Operar con un navegador
Un programa de ordenador reduce los errores en la implantaci¨®n de pr¨®tesis de cadera y rodilla - El sistema gu¨ªa al cirujano como un GPS
Parece muy sencillo cuando uno, aunque no sea m¨¦dico, escucha al doctor I?aki M¨ªnguez c¨®mo utilizar un programa de ordenador para operar caderas y rodillas. Una especie de GPS gu¨ªa al especialista a la hora de implantar una pr¨®tesis y que reduce de forma significativa el margen de error en este tipo de operaciones. El facultativo explica en su consulta, antes de meterse en el quir¨®fano, que la tecnolog¨ªa, ya extendida en otros puntos de Espa?a como Madrid, Barcelona o Valencia, en el Pa¨ªs Vasco solo la emplea de forma regular su equipo.
Esta herramienta se empleaba hasta hace bien poco solo en neurolog¨ªa. La implantaci¨®n de una pr¨®tesis de cadera de forma m¨¦canica, a la antigua usanza, presenta un 40% de posibilidades de salir mal, seg¨²n M¨ªnguez, quien encabeza Traumatolog¨ªa XXI, un equipo de ocho especialistas. En las intervenciones de rodilla ese porcentaje baja al 15%. Tras estos n¨²meros se esconde un error del ojo humano dif¨ªcil de resolver. "Con los a?os, una mala colocaci¨®n por peque?a que sea provoca que las pr¨®tesis se muevan y haya que colocarlas o implantarlas de nuevo", recalca M¨ªnguez.
"Una mala colocaci¨®n obliga a operar de nuevo", resalta el doctor M¨ªnguez
Este modelo de cirug¨ªa se podr¨¢ utilizar para otras dolencias de traumatolog¨ªa
As¨ª, el programa precisa "si hay un error de un grado o de un mil¨ªmetro", a?ade el facultativo, cuyo equipo atiende por t¨¦rmino medio cada mes 1.542 consultas y realiza 55 operaciones. Una vez vestido de verde, con gorro y mascarilla, un ordenador gu¨ªa los pasos del m¨¦dico en el quir¨®fano.
"Es como un navegador, y conectado en l¨ªnea nos dice qu¨¦ problema tiene el paciente que estamos tratando, lo que hay que corregir y, antes de hacer cualquier gesto quir¨²rgico, nos adelanta los pasos", relata el traumat¨®logo. "Al final, nos confirma todo lo que hemos hecho", apostilla. Sin esa herramienta, el cirujano se guiar¨ªa exclusivamente con una serie de plantillas.
M¨ªnguez y su equipo viajaron hasta Lyon, donde tiene su sede la empresa que ha dise?ado el programa, para aprender a utilizarlo. "La compa?¨ªa fabrica tecnolog¨ªa para la NASA y tambi¨¦n tiene una divisi¨®n m¨¦dica y con frecuencia comprueban los resultados de las operaciones", aclara.
Implantar estas pr¨®tesis resulta preciso por un desgaste del cart¨ªlago, "generalmente a una determinada edad. No a todas las personas se les opera", advierte el m¨¦dico. La edad, el tipo de lesi¨®n y el de vida influyen de forma significativa a la hora de seguir un tratamiento u otro: "Cultivos de cart¨ªlago, rellenos con ¨¢cido hialur¨®nico, intervenciones con l¨¢ser" y otros, enumera M¨ªnguez. El objetivo consiste siempre en eliminar el dolor del paciente y que pueda recuperar una movilidad y dependencia acorde a sus a?os. La t¨¦cnica, de momento, solo se emplea en operaciones de cadera y rodilla, pero en un futuro se utilizar¨¢ en otras dolencias, como las lesiones de los ligamentos.
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