Cenicientas con medalla
Tras el ¨¦xito ol¨ªmpico, el deporte femenino se enfrenta de nuevo a la dura realidad

Cenicienta vuelve a casa. Adi¨®s al zapato de flashes y titulares, al brillo de las medallas ol¨ªmpicas. Vuelta a los harapos, a la madrastra del d¨ªa a d¨ªa: el deporte femenino espa?ol, cuajado de triunfadoras, sigue hu¨¦rfano de apoyo. El ¨¦xito y el prestigio ser¨¢n flor de un d¨ªa si no se apuesta por ellas y por esos clubes que caen como fichas en el domin¨® de una crisis que arrasa con subvenciones y mecenazgos. Y eso que en los Juegos de Londres, donde por primera vez todas las delegaciones participantes ¡ªexcepto Barbados y Nauru¡ª contaban con deportistas hombres y mujeres, las atletas espa?olas han copado las portadas: suyas han sido 11 de las 17 medallas logradas por la delegaci¨®n, el 65% de los metales. Hay quien opina que no se debe diferenciar entre logros femeninos y masculinos porque todos deber¨ªan valer lo mismo. Pero no es as¨ª.

Pese a que el deporte femenino ha avanzado enormemente ¡ªno hay m¨¢s que ver el aumento de la participaci¨®n de mujeres en los Juegos Ol¨ªmpicos en los ¨²ltimos 20 a?os¡ª las deportistas espa?olas siguen teniendo m¨¢s dificultades que los hombres. El ¨¦xito del deporte femenino tanto en los Juegos Ol¨ªmpicos como a nivel de clubes no se corresponde con la precaria situaci¨®n que atraviesa el deporte profesional que practican las mujeres en Espa?a, donde cada vez es m¨¢s dif¨ªcil que puedan vivir de esta actividad.
Hemos retrocedido 20 a?os. En dos se vino todo abajo", dicen en los clubes
Barcelona 92, donde participaron 114 espa?olas ¡ªhasta entonces el m¨¢ximo hab¨ªan sido las 30 de Se¨²l 88¡ª, y donde Espa?a estren¨® el medallero femenino, supuso un gran salto en el deporte de ¨¦lite de las atletas. Pero ahora la crisis devora los avances conquistados.
El grifo de las ayudas p¨²blicas se cierra y cada vez son menos las empresas patrocinadoras que apuestan por el deporte, lo que ha puesto en peligro la viabilidad de numerosos clubes, tanto masculinos como femeninos. Sin embargo, son los equipos femeninos los que m¨¢s acusan los recortes, ya que sus presupuestos dependen en mayor medida de las subvenciones p¨²blicas. Los clubes femeninos de la ¨¦lite escapan menos de las garras de la crisis, lo que est¨¢ causando que nuestras deportistas emigren a otros pa¨ªses con ligas m¨¢s potentes, donde s¨ª pueden vivir de su actividad.
Los presupuestos de equipos de mujeres dependen m¨¢s de la subvenci¨®n
El caso del balonmano ilustra con claridad la precariedad que padece el deporte profesional femenino en Espa?a. Ni el bronce en el Mundial de 2011, ni el de Londres 2012 conseguidos por las guerreras ¡ªas¨ª se conoce al equipo nacional de balonmano que estos Juegos logr¨® el primer podio ol¨ªmpico patrio en la historia de este deporte femenino¡ª han logrado evitar que 24 jugadoras espa?olas de balonmano (de las que nueve est¨¢n en la selecci¨®n) hayan fichado por clubes europeos en los dos ¨²ltimos a?os. ?La raz¨®n?: en Espa?a es casi imposible vivir de este deporte.
¡°Hemos retrocedido 20 a?os¡±, lamenta Carmen Manchado. La directora del Comit¨¦ de Clubes Femeninos de la Federaci¨®n Europea de Balonmano (EHF), exjugadora y profesora de INEF, resume as¨ª lo que la crisis ha provocado en el balonmano profesional femenino en Espa?a. ¡°Nos ha costado much¨ªsimo llegar adonde estamos y en dos a?os se ha venido todo abajo¡±, asegura. Las dificultades econ¨®micas de los clubes, que en algunos casos han tenido que desplazarse en furgoneta para jugar partidos porque ni siquiera pudieron afrontar los costes del viaje, apenas han afectado al rendimiento de sus plantillas.
Manchado calcula que ¡°solo un par de equipos¡± de los 14 que compiten en Divisi¨®n de Honor ¡°se han librado de las deudas esta temporada¡±. Los clubes de balonmano femenino no tienen que depositar un aval a principio de temporada con el que se podr¨ªan pagar los sueldos que se adeudan a muchas jugadoras. Esta responsable cree que, de existir esa garant¨ªa, ¡°el 80% de los equipos lo habr¨ªan ejecutado¡±. De esa forma, las jugadoras habr¨ªan cobrado todos sus salarios a final de temporada.
Con todo, son muy pocas las mujeres que pueden vivir del balonmano de m¨¢ximo nivel en Espa?a. Algo que s¨ª consiguen, en gran medida, los hombres. ¡°Casi todas estudian o trabajan, dependiendo del club en el que est¨¦n¡±, dice Manchado. ¡°Por eso, emigran a ligas m¨¢s poderosas, como la francesa¡±.
Esta fuga de jugadoras ha provocado que los 14 equipos inscritos en Divisi¨®n de Honor ¡°est¨¦n teniendo problemas para cerrar sus plantillas", afirma Manchado. Un ejemplo es el Itxako Navarra, ocho de cuyas jugadoras acaban de lograr el bronce ol¨ªmpico. Este campe¨®n de Liga y Copa 2011/12 ¡ªy finalista de la liga europea¡ª acaba de quedarse solo con dos de las 16 jugadoras que ten¨ªa la temporada pasada. El alto presupuesto que hab¨ªa venido manejando se rebaj¨® con los recortes de las ayudas p¨²blicas y de la aportaci¨®n de los patrocinadores. Los impagos a las jugadoras comenzaron a finales de 2011. Pese a estar inscrito en la liga 2012/13, el club navarro lo tiene muy complicado para competir en Divisi¨®n de Honor.
El ¨²nico efecto positivo de la crisis en este caso es que las jugadoras de la cantera ¡°disfrutar¨¢n de m¨¢s minutos de juego¡±, dice Manchado. ¡°Pero a la larga no servir¨¢ de nada si no tienen buenas profesionales de las que aprender. Esto causar¨¢ una disminuci¨®n del nivel de la liga y la consiguiente p¨¦rdida de profesionalidad del balonmano al no poder pagar un sueldo a las jugadoras¡±, a?ade. Otra eventual consecuencia: la p¨¦rdida de calidad de la selecci¨®n espa?ola. A ello se sumar¨¢ ¡°la ausencia de modelos cercanos, esencial para fomentar la pr¨¢ctica deportiva¡±.
El balonmano es solo la primera ficha de domin¨® que la crisis ha derribado en el deporte femenino. Porque los recortes tambi¨¦n han llegado al mundo del baloncesto, el deporte con m¨¢s mujeres federadas (136.248 licencias en 2011 frente a las 28.795 de balonmano, seg¨²n datos del Consejo Superior de Deportes) y el segundo m¨¢s practicado en Espa?a por los hombres, tras el f¨²tbol.
Las profesionales de la canasta, actividad a la que la crisis ha tardado m¨¢s en llegar, son unas privilegiadas comparadas con el resto. Son las ¨²nicas deportistas profesionales de Espa?a que gozan de un convenio colectivo ¡ªdesde 2008¡ª que regulariza su situaci¨®n laboral. Adem¨¢s, los clubes est¨¢n obligados a depositar un aval con el que cubrir las deudas en caso de impago. La diferencia entre ellas y las dem¨¢s competidoras de alto nivel es que podr¨¢n cobrar el paro si tienen el m¨ªnimo de tiempo cotizado.
Los problemas han reducido a 11 clubes la Liga de balonmano
Con todo, la crisis ha lanzando zarpazos al baloncesto femenino. La primera v¨ªctima fue el equipo Ros Casares. A finales del pasado marzo logr¨® el campeonato de Europa. En mayo, el de la liga espa?ola. En junio desapareci¨®.
Aquejada por la crisis, la empresa patrocinadora retir¨® las ayudas econ¨®micas y las instituciones p¨²blicas se declararon incapaces de afrontar el presupuesto en solitario. As¨ª que todas las jugadoras han fichado por otros equipos, la mayor¨ªa, extranjeros.
Las jugadoras de baloncesto son las ¨²nicas profesionales con convenio
Al Ros le han seguido otros clubes, como el hist¨®rico Celta de Vigo, el Palacio de Congresos de Ibiza, el S¨®ller de Mallorca y el Filtros Mann de Zaragoza que, ahogados por las deudas y la falta de financiaci¨®n, han tenido que renunciar a la ¨¦lite. Los m¨¢s afortunados han logrado permanecer en segunda divisi¨®n mientras otros solo mantienen equipos de base. As¨ª, la Liga Femenina, la divisi¨®n de honor, ha quedado reducida a 11 equipos para la pr¨®xima temporada (hasta ahora eran 14) debido a los problemas que la mayor¨ªa de los clubes han tenido para reunir los 70.000 euros de aval. Las renuncias del Celta y del Ibiza se debieron a impagos comprometidos por las instituciones p¨²blicas.
?Por qu¨¦ el deporte femenino tiene menos apoyo que el masculino? Al socaire de las 11 medallas femeninas logradas en Londres, muchas deportistas han reclamado a los medios de comunicaci¨®n que presten m¨¢s espacio al deporte femenino todo el a?o, y no solo cada cuatro. Porque creen que la poca atenci¨®n de la prensa contribuye a que el apoyo al deporte femenino sea escaso. Los medios replican que se limitan a publicar aquello que m¨¢s interesa a la gente y, ?cu¨¢l es el p¨²blico que m¨¢s informaci¨®n deportiva consume? Los hombres. Muchas deportistas alegan que, independientemente del sexo, el inter¨¦s por el deporte femenino aumentar¨ªa si la prensa les diera m¨¢s cancha. Los expertos en mujer y deporte suscriben ambas visiones: el inter¨¦s por el deporte es mayor en hombres, aunque los intereses se educan.
Los datos de audiencia de RTVE indican que el deporte femenino s¨ª interesa, al menos en los Juegos. El bronce de la nataci¨®n sincronizada por equipos lo sigu¨ªeron 3.013.000 millones de personas (25,4% de cota de pantalla), Maider Unda protagoniz¨® el combate de lucha libre m¨¢s visto de la historia con 1.218.000 telespectadores (11%). El equipo de waterpolo logr¨® la plata ante 1.890.000 seguidores (16,5%).
Este debate sobre los medios de comunicaci¨®n y el deporte femenino tambi¨¦n se ha abierto en otros pa¨ªses como Gran Breta?a a ra¨ªz de la cita ol¨ªmpica. Las atletas brit¨¢nicas ganaron 20 de las 65 medallas conseguidas por el pa¨ªs anfitri¨®n. El portavoz del ministerio de Sanidad brit¨¢nico, Andy Burnham, denunci¨® en la BBC la espor¨¢dica cobertura que todos los medios hacen del deporte femenino en general, una vez que finalizan los Juegos. Burnham a?adi¨®: ¡°La vieja excusa de que a nadie le interesa el deporte femenino debe erradicarse¡±.
Algunas deportistas, como la futbolista del Espanyol Mary Paz Vilas, son pesimistas. ¡°Caeremos de nuevo en el olvido¡±, pronosticaba tras los Juegos. Y eso, aunque ¡°millones de personas en todo el mundo han podido ver por televisi¨®n que las futbolistas pueden tener mucha calidad¡±. ¡°En una semana hablaremos de nuevo de lo de siempre¡±. Es decir, del deporte masculino.
Hasta tres millones de espa?oles siguieron el bronce en sincronizada
Estefan¨ªa Hern¨¢ndez, campeona de Europa de taekwondo, tambi¨¦n ha sido clara. Lamenta que en la prensa deportiva resulte f¨¢cil ver a una chica ligera de ropa, pero en cambio sea complicado que salgan sus resultados deportivos. ¡°Nadie nos conoce y, de pronto, tantas medallas...¡°En la prensa deportiva es complicado que salgan nuestros resultados. Nadie nos conoce y de pronto tantas medallas¡ Es el momento ideal para romper estereotipos y que las ni?as se acerquen todav¨ªa m¨¢s al deporte¡±.
En el alto nivel, las mujeres siguen estando menos representadas que los hombres: el 20,4% de las licencias de competici¨®n son femeninas frente al 79,6% de masculinas (seg¨²n datos del Consejo Superior de Deportes). De ah¨ª que su representaci¨®n en los Juegos sea menor.
Londres reclama a sus medios m¨¢s atenci¨®n a las deportistas
Benilde V¨¢zquez, una de las fundadoras de la Comisi¨®n Mujer y Deporte del Comit¨¦ Ol¨ªmpico Espa?ol y profesora en la Facultad de Ciencias de la Actividad F¨ªsica y del Deporte, sostiene que el deporte femenino todav¨ªa ¡°no goza de las mismas oportunidades que el masculino¡±, ya que se destinan menos recursos econ¨®micos y humanos al primero que al segundo. As¨ª lo explicaba en una mesa redonda hace un mes. Esta es, a su juicio, la causa principal de que el deporte de ¨¦lite femenino sufra mucho m¨¢s las consecuencias de la crisis econ¨®mica que el masculino. Para V¨¢zquez la ra¨ªz de esta desigualdad reside en que la sociedad ¡°no espera que la mujer asuma el rol de deportista¡±. De ah¨ª que no reciban un trato equitativo ¡°por parte de los patrocinadores, medios de comunicaci¨®n, gestores deportivos, t¨¦cnicos e, incluso sus familias¡±, ni el correspondiente reconocimiento social.
Desde los organismos oficiales se ha trabajado por esta igualdad, como el programa Ayuda al Deporte Ol¨ªmpico (ADO), creado en 1988 para brindar a los deportistas espa?oles de ¨¦lite los medios necesarios para lograr un buen resultado de cara a los Juegos de Barcelona 1992. Los atletas ¡°reciben ayudas que var¨ªan seg¨²n la modalidad deportiva y los logros conseguidos por cada deportista en los ¨²ltimos Juegos¡±, explican desde ADO; ¡°las cantidades se negocian cada cuatro a?os y son las mismas para hombres y mujeres en cada disciplina¡±. Cada federaci¨®n se encarga de repartir ese dinero entre sus deportistas, aunque ninguna especifica cu¨¢nto se destina a hombres y cu¨¢nto a mujeres. Seg¨²n Manchado, las dietas que recibieron las jugadoras de la selecci¨®n de balonmano durante la preparaci¨®n de los Juegos de Atenas 2004 ¡°fueron rid¨ªculas comparadas con las del equipo masculino¡±.
Otro problema derivado de la desigualdad es la escasez de mujeres en los puestos de decisi¨®n del ¨¢mbito deportivo. ¡°Cuanto mayor es el presupuesto que maneja una federaci¨®n, menor es la presencia de mujeres en la c¨²pula¡±, sostiene V¨¢zquez. A su juicio,
La deportista tiene los mismos problemas de desigualdad que el resto de las mujeres, ¡°pero m¨¢s intensificados¡±, entre otras cosas porque solo pueden competir en pie de igualdad con los varones en resistencia y habilidad. Lo que hay que perseguir, seg¨²n esta experta, es ¡°la igualdad de oportunidades, no de modelos¡±. ¡°Porque una chica no es un chico¡±, razona.
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