El poder de la entrega

M¨²sculo que no se mueve, se atrofia, y en el cerebro tambi¨¦n. Por eso, con mucha dedicaci¨®n al paciente, con siete horas de rehabilitaci¨®n diarias, se pueden recuperar funciones neuronales perdidas y mejorar la calidad de vida. Estos avances pueden conseguirse incluso en enfermedades como el parkinson o el alzheimer", subraya el subdirector ejecutivo del Centro Internacional de Restauraci¨®n Neurol¨®gica (Ciren) de La Habana, Emilio Villa, que ha visitado Espa?a para conocer instalaciones m¨¦dicas e intercambiar experiencias con colegas de Madrid, Valencia o Pamplona. "El tejido nervioso es redundante. Tenemos m¨¢s que el que necesitamos y podemos emplear esa reserva en ayudar a los pacientes con trastornos neurodegenerativos".

"Creemos que se pueden recuperar funciones perdidas" (Dr. Villa)

F¨¢tima no abr¨ªa la boca y aprendi¨® a masticar y a beber con pajita

Las familias con sus seres queridos en sillas de ruedas, tetrapl¨¦jicos, parapl¨¦jicos o gravemente discapacitados apenas encuentran motivos para la esperanza cuando se les comunica que sus casos no tienen remedio. "Te ense?an un poco c¨®mo vivir. A la gente le ense?an a cargar con su dolencia y que se logre incorporar a la sociedad con lo poquito que pueda hacer, aunque las sillas de ruedas sean cada vez m¨¢s sofisticadas", agrega Villa, responsable de un centro que no ha descubierto la p¨®lvora -pues la comunidad m¨¦dica internacional sabe qu¨¦ hacer con estos enfermos-, pero que "es el ¨²nico en el mundo que aplica un sistema de rehabilitaci¨®n intensiva de hasta siete horas diarias, contra la hora y media o dos horas semanales de promedio en la mayor¨ªa de los hospitales p¨²blicos del mundo". En el mejor de los casos, incluyendo cl¨ªnicas privadas, la terapia ronda las dos horas, dos o tres veces a la semana, dependiendo del tipo de lesi¨®n.

?Y los resultados? El m¨¦dico cubano asegura que las personas tratadas en el Ciren, m¨¢s de 40.000 de 83 pa¨ªses desde 1989, experimentan una mejor¨ªa del 60% al 70% respecto a como llegaron al centro. "Trabajamos con el convencimiento de que se pueden recuperar funciones perdidas. Por las caracter¨ªsticas del sistema cubano, el m¨¦dico s¨®lo trabaja en un sitio. Es posible, por tanto, que un equipo multidisciplinario, dirigido por un neur¨®logo, trabaje siete horas diarias con un paciente. Las horas de rehabilitaci¨®n son fundamentales, pero cuando las plantillas m¨¦dicas trabajan en varios sitios no se puede".

Paralelamente a la rehabilitaci¨®n, una de la cirug¨ªas aplicadas en el Ciren se denomina Estereoflex, que permite la resecci¨®n de lesiones intracraneales y el acceso a las afecciones relacionadas con los trastornos del movimiento. "Es totalmente cubana porque Estados Unidos nos impide el acceso a tecnolog¨ªa punta", afirm¨® Villa en un seminario. Tambi¨¦n se efect¨²an trasplantes neuronales a partir de c¨¦lulas madre para segregar dopamina, cuya ausencia est¨¢ relacionada con el parkinson.

No obstante, la neuroplasticidad a trav¨¦s de la rehabilitaci¨®n intensiva, desde las ocho de la ma?ana hasta las cinco de la tarde, es el bander¨ªn de enganche de un centro que ha abierto representaci¨®n en Espa?a (www.auroramultiservice.es) y que anualmente atiende a cerca de 700 pacientes extranjeros, fundamentalmente de M¨¦xico, Argentina, Venezuela, Chile, Brasil, Portugal, Italia y Espa?a.

La sevillana Conchi Linares comparti¨® en un foro el tratamiento de su hijo Carlos, de 11 a?os, en la isla. "Mejor¨® mucho, pero menos que otros ni?os que estuvieron all¨ª porque ya ten¨ªa 11 a?os (...). Me gasto 500 euros para que mi hijo reciba tres horas semanales de fisioterapia, y eso que mi marido es alba?il y gana 1.200 euros mensuales". El matrimonio formado por ?ngeles Montalv¨¢n y Antonio Murillo hizo un tremendo esfuerzo econ¨®mico para poder atender a su hija, que babeaba, no manten¨ªa la cabeza erguida, no abr¨ªa la boca, ten¨ªa los pu?os cerrados y pesaba nueve kilos con a?o y medio. "F¨¢tima aprendi¨® a comer s¨®lido, a masticar y a beber en vaso con ca?ita", explicaron.

Pero no todos los pacientes, sin embargo, son aceptados o reciben garant¨ªas de mejora. "Ser¨ªa criminal prometer a las familias avances imposibles. Primero evaluamos el historial cl¨ªnico y despu¨¦s informamos sobre las posibilidades de recuperaci¨®n", dice Villa. "La clave de todo es no abandonar al enfermo, no regatear en esfuerzos para activar la reserva de tejido nervioso que tiene el ser humano".