Stonehenge estaba consagrado a los muertos

"?Qu¨¦ grandioso!, ?qu¨¦ maravilloso!, ?qu¨¦ incomprensible!", exclamaba ante Stonehenge en 1810 William Cunnington, amante de las antig¨¹edades y los f¨®siles y uno de los primeros excavadores modernos del monumento. Los 162 misteriosos bloques de piedra -sin olvidar los circundantes terraplenes, foso, contraescarpa, hoyos, t¨²mulos y calzada que configuran el conjunto- constituyen uno de los grandes enigmas de la arqueolog¨ªa y han dado lugar a innumerables teor¨ªas, algunas absolutamente disparatadas, sobre su funci¨®n y significado."?Qu¨¦ incomprensible!": aunque muchos creen que el secreto de Stonehenege es irreductible, la frase ya es menos cierta en los ¨²ltimos tiempos. Ahora, una nueva investigaci¨®n parece disipar algo m¨¢s la niebla de conocimiento que rodea, como muchas veces la real y las ovejas, al c¨ªrculo prehist¨®rico de la llanura de Salisbury. Seg¨²n el nuevo estudio, patrocinado por National Geographic, Stonehenge ser¨ªa una construcci¨®n dedicada a los muertos, un lugar para ellos, y habr¨ªa servido como cementerio de manera continuada.

"Ahora tenemos claro que Stonehenge tuvo un car¨¢cter funerario en todas sus etapas", ha manifestado hoy en una presentaci¨®n por videoconferencia de los nuevos datos el arque¨®logo de la Universidad de Sheffield Mike Parker Pearson, que ha liderado la investigaci¨®n. Qu¨¦ hab¨ªa enterramientos en Stonehenge -pozos con cenizas y huesos, pues se practicaba la cremaci¨®n- era ya conocido, pero se cre¨ªa que pertenec¨ªan a una de las primeras fases del monumento, cuando ¨¦ste consist¨ªa s¨®lo en terrapl¨¦n, zanjas y postes de madera alineados, y antes de que se levantaran las grandes piedras que le proporcionan su emblem¨¢tica imagen. Stonehenge fue construido a lo largo de una extensa secuencia temporal que se inicia hace m¨¢s de 5.000 a?os, en el Neol¨ªtico, y concluye mil a?os despu¨¦s, en la edad del Bronce (su uso fue abandonado alrededor del 1.500 antes de Cristo). El monumento adquiri¨® la forma que lo ha convertido en un icono, es decir las grandes piedras con dinteles -el c¨ªrculo de piedras sarsen, el de piedras azules y los trilitos-, hacia el 2000 a. de C.

El nuevo estudio, con modernas pruebas de radiocarbono que han permitido afinar la cronolog¨ªa de los restos de las cremaciones, ha revelado que Stonehenge fue empleado como cementerio desde el a?o 3.000 a de C. y hasta mucho despu¨¦s de la colocaci¨®n de las famosas piedras colgantes. Los arque¨®logos afirman adem¨¢s que los enterramientos son much¨ªsimo m¨¢s numerosos de lo estimado y elevan hasta 240 las personas que habr¨ªan sido inhumadas en el monumento en un proceso que habr¨ªa ido increment¨¢ndose con el tiempo. Esos difuntos ser¨ªan, como lo apunta el hallazgo junto a los restos de cabezas de maza (objeto ligado al poder), personajes de ¨¦lite, miembros de una misma familia de jefes de tribu neol¨ªticos que conformar¨ªan un verdadero linaje din¨¢stico.

De enorme inter¨¦s es la teor¨ªa, a partir de las investigaciones, de que Stonehenge resulta algo as¨ª como el reverso oscuro, mortuorio, del vecino Durrington Walls, yacimiento a tres kil¨®metros que tambi¨¦n ha sido excavado en el mismo proyecto y en el que se descubri¨® el a?o pasado un poblado. Durrington, y esta podr¨ªa ser la respuesta -por fin- al enigma de Stonehenge, habr¨ªa sido la morada de vida de los constructores en contraposici¨®n a la morada de muerte que constituir¨ªa el c¨¦lebre monumento. La asociaci¨®n entre los dos recintos, Durrington y Stonehenge, no se basa s¨®lo en la proximidad sino en el parecido de ambas estructuras: las dos son circulares, con terrapl¨¦n y foso, y en la primera se ha encontrado un c¨ªrculo de postes de madera similar a Stonehenge. Ambas tienen alineamiento solsticial. Una calzada lleva desde Durrington al vecino r¨ªo Avon al igual que otra avenida, mucho m¨¢s larga, conduce desde Stonehenge al mismo curso de agua. Los arque¨®logos creen que el r¨ªo era una v¨ªa de comunicaci¨®n ceremonial entre ambos lugares. Si Stonehenge era el lugar de los muertos, el poblado de los ancestros difuntos, ello explicar¨ªa, opina Parker Pearson, el uso de la piedra, que significar¨ªa la mineralizaci¨®n de los cuerpos en el proceso de descomposici¨®n, por contraposici¨®n a la madera, materia de vida. En Stonehenge, por supuesto, s¨®lo se enterrar¨ªa a los muertos de la ¨¦lite mientras que las cenizas de los dem¨¢s podr¨ªan haber sido lanzadas al r¨ªo.

Del an¨¢lisis de los restos de animales, se deduce que Durrington era un lugar estacional en el que probablemente se congregaba la gente en momentos determinados del a?o. Junto a Durrington se alza otro henge (nombre que se da a las construcciones redondas u ovaladas con terrapl¨¦n y otros elementos), Woodenhenge. Los rastros de dos extra?as estructuras de madera han sido interpretados como plataformas en que se depositaban los cuerpos para su descomposici¨®n. El pr¨®ximo domingo, National Geographic Channel estrenar¨¢ un documental sobre las excavaciones.