Primera cosecha cient¨ªfica del telescopio espacial 'Herschel'
Unos pocos meses de observaciones han generado 152 art¨ªculos publicados ahora en un monogr¨¢fico de la revista 'Astronomy and Astrophysics'
Con su capacidad de ver los cuerpos o regiones muy fr¨ªas del cielo, el telescopio espacial europeo Herschel est¨¢ demostrando su enorme potencial astron¨®mico. Las galaxias lejanas, tan distantes que su luz se ve en infrarrojo cuando llega a la Tierra, y las nubes de gas y polvo de nuestra galaxia, la V¨ªa L¨¢ctea, son algunos de los campos en que los astr¨®nomos est¨¢n especialmente volcados con este observatorio. Sus frutos los presentan ahora: 152 art¨ªculos publicados en un monogr¨¢fico de la revista Astronomy and Astrophysics recogen los resultados de las investigaciones de unos pocos meses con el Herschel. Es la primera cosecha de una misi¨®n que comenz¨® con el lanzamiento del telescopio en mayo del a?o pasado.
"Estos primeros y sobresalientes resultados cubren una variedad extremadamente rica de cuestiones astron¨®micas a todas las escalas c¨®smicas: desde objetos en nuestra vecindad, el Sistema Solar, a las regiones de formaci¨®n estelar en la V¨ªa L¨¢ctea y mucho m¨¢s lejos, incluso en las distantes galaxias y las fases muy primitivas de formaci¨®n del universo", explica G?ran Pilbratt, jefe cient¨ªfico del proyecto Herschel, en un comunicado de la Agencia Europea del Espacio (ESA).
Una de las observaciones destacadas y novedosas que han hecho los expertos se centra en una regi¨®n de la constelaci¨®n del ?guila, situada a unos mil a?os luz de la Tierra, que es una zona de formaci¨®n estelar. Este es un terreno, los mecanismos de nacimiento y primer desarrollo de los astros, en que Herschel tiene mucha competencia, puesto que no es el ¨²nico instrumento astron¨®mico avanzado actualmente en funcionamiento capaz de, con sus sensores de infrarrojo, escudri?ar estas regiones de polvo y gas opacas para otras longitudes de onda. Pero la competencia es buena para la ciencia y la utilizaci¨®n de diferentes detectores permite adquirir un mayor conocimiento de procesos f¨ªsicos en el cielo que, de otro modo, quedan velados.
Pero Herschel es un telescopio avanzado con capacidades muy especiales. La zona de formaci¨®n estelar del ?guila que ha observado mide 65 a?os luz y est¨¢ tan envuelta en polvo que ning¨²n otro observatorio hab¨ªa sido capaz de ver lo que hay en su interior. Ahora, con las primeras im¨¢genes del interior de la nube de polvo, los cient¨ªficos han identificado dos brillantes regiones en las que estrellas reci¨¦n nacidas est¨¢n haciendo brillar el hidr¨®geno gaseoso. En los filamentos se distinguen unas 700 condensaciones de polvo y gas que acabar¨¢n convirti¨¦ndose en estrellas. Seg¨²n los astr¨®nomos, un centenar de ellas son ya protoestrellas, es decir, objetos celestes en sus ¨²ltimas fases de formaci¨®n a punto de encenderse. Las otras 600 condensaciones est¨¢n m¨¢s atrasadas en el proceso pero acabar¨¢n siendo estrellas, pero ya de otra generaci¨®n. Uno de los objetivos de la misi¨®n Herschel es precisamente la demograf¨ªa estelar, es decir, el estudio de la cantidad de astros que se forman en las nubes de gas y polvo, y del rango de sus masas.
La primera cosecha del telescopio abarca muchas m¨¢s cuestiones astron¨®micas. Con ¨¦l se estudian tambi¨¦n las galaxias lejanas cuya luz emitida en longitudes de onda m¨¢s peque?as se ve ahora en infrarrojo debido a la expansi¨®n del universo. La luz, las ondas electromagn¨¦ticas emitidas, se estiran a medida que recorren el cosmos en expansi¨®n y, si fueron visibles en origen, o ultravioletas, se ven aqu¨ª y ahora en una longitud de onda mayor, como el infrarrojo. Este es uno de los motivos de inter¨¦s de varios telescopios de infrarrojo actuales o en preparaci¨®n, como el James Webb, que ser¨¢ el sustituto del Hubble, ya que, entre otras cosas, pueden ver bien los cuerpos del universo lejano.
El Herschel, lanzado al espacio por la ESA en mayo de 2009, junto al telescopio Planck (que acaba de presentar su primera imagen de la radiaci¨®n de fondo de microondas), est¨¢ dado resultados, pese a los problemas que surgieron con uno de sus instrumentos.
"Aunque impresionante por s¨ª mismo, este primer conjunto de publicaciones es solo la t¨ªpica punta del iceberg, y ahora estamos esperando impacientes la multitud de resultados que se ir¨¢n obteniendo", comenta Pilbratt. "Gracias al Herschel estamos literalmente viendo lo que nadie ha visto hasta ahora".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.