Los j¨®venes no pueden (ni quieren) emanciparse de casa de sus padres

La dif¨ªcil coyuntura econ¨®mica es un lastre para los j¨®venes que quieren emanciparse. La tasa de desempleo juvenil m¨¢s alta de Europa (52,1%) y el elevado precio de la vivienda, que pese al pinchazo de la burbuja inmobiliaria, no termina de desinflarse, retrasan la decisi¨®n de marcharse de la casa familiar. Los espa?oles son los europeos que m¨¢s tarde se van de casa: se independizan de media a los 29 a?os, seg¨²n datos del estudio J¨®venes y Emancipaci¨®n elaborado por la Fundaci¨®n Contra la Drogadicci¨®n (FAD) y la Obra Social Caja Madrid, presentado ayer.

Solo el 45,6% de los j¨®venes entre 18 y 34 a?os est¨¢n emancipados en Espa?a, de los que m¨¢s de la mitad son mujeres. El dif¨ªcil acceso a un empleo es, seg¨²n el informe, una de las principales trabas para vivir de manera independiente. Los espa?oles son los europeos que m¨¢s tardan en encontrar un empleo desde que terminan sus estudios: 2 a?os y 8 meses. El tiempo que pasa hasta que se estabilizan en un puesto es casi de 5 a?os. ¡°Esto retrasa aun m¨¢s la partida del hogar¡±, afirm¨® Jos¨¦ Guirao, coordinador de la Obra Social. Una vez incorporados al mercado laboral, los espa?oles adem¨¢s dejan pasar tres a?os hasta que deciden independizarse. En Francia o Suecia este intervalo es de solo un a?o.

La investigaci¨®n alerta, sin embargo, de que otras causas ¡ªadem¨¢s del paro y la precariedad laboral¡ª como el precio de la vivienda, la falta de ayudas p¨²blicas y la cultura ¡°familista¡±, influyen en esa tardanza.

Los j¨®venes espa?oles de 15 a 30 a?os apenas tienen ayudas en becas para la formaci¨®n o al desempleo. Este tipo de financiaci¨®n supone el 2% de sus ingresos. Solo en Grecia e Irlanda es inferior. En comparaci¨®n con otros pa¨ªses europeos es un porcentaje muy bajo. En Alemania el 16% de los fondos de sus j¨®venes provienen de subvenciones p¨²blicas; en el Reino Unido el 11% y en Francia el 5%. Estas ayudas llegan, adem¨¢s, a muy pocas personas, denunci¨® ayer Eusebio Mej¨ªas, director t¨¦cnico de la FAD. ¡°Mientras que el 22% de los suecos de 15 a 30 a?os reciben alg¨²n tipo de ayuda; en Espa?a solo lo recibe el 5%. No existe un proceso institucionalizado ni normalizado para la emancipaci¨®n¡±, dijo.

El estudio destaca que la mayor parte de los ingresos de los j¨®venes de pa¨ªses mediterr¨¢neos proviene de la familia. Un 35% de los menores de 29 a?os en edad de trabajar tienen plena dependencia econ¨®mica de sus padres. Solo un 21,5% son econ¨®micamente aut¨®nomos. Sin trabajo y sin dinero, el acceso a la vivienda se complica. Un 78,9% de los j¨®venes dice que preferir¨ªa tener su casa en propiedad frente al 16,7 que se decanta por el alquiler. Los precios en el mercado inmobiliario son casi inalcanzables, pero el alquiler tampoco no es una alternativa m¨¢s f¨¢cil ya que los j¨®venes que trabajan deben dedicar una media del 42% de su sueldo para este fin. Esto no es ninguna sorpresa teniendo en cuenta que apenas llegan al mileurismo.

La coyuntura econ¨®mica no es en cualquier caso la ¨²nica causa por la que los j¨®venes ¡°se apalancan¡±, como dice el informe, en casa. ¡°Existen elementos determinantes como las caracter¨ªsticas culturales y modelos familiares que contribuyen sobremanera a que, junto a Italia, seamos el pa¨ªs europeo en el que m¨¢s tarde se van de casa¡±, apunt¨® Meg¨ªas.

En este sentido, los padres no quieren que sus hijos se vayan de casa ¡°de cualquier manera¡± y los j¨®venes no abandonan el hogar ¡°si es para perder calidad de vida¡±, concluyen los investigadores. Guirao se?al¨® que ¡°los entrevistados valoran la comodidad que encuentran en casa y temen que si se independizan, perder¨¢n beneficios materiales¡±. Pero por quedarse en casa no sienten que pierdan independencia ya que cada vez m¨¢s los progenitores abogan por dar espacio y libertad en el hogar. Se da la ¡°paradoja¡±, dice el texto, de que los j¨®venes ¡°maduran¡± antes pero se ¡°infantilizan¡± m¨¢s.