La Dukan se indigesta
La pol¨¦mica dieta suma adeptos y motivos para la controversia La Orden de M¨¦dicos de Francia ha denunciado a su ide¨®logo y ¨¦l se defiende: ¡°Todo es falso¡±
Cuenta sonriente que sus seguidores, los dukanianos, le llaman Dudu. ¡°Me ven un poco como a un padre¡±, asegura encogi¨¦ndose de hombros. Lo dice con el mismo orgullo con el que enumera que sus libros, en los que habla de su m¨¦todo para adelgazar, se han traducido a 26 lenguas y se venden por millones (21 ya) en 56 pa¨ªses. Pero el personaje es pol¨¦mico. Amado y odiado probablemente a partes iguales, Pierre Dukan (Argel, 1942) es un hombre sosegado. Padre de la controvertida dieta hiperproteica basada en 100 alimentos ¡ªeso s¨ª, a comer a voluntad¡ª afirma que las cr¨ªticas que le acusan de idear un sistema da?ino para la salud son falsas. Sus detractores, dice, se mueven por una cuesti¨®n de ¡°competencia econ¨®mica¡±. ¡°El problema es que mi libro cuesta 10 euros y funciona. Estoy vaciando las consultas de muchos nutricionistas¡¡±. El r¨ªo de cr¨ªticas, sin embargo, est¨¢ cada vez m¨¢s lleno. ?Es Dukan un fraude? ?Encarna acaso al l¨ªder de una secta, la de los dukanianos, que abrazan con pasi¨®n la ingesta de prote¨ªnas animales a semejanza de nuestros antepasados menos evolucionados?
A diferencia de la pir¨¢mide nutricional tradicional, el sistema que propone el m¨¦dico franc¨¦s se basa fundamentalmente en la ingesta de alimentos proteicos, como la carne y el pescado. Estos son la clave, sobre todo, durante los primeros d¨ªas de la dieta, a los que llama fase de ataque, tiempo en que las verduras ¡ªque se podr¨¢n ir incorporando, algunas, m¨¢s adelante¡ª est¨¢n restringidas y los hidratos de carbono terminantemente prohibidos. Del az¨²car refinado mejor ni hablamos. ¡°Es un aut¨¦ntico veneno¡±, zanja Dukan, que ha viajado a Espa?a para presentar Los 100 alimentos Dukan (RBA), libro de ¡°recetas para no aburrirse¡± de un m¨¦todo que, dice, ¡°es un modo de vida¡± del que forman parte otras dos premisas b¨¢sicas: olvidarse del ascensor y caminar 20 minutos al d¨ªa. ¡°Es un sistema que hay que seguir para siempre¡±, afirma.
Sin embargo, ese planteamiento restrictivo y basado en las prote¨ªnas ¡ªcon las que se pretende movilizar las reservas de energ¨ªa¡ª ha sido duramente criticado por los expertos. La Agencia Nacional de Seguridad Sanitaria de la Alimentaci¨®n francesa (Anses) tacha el r¨¦gimen de ¡°desequilibrado¡±, y la Agencia Espa?ola de Seguridad Alimentaria lo puso hace tiempo en su lista negra junto a otras dietas milagro, como la de la pi?a (basada en comer solo esa fruta y algo de pavo). Giussepe Russolillo, presidente de la Asociaci¨®n Espa?ola de Dietistas y Nutricionistas, que elabor¨® para el Ministerio de Sanidad un informe sobre este m¨¦todo de adelgazamiento, cree directamente que es ¡°un fraude¡±. ¡°Es una dieta muy peligrosa, llevada a largo plazo supone un alto riesgo para la salud. Aunque a corto plazo puede provocar m¨¢s p¨¦rdida de peso que la dieta equilibrada, a largo plazo no hay diferencia. Y no solo eso, tras revisar muchos estudios cient¨ªficos queda claro que las dietas hiperproteicas, como esta, aumentan el riesgo de enfermedad cardiovascular. Podr¨ªa incluso causar da?os renales a la larga¡±, argumenta Russolillo.
Los expertos alertan de que causa da?os renales y cardiovasculares
El franc¨¦s se defiende: ¡°Todo esto es falso. Hace 40 a?os que recomiendo este sistema y nunca he recibido una cr¨ªtica directa de alguien que haya tenido un problema de salud¡±. Dukan, que se escuda en que muchos de sus cr¨ªticos ¡ªcomo los nutricionistas¡ª no son m¨¦dicos de formaci¨®n, asegura que su dieta ¡°mejora la funci¨®n renal y el h¨ªgado¡±. Niega rotundamente que su sistema sea peligroso y esgrime que es el mismo que segu¨ªan ¡ªpor obligaci¨®n¡ª los hombres hace varios siglos: carne, pescado, algunas verduras y escas¨ªsimas frutas. ¡°El mundo ha cambiado mucho, pero nuestro organismo sigue siendo el mismo. Por qu¨¦ va a ser malo comer igual que nuestros ancestros¡±, abunda.
Los argumentos de Dukan no convencen a muchos de sus colegas. Mar Garrido, m¨¦dico endocrino y miembro de la Sociedad Espa?ola para el Estudio de la Obesidad (Seedo), considera que ¡°las dietas que limitan el consumo de hidratos de carbono y que restringen la ingesta de otros muchos alimentos no son sanas. Son muy peligrosas, porque pueden provocar carencias graves en el organismo¡±, afirma.
El modelo Dukan propone que las prote¨ªnas, en las fases iniciales, sean el 75% de las calor¨ªas ingeridas. ¡°Normalmente son el 15% de las calor¨ªas que se toman al d¨ªa, se acepta que sean hasta el 35% para llevar una alimentaci¨®n saludable. El m¨¦todo Dukan lo supera con creces¡±, analiza Susana Monereo, jefa de la Unidad de Endocrinolog¨ªa y Nutrici¨®n del Hospital de Getafe. ¡°Es una dieta hiperproteica pura con una carencia bestial de otro tipo de nutrientes: vitaminas, minerales, fibra, hidratos de carbono¡±, explica. Monereo destaca que aunque el sistema de Pierre Dukan promulga que las prote¨ªnas provengan del pescado y otros alimentos, la pr¨¢ctica cl¨ªnica le ha demostrado que la mayor¨ªa de dukanianos se limita a la carne. ¡°Y eso tiene una cantidad de grasas saturadas enormes y provoca falta de calcio, algo que a la larga puede causar osteoporosis. Am¨¦n de los problemas renales¡±, a?ade.
El 80% recuper¨®
el peso en un a?o,
seg¨²n la Agencia Sanitaria francesa
Para Mar¨ªa Victoria Mart¨ªn, nutricionista de la Cl¨ªnica Menorca de Madrid, el m¨¦todo tiene riesgos important¨ªsimos para la salud y un problema a?adido; aunque gran parte del sistema se basa en el apoyo a los seguidores a trav¨¦s de una plataforma web, se trata de los consejos que propone un libro. ¡°Una dieta proteica tiene que realizarse con control m¨¦dico, pues la restricci¨®n de alimentos debe suplirse con complementos alimenticios, y las prote¨ªnas deben ser de alto valor biol¨®gico para evitar carencias nutricionales y otros riesgos¡±, alerta.
En resumen: problemas cardiovasculares, da?os renales, dificultades de tr¨¢nsito intestinal, carencia de vitaminas, p¨¦rdida de calcio y, por ende, osteoporosis, dolores musculares¡ ?Por qu¨¦ si las alertas est¨¢n tan claras el n¨²mero de dukanianos ¡ªo dukanettes¡ª no deja de aumentar? ¡°Mi m¨¦todo funciona, eso es lo ¨²nico cierto¡±, zanja su creador. ¡°Con ¨¦l se puede perder peso y llevar una vida sana. Ha servido a much¨ªsima gente que no lograba adelgazar de otra forma. Y el sobrepeso y la obesidad provocan enfermedades sobrevenidas como la diabetes o incluso c¨¢ncer¡±, defiende. Y explica que as¨ª la ide¨®, hace 40 a?os, a petici¨®n de un paciente que lo hab¨ªa probado todo y que acudi¨® a su consulta con una condici¨®n: que no le privara de comer carne.
Como aquel primer dukaniano carn¨ªvoro, la mayor¨ªa de personas que ha seguido la dieta del m¨¦dico franc¨¦s ha perdido peso (bastante, de hecho) en las fases iniciales. El efecto saciante de las prote¨ªnas, adem¨¢s, les reduce el apetito ¡ªaunque algunos sue?an, literalmente con unas simples acelgas rehogadas o una manzana¡ª, pero a la larga es pr¨¢cticamente inasumible. Tanto f¨ªsica como mentalmente. ¡°En la consulta vemos que cuando la motivaci¨®n de la dieta decae, la restricci¨®n de carbohidratos provoca a los pacientes trastornos de ansiedad enormes por comer alimentos ricos en hidratos, que acaban con atracones. As¨ª, el precio que se paga es muy alto, se recupera el peso perdido y esa ansiedad ya no se quita¡±, alerta Monereo.
No hay ning¨²n estudio cl¨ªnico, adem¨¢s, que avale la dieta Dukan ni que sus efectos sean, como ¨¦l defiende, inocuos o incluso beneficiosos. Estudios que muestran los efectos del m¨¦todo s¨ª los hay. Dos encuestas de las revistas Sant¨¦-m¨¦decine y Journal de Femme a 5.000 personas que hicieron la dieta muestran que el 80% recupera su peso inicial en cuatro a?os, el 35% lo hace en los primeros meses y el 64% tarda solo dos. Las cifras de la Agencia Nacional de Seguridad Sanitaria de la Alimentaci¨®n de Francia (Anses) son a¨²n m¨¢s demoledoras: el 80% de personas que ha seguido la dieta ha recuperado su peso durante los primeros 12 meses del r¨¦gimen.
Estos datos, sin embargo, no convencen a Pierre Dukan, que realiz¨® su propio estudio sobre el llamado efecto rebote a trav¨¦s de su plataforma web con las respuestas de sus seguidores. Sus cifras, por supuesto, son bastante m¨¢s laxas que las de la Anses.
A pesar de todo, el franc¨¦s admite una horquilla de fracaso. ¡°?Mi m¨¦todo no es un milagro!¡±, dice. ¡°Como todas las dietas hay un porcentaje de personas que cogen algunos kilos, pero se puede evitar siguiendo las pautas¡±, sigue. Explica que en el coaching que hace a sus seguidores a trav¨¦s de su web hay modelos para dar respuesta a todas las opciones. ¡°?Que ha cogido un par de kilos? No pasa nada, se le dan recetas nuevas y consejos para perderlos. Y se le da apoyo, se le escriben correos electr¨®nicos. Si los kilos recuperados son muchos y no se ve mejor¨ªa se le llama por tel¨¦fono. Hay una respuesta para cada situaci¨®n¡±. Dukan afirma que la lucha contra el sobrepeso es una ¡°guerra¡± que no puede decaer. ¡°Siempre est¨¢ a la vuelta de la esquina preparado para volver. Si te divorcias, si tu hijo suspende todas¡ Un momento de debilidad y¡¡±, alerta sacudiendo la cabeza.
?Compensa vivir as¨ª, restringiendo alimentos, pensando en que se est¨¢ en una batalla constante contra la b¨¢scula? Ciertamente esta es una sociedad sobrealimentada, que muestra est¨ªmulos constantes para incitar al consumo de nutrientes bastante poco saludables. ¡°Pero lo que hay que hacer es educar a las personas para que lleven una vida sana¡±, sostiene Mar Garrido. Y para ella, eso poco tiene que ver con el sistema Dukan. ¡°En los problemas de sobrepeso hay que ver qu¨¦ ha ocurrido hasta llegar a ese punto, analizarlo y tratar de paliar esas situaciones¡±, afirma.
Lo que es indudable es que Dukan ha conseguido levantar un poderoso imperio sobre una de las torturas del siglo XX y XXI, el sobrepeso y el deseo de perderlo. Porque aparte de sus libros, el mundo Dukan se congrega en torno a su web, en la que adem¨¢s de proporcionar apoyo y consejo a sus seguidores ¡ªen 2008 fueron 200.000 usuarios¡ª por unos cuatro euros mensuales, vende los productos con su sello y visto bueno. Desde vitaminas hasta el alimento base de su dieta, el salvado de avena; un alimento que el l¨ªder de los dukanianos define como ¡°maravilloso¡±. ¡°Proporciona sensaci¨®n de saciedad, pero adem¨¢s moviliza el intestino y ayuda a eliminar calor¨ªas a trav¨¦s de la materia fecal¡±, explica. Conclusi¨®n: todos a consumir salvado de avena. Tanto que ya empieza a faltar en las tiendas. Algo que tambi¨¦n podr¨ªa empezar a ocurrir con su nuevo alimento de cabecera, los fideos de Kojca.
¡°Me critican porque
vac¨ªo las consultas
de nutricionistas¡±,
dice el m¨¦dico
El concepto del emporio Dukan y ese enriquecimiento a costa de la salud de los dem¨¢s es, precisamente, lo que ha llevado recientemente a la Orden de M¨¦dicos de Francia a denunciarle por vulnerar el art¨ªculo 19 del c¨®digo deontol¨®gico, que establece que los facultativos no pueden ¡°ver la medicina como un negocio¡±. A sus compa?eros no les gustan sus pr¨¢cticas y consideran, adem¨¢s, peligrosa y desafortunada su propuesta de instaurar un bonus para premiar a los adolescentes que no engorden durante los dos a?os finales de instituto.
Dukan, que si es sancionado podr¨ªa enfrentarse incluso a la inhabilitaci¨®n, sonr¨ªe y se encoge de hombros. ¡°Primero, ya estoy retirado¡ ?Pero si tengo 70 a?os¡! Y segundo, no es el dinero lo que me importa. S¨ª, gano dinero, aunque la inversi¨®n en, por ejemplo, mi web es tremenda, pero todos lo hacemos¡±, asegura. Dice que comenz¨® a vender productos porque recib¨ªa peticiones de personas que no los encontraban en su lugar de residencia.
Susana Moreneo cree que ¡°Dukan utiliza como base la perversi¨®n de la propia sociedad por la inmediatez¡±. ¡°Todo lo queremos ya y sin ning¨²n esfuerzo¡±, subraya. ¡°Y eso es imposible¡±. ¡°Explota adem¨¢s los modelos de eterna juventud y delgadez. Sorprende la cantidad de gente formada que hace esta dieta: pol¨ªticos, artistas, intelectuales¡±, abunda. Efectivamente, muchos rostros conocidos son o han sido dukanianos. Por ejemplo, Fran?ois Hollande, el nuevo presidente franc¨¦s. ¡°Ha recuperado algo de peso, pero es normal con el estr¨¦s de la campa?a¡±, asegura Dukan. ¡°Antes le llamaban Flan mou¡±, bromea su asistenta. ?Por qu¨¦ esta dieta ha calado m¨¢s en gente que tiene acceso a la informaci¨®n? Es una dieta f¨¢cil, se puede hacer sin problemas en un restaurante. ¡°A algunos les parece que se queda mejor pidiendo un buen chulet¨®n que un caldo y unas veduritas a la plancha. (...) Toca teclas que no tienen que ver con la alimentaci¨®n sino con el rango social. (...) Es grave, porque nadie se plantea que pueda tener consecuencias¡±, plantea la jefa de Endocrinolog¨ªa y Nutrici¨®n del Hospital de Getafe.
Una endrocrina cree que aprovecha la perversi¨®n social ¡°por la inmediatez¡±
¡°Cuando empiecen a pasar los a?os y comiencen a llegar personas a nuestras consultas con problemas cardiovasculares, de osteoporosis, de gota¡ Probablemente, no se acuerden de que hicieron unos meses, un a?o la dieta Dukan; pero las semillas, la herencia que les ha dejado est¨¢ ah¨ª¡±, observa Monereo. Al m¨¦dico franc¨¦s no le importa que se asocie su m¨¦todo y lo que ha creado en torno a ¨¦l con una secta. ¡°Cuando muchas personas tienen algo en com¨²n tienden a unirse. Hablan en foros de Internet, se re¨²nen en la misma ciudad¡±, dice. ¡°?L¨ªder de una secta? No, por Dios. Yo me dedico a ayudar a la gente. A veces me veo como¡ ?Como un Robin Hood!¡±, asegura.
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