Playa de ?kaba: ?Nunca he pretendido que la editorial fuera un negocio. Hay que buscar los ¨¢ngulos no iluminados del camino?.

La ciudad invisible, tapas y viajes

D.R.

2. DE BUENA TINTA. Aqu¨ª los libros se maridan con c¨®cteles, tapas ¡®gourmet¡¯, caf¨¦ y buena compa?¨ªa.

¨C? Hay quien lee una historia con un gin-tonic, al menos, en Toma 3 (Toma3.es-flash.com), en Gij¨®n. Un local inaugurado en 2000, que estrena ubicaci¨®n en el 27 de Marqu¨¦s de Casa Vald¨¦s.

¨C En este espacio se hablan decenas de idiomas, l¨®gico, es Bab¨¨lia books & coffee (Babeliabcn.com). Como su nombre indica, se trata de un local que vende publicaciones multiling¨¹es de segunda mano.

¨C La ciudad invisible (Laciudad-invisible.com) est¨¢ en Madrid y se especializa en libros de viajes y tapas del mundo. Feliz aventura.

¨C Comida casera, libros y ropa de segunda mano y espect¨¢culos sorpresa son los ingredientes de Chico Ostra (Chicoostra.com), en Valencia.

3. PRIMOS CERCANOS

Pistas para acertar con la elecci¨®n del libro a regalar (o a regalarse) para adictos al mundo del arte, el cine, la televisi¨®n y el teatro.

¨C El universo de Julio Verne. El Museo del Romanticismo de Madrid acoge la exposici¨®n Gabinete Verne, en la que 20 artistas presentan objetos inspirados en la obra del visionario franc¨¦s. N¨®rdica ha publicado una versi¨®n de Veinte mil leguas de viaje submarino ilustrada por Agust¨ªn Comotto.

¨C El futuro de nuestras emociones. La pel¨ªcula Her, de Spike Jonze, mostraba un chocante salto evolutivo en las relaciones entre la tecnolog¨ªa y el ser humano. En la visionaria El futuro de nuestra mente (Debate), Michio Kaku aborda c¨®mo la inteligencia artificial revolucionar¨¢ nuestros pensamientos y emociones.

¨C Invocar a las fuerzas oscuras. En True Detective el mal tiene un componente sat¨¢nico y ritualista que recuerda al malsano universo del maestro del terror H.?P. Lovecraft. Igual que los investigadores de la serie, el protagonista de El caso de Charles Dexter Ward (Acantilado) va detr¨¢s de una escalofriante oscuridad.

¨C Explosi¨®n dram¨¢tica. Wajdi Mouawad, liban¨¦s formado en Montreal, alcanz¨® reconocimiento internacional con la desgarradora Incendies, adaptada al cine con ¨¦xito. Su novela ?nima (Destino), sobre un hombre que busca vengar el asesinato de su esposa, pide de nuevo esp¨ªritus poco impresionables.

La pel¨ªcula Her, de Spike Jonze, mostraba un chocante salto evolutivo en las relaciones entre la tecnolog¨ªa y el ser humano.

Cordon Press

4. SOBRE ELLAS. L¨ªderes del poder afroamericano, retratistas de personajes, novelones inolvidables y autoras gr¨¢ficas de impacto.

¨C Pasi¨®n prohibida: El romance imposible entre dos nigerianos a lo largo de tres d¨¦cadas, Americanah (Random House) confirma a Chimamanda Ngozi como un puntal de las letras afroamericanas.

¨C Primer amor. La Gran Guerra trae dolor a casa del peque?o Vanvan, a la vez que una criada adolescente despierta en ¨¦l nuevas emociones. ?lisa (Errata Naturae), de Jacques Chauvir¨¦. Historietas y relatos Antolog¨ªa escrita y dibujada por autoras de c¨®mic e ilustradoras, Enjambre (Norma) presenta estilos heterodoxos, bien unidos por una mirada cr¨ªtica a la sociedad actual.

¨C Aires ¡®dickensianos¡¯. En El jilguero (Lumen) Donna Tartt ofrece m¨¢s de mil absorbentes p¨¢ginas con las peripecias de un joven desde el d¨ªa en que pierde a su madre y roba un cuadro.

5. HAY NOVELA NEGRA

El crimen ahora tiene un m¨®vil polaco.

Si la delincuencia que subyace en una sociedad muy desarrollada convirti¨® la literatura escandinava en un boom, ?la originalidad de las propuestas polacas radica en narrar las extra?as y complicadas circunstancias actuales e hist¨®ricas del pa¨ªs?, explica Marek Krajewski, cuya obra se ha traducido a 20 idiomas, pero avanza a paso lento en Espa?a. ?l es el precursor de la nueva ola de autores que se avecina: a la cabeza, Zygmunt Miloszewski, un ¨¦xito de cr¨ªtica en Francia y Estados Unidos. Su obra A Grain of Truth tendr¨¢ su versi¨®n en cine y aterrizar¨¢ sobre papel en nuestro pa¨ªs en cuesti¨®n de meses (la editorial est¨¢ por confirmar).

Tambi¨¦n ver¨¢n pr¨®ximamente la luz las novelas de retrocrimen de Michal y Malgorzata Kuzminski, o leeremos el salto de Olga Tokarczuk a la novela ecopolic¨ªaca con Arrastra tu arado sobre los huesos de los muertos, de la que tambi¨¦n se planea una pel¨ªcula. Otros nombres para no perder de vista: Joanna Jodelka, Mariusz Czubaj o Marcin Wronski. Para abrir boca, Michal Witkowski acaba de publicar en Espa?a El le?ador (Rayo Verde).

Libro digital con olor a papel

Mirta Rojo

6. NUEVOS G?NEROS. Las tramas se autocatalogan buscando lectores en la era 3.0.

Cada ¨¦poca tiene sus expresiones y en esta era de 140 caracteres y verdades inc¨®modas aparecen y cobran auge g¨¦neros como el CliFi: ciencia ficci¨®n en torno al cambio clim¨¢tico. Es lo que sucede en Shackleton¡¯s Man Goes South (editado por el Museo de Ciencias brit¨¢nico), de Tony White. O la twitteratura: microrrelatos en formato tuit, como los 100 mitos griegos que ha condensado la escritora Lucy Coats (@lucycoats). Tambi¨¦n proliferan las obras grandbooking, donde una persona mayor, generalmente una anciana a punto de morir, comparte su sapiencia cargada de mala baba, como en La mujer a mil grados (Lumen), de Hallgr¨ªmur Helgason.

La novela negra apunta hacia el local crime (o crimen local), asesinatos e investigaciones en microcosmos muy cerrados. Algunas heridas nunca se curan (Maeva), de Nele Neuhaus, se adscribe al g¨¦nero. Y la evoluci¨®n natural del femenino chicklit se llama farm-lit, donde las pizpiretas protagonistas dejan la ciudad para vivir en el campo, como sucede en Cambio mis tacones por las ruedas de un tractor (Espasa), de Ree Drummond.

7. SOBRESALIENTES. Virguer¨ªas visuales que se salen de las p¨¢ginas.

¨C Surrealismo incluido. El humorista Miguel Noguera contin¨²a aplicando su mirada corrosiva en Mejor que vivir (18?€, Blackie Books), compilaci¨®n de 700 ideas ilustradas y un p¨®ster de gatos donde, bien visto, esa otra galaxia parece la nuestra.

¨C Libro digital con olor a papel. La editorial Fotolito Books viste en 3D las ediciones electr¨®nicas con packaging de dise?o. Sus dos primeros t¨ªtulos: El proceso, de Kafka, y una selecci¨®n de cuentos de Poe (22 € c/u).

¨C Reaprender a mirar. Con ?Dos ojos? (13,99?€, Libros del Zorro Rojo), un aparentemente sencillo juego de troquelados y superposiciones, Lucie F¨¦lix ha conseguido, entre otros, los premios Pitchou y Sorci¨¨re al mejor libro.

¨C Cartulina terap¨¦utica. Ver la luz (12,50?€, K¨®kinos), de Emma Giuliani, no es exactamente un libro, sino un desplegable cargado de poes¨ªa que, con frases cortas, ilustraciones sencillas e ingenios de papiroflexia, transforma el estado de ¨¢nimo.