El Senado pide a Bush normas que reduzcan las emisiones de di¨®xido de carbono en EE UU

El Comit¨¦ de Asuntos Internacionales del Senado decidi¨® ayer por unanimidad aprobar una resoluci¨®n que exige que cualquier acuerdo en torno al cambio clim¨¢tico incluya recortes obligatorios en las emisiones de los gases que contribuyen al efecto invernadero de centrales energ¨¦ticas y f¨¢bricas.

La resoluci¨®n pide al Congreso que apoye este intento de que "Estados Unidos demuestre liderazgo internacional y responsabilidad tomando medidas que aseguren un significativo descenso en la emisi¨®n de gases que contribuyen al efecto invernadero".

La resoluci¨®n incluida en el presupuesto del Departamento de Estado propone el protocolo de Kioto como modelo a seguir en el recorte de gases.

Bush se opone al protocolo de Kioto, que califica de "fatalmente errado" y negativo para los intereses econ¨®micos de Estados Unidos.

Pero la ausencia de Estados Unidos en el acuerdo alcanzado el pasado mes en Bonn por 178 pa¨ªses ha despertado la impaciencia de los legisladores, gran parte de la opini¨®n p¨²blica y la prensa.

En su viaje a Europa del pasado mes, el presidente Bush prometi¨® que Estados Unidos elaborar¨ªa su alternativa al texto de Kioto.

Mientras estudia nuevos enfoques del problema, que de momento se reducen a pedir reducciones voluntarias, el Senado quiere que el presidente acelere la elaboraci¨®n del plan para participar en las reuniones de octubre y romper el aislamiento internacional en el que ha quedado Estados Unidos en esta cuesti¨®n.

Capitalizaci¨®n de los recortes

Las empresas que est¨¢n reduciendo voluntariamente sus emisiones, o plantando o protegiendo bosques que absorben di¨®xido de carbono, querr¨ªan que sus esfuerzos tuvieran alg¨²n tipo de contrapartida.

Actualmente se baraja la posibilidad de que la limpieza fuera premiada a trav¨¦s de subvenciones o reducciones fiscales, o ciertas concesiones administrativas en otros cap¨ªtulos medioambientales.

Pero para que este sistema se pudiera articular ser¨ªa necesaria una norma que limitara las emisiones de alguna manera, un programa que estableciera objetivos para saber qu¨¦ empresas est¨¢n reduciendo sus emisiones adecuadamente y cu¨¢les no.

"No proponemos l¨ªmites m¨¢ximos de emisiones de CO2" declar¨® Jeffrey Keeler, director de estrategias medioambientales de Enron al New York Times "pero se ha demostrado que los programas voluntarios no funcionan bien. Se pueden poner l¨ªmites sin hacer peligrar la econom¨ªa".

Senado dividido regionalmente

El Senador Jeffords, independiente de Vermont, el nuevo presidente de la comisi¨®n del Senado para Medio Ambiente y Obras P¨²blicas, ha declarado que el calentamiento global es su prioridad. A su esfuerzo se unen senadores de estados que se est¨¢n viendo perjudicados por el deterioro medioambiental, como Alaska, dividiendo el Senado m¨¢s por estados que por ideolog¨ªa.

A los planes de Jeffords de reducir las emisiones de di¨®xido de carbono, ¨®xido de nitr¨®geno, y di¨®xido de sulfuro, se oponen principalmente los representantes del medio oeste.

La regi¨®n del medio oeste es la mayor productora de energ¨ªa, principalmente mediante carb¨®n, y sus centrales y sus f¨¢bricas tienen maquinaria anticuada y contaminante que deber¨ªa cambiarse para reducir las emisiones seg¨²n los planes de Jeffords, lo que supondr¨ªa un gran coste para la industria de la zona.

La propuesta de Jeffords de reducci¨®n en cinco a?os de las emisiones es criticada por los representantes del medio oeste por poner un calendario demasiado apretado para la industria.