A clase con el velo
El consejo escolar del instituto Tierno Galv¨¢n de Madrid admite que una alumna permanezca en el centro con su 'hiyab'
A la chica le brillan los ojos. Su hiyab (pa?uelo isl¨¢mico) ya no es un problema en el instituto. Lleva un velo de color blanco y pasea por la mezquita de la M-30 de la mano de su padre. "Nos ten¨ªan que dar la raz¨®n, mi hija no es una delincuente". Mohamed A., celador de 44 a?os, nacido en Ceuta, repite una y otra vez lo agradecido que est¨¢ con la direcci¨®n del instituto de su hija, el IES Tierno Galv¨¢n (del distrito madrile?o de Usera). El centro ha permitido que la joven siga sus clases con esta prenda, despu¨¦s de ser expulsada de un examen en septiembre por acudir con el hiyab puesto.
Ya no quedan miedos. "Al principio me dijeron que iban a cambiarme de centro", cuenta la estudiante que tiene 14 a?os y planea convertirse alg¨²n d¨ªa en maestra. Desde el episodio del examen, ha seguido yendo a clase cada d¨ªa con su velo. Pero su decisi¨®n estaba pendiente de la aprobaci¨®n del consejo escolar del instituto, que se reuni¨® el jueves pasado y se puso de su parte. La familia conoci¨® ayer lunes el resultado de la votaci¨®n, seg¨²n explica Iv¨¢n Jim¨¦nez Aybar, abogado de la familia y profesor de Derecho Eclesi¨¢stico de la Universidad Aut¨®noma de Barcelona.
"Con arreglo a derecho"
"El instituto no ha cedido ante un capricho de una musulmana, sino que ha actuado con arreglo a derecho. Nadie puede ver este caso como una cesi¨®n. Y, desde luego, ninguna comunidad musulmana debe presentarlo como una victoria del islam", valora el letrado. Los responsables del centro prefieren no hacer declaraciones.
El reglamento del centro incluye un art¨ªculo que impide "la utilizaci¨®n en el interior de los espacios de gorras pa?uelos u otras indumentarias que dificulten la identificaci¨®n de los alumnos", seg¨²n recoge el informe que el abogado realiz¨® para fundamentar este caso. Jim¨¦nez Aybar argumenta que los profesores se tienen que remitir a lo que el Ministerio de Interior ha establecido para la identificaci¨®n: se puede lleva el hiyab siempre que dejen al descubierto los rasgos identificativos (desde nacimiento de pelo hasta el ment¨®n).
La menor lleva el hiyab desde el pasado agosto. Lo hizo mucho antes que sus primas, que ayer estaban con ella en la mezquita celebrando la decisi¨®n del centro. Ambas son ya adultas y optaron por el pa?uelo isl¨¢mico con m¨¢s de 20 a?os. La madre de la menor, Fatima, no lo lleva. Es ama de casa. "Cuando le cont¨¦ mi decisi¨®n, no me cre¨ªa. Pens¨® que me lo quitar¨ªa en unos d¨ªas", recuerda la estudiante. Pero no lo ha hecho. "Soy adolescente, lo que me digan que no lleve lo voy a llevar". El padre se r¨ªe del desparpajo de la chica. Su hiyab blanco perfectamente colocado sobre la coleta es solo uno de los m¨²ltiples que tiene la chica, que se recuerda "muy coqueta sobre todo con el pelo" antes de llevarlo. "Me siento muy c¨®moda con ¨¦l, me gusta pon¨¦rmelo", asegura.
El ejemplo de esta menor, cuya resoluci¨®n se ha retrasado por las protestas y huelgas de profesores del ¨²ltimo mes seg¨²n su abogado, dista mucho de otros casos que siguen abiertos. Un instituto de Pozuelo de Alarc¨®n dej¨® fuera de clase a la menor Najwa, cuya experiencia que se convirti¨® en noticia hace dos a?os. El abogado del caso es tambi¨¦n Jim¨¦nez Aybar. El asunto lleg¨® a los tribunales porque el centro decidi¨® aferrarse a la norma interna y no permitir el velo.
La chica cambi¨® de centro. Ahora esperan sentencia. "Si un consejo escolar, en el que no tiene por qu¨¦ haber juristas, entiende lo alegado en un informe jur¨ªdico, creo que tambi¨¦n un juez debe verlo claro", sostiene el abogado. "En este caso, nos hemos encontrado con un cuerpo directivo abierto al di¨¢logo, abierto a recibir ideas nuevas. Han aceptado estudiar con seriedad y profundidad el informe jur¨ªdico que yo les entregu¨¦", concluye.
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