Sobran carreras, pero no universidades ni titulados
Los estudios superiores aumentan las posibilidades de encontrar trabajo, seg¨²n un estudio
En Espa?a hay 79 universidades, 50 p¨²blicas y 29 privadas, en las que estudian en torno a un mill¨®n y medio de alumnos al a?o. No sobran ni las unas ni los otros, seg¨²n un estudio de la Fundaci¨®n BBVA en colaboraci¨®n con el Instituto Valenciano de Investigaciones Econ¨®micas (IVIE). El texto s¨ª apunta, sin embargo, que las universidades son ineficientes sobre todo por un exceso de oferta de titulaciones -2.669 licenciaturas y diplomaturas en el curso 2008-2009- que no se ajusta a la demanda. El paro universitario, mayor que la media europea, se debe al funcionamiento y el tama?o peque?o de las empresas espa?olas, que limita el aprovechamiento del capital humano cualificado de nuestro pa¨ªs.
¡°Hay un desajuste entre la oferta y la demanda de estudios¡±, ha apuntado hoy Francisco P¨¦rez Garc¨ªa, codirector del informe, durante la presentaci¨®n del mismo. Un 29% de las titulaciones ofrecidas en 2009-2010 contaban con menos de 40 alumnos por curso, mientras que la media estaba en 94. Esa escasa cantidad de alumnado en las aulas se da sobre todo en las titulaciones de humanidades, ense?anzas t¨¦cnicas y ciencias experimentales, y mantener la estructura necesaria para que sigan en el cat¨¢logo para tan pocos alumnos es m¨¢s costoso en t¨¦rminos relativos respecto a otras ramas, seg¨²n los autores.
Estos datos est¨¢n en l¨ªnea con la propuesta del ministro de Educaci¨®n, Jos¨¦ Ignacio Wert, de establecer un m¨ªnimo de alumnos por aula para una mayor eficiencia de las universidades. En la pr¨¢ctica esto podr¨ªa significar la desaparici¨®n de las carreras con menor demanda. Lorenzo Serrano, codirector del estudio, cree que habr¨ªa otras soluciones antes que la supresi¨®n. ¡°Lo que no tiene sentido es que todas las universidades tengan todas las titulaciones, pero pueden asociarse entre ellas y concentrar la oferta¡±. Pero el investigador reconoce que la rigidez de las universidades no permite acometer con agilidad esta clase de medidas que mejorar¨ªan su eficiencia.
Pero hay otros motivos, seg¨²n los autores, que hacen que la universidad sea ineficiente. Tras dos a?os de investigaci¨®n, los datos revelan un ¡°bajo rendimiento del alumnado¡±: solo el 80% de los ingresados acaba la carrera. Adem¨¢s han observado que los estudiantes se presentan a cuatro de cada cinco asignaturas de las que se han matriculado y de ellas, aprueban solo tres. Los profesores no est¨¢n exentos de una parte de responsabilidad en esa productividad deficiente a la que se refiere el texto: solo un 20% del personal docente acredita resultados de investigaci¨®n con regularidad, como confirman los datos de la Comisi¨®n Nacional de Evaluaci¨®n de la Actividad Investigadora, sin embargo todos disponen de tiempo retribuido para desarrollarla. Esto ocurre en la mayor¨ªa de pa¨ªses desarrollados, pero el estudio recomienda que se reconozcan los diferentes perfiles para asignarles los recursos adecuados en funci¨®n de su labor.
El informe desmonta, por otra parte, algunos mitos sobre la universidad espa?ola. ¡°No sobran titulados ni universidades¡±, ha recalcado P¨¦rez Garc¨ªa. Un 46,1% de los j¨®venes de 18 a?os accede a estudios superiores, una cifra por debajo de la mayor¨ªa de pa¨ªses desarrollados, seg¨²n el investigador. Tampoco es verdad que no se incentive la formaci¨®n profesional (FP). ¡°Hay una deformaci¨®n de la imagen en este sentido¡±, ha dicho. ¡°La cantidad de alumnos que optan por una FP es similar a la de Alemania¡±.
Mileuristas, solo al principio
Francisco P¨¦rez Garc¨ªa ha insistido en que tener un t¨ªtulo universitario es positivo de cara al mercado laboral. Pese a que el paro universitario es de los m¨¢s altos de Europa (11,8%), los datos recabados apuntan que tener estudios superiores aumenta las posibilidades de encontrar trabajo, mantenerlo, tener mejores condiciones y alcanzar puestos directivos.
Si bien, la realidad revela que los sueldos de los reci¨¦n titulados son bajos, las posibilidades de que aumente a lo largo de su vida profesional son mucho mayores que para el resto de trabajadores, hasta un 10% m¨¢s por cada a?o de estudios realizado. Sin embargo, el tama?o peque?o de la mayor¨ªa de las empresas espa?olas ¨Ccasi un 60% tiene menos de 20 trabajadores-, as¨ª como la insuficiente formaci¨®n de los empresarios, limitan las posibilidades de los universitarios de encontrar un empleo ajustado a su nivel de estudios. Mientras que en la mayor¨ªa de pa¨ªses de la Uni¨®n Europea m¨¢s de un 40% de los puestos ofertados requieren una alta cualificaci¨®n -Alemania (42,8%), Reino Unido (43,5%), Francia (46,3%)- en Espa?a este porcentaje es mucho menor (34,9%).
Pero esto no quiere decir, seg¨²n P¨¦rez Garc¨ªa, que sobren titulados, sino que el tejido empresarial espa?ol es diferente y no facilita la inserci¨®n laboral de los titulados. Por eso el informe recomienda incentivos al empleo estable de j¨®venes universitarios, clave para el crecimiento econ¨®mico, e inculcar el car¨¢cter emprendedor en ¨¦stos para que creen sus propias empresas. Al principio esto generar¨ªa una mayor cantidad de microempresas. ¡°Pero ser¨ªan especiales, generadas por personas cualificadas en las que se aprovechar¨ªa su propio conocimiento¡±, matiza Lorenzo Serrano. Al final, esas empresas tendr¨ªan m¨¢s posibilidades de crecer y generar¨ªan m¨¢s empleo cualificado, seg¨²n Serrano, que pone de ejemplo a las grandes corporaciones americanas que nacieron en un garaje en un campus. En Espa?a eso no pasa, dice, porque no hay suficiente esp¨ªritu emprendedor por parte de los universitarios, ni pulsi¨®n de crecimiento entre las peque?as empresas, normalmente familiares, mayoritarias en nuestro tejido productivo.
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