La horca acecha a los violadores de Amanat
Los acusados est¨¢n imputados por violaci¨®n y asesinato, lo que puede castigarse con la muerte
Los cinco acusados de la violaci¨®n que ha conmocionado a India ¡ªpor su brutalidad y por la vulnerabilidad en la que viven las mujeres¡ª fueron imputados formalmente ayer por los delitos de secuestro, violaci¨®n y asesinato. As¨ª comenz¨®, bajo la presi¨®n del esc¨¢ndalo social, el juicio r¨¢pido en el que habr¨¢ audiencias diariamente y que se celebra en un tribunal al sur de la capital india. Los hombres podr¨ªan ser castigados con cadena perpetua o muerte. Los acusados no fueron presentados ante el tribunal, a pesar de que lo manda la ley. Se teme por su seguridad por la furia que la violaci¨®n ha despertado. Las autoridades tambi¨¦n han hecho pruebas para comprobar si el sexto presunto violador es menor de edad, en cuyo caso ser¨¢ juzgado por separado en un tribunal juvenil.
La violaci¨®n de una estudiante de 23 a?os, ocurrida el 16 de diciembre en Nueva Delhi, ha creado una explosi¨®n de ira sin precedentes en India por su brutalidad. Tambi¨¦n porque ¡°ha puesto en evidencia la incapacidad del Gobierno para proteger a las mujeres¡±, asegura Ranjani Kumar, directora del think-tank Centro de Estudios Sociales. Las manifestaciones no han parado en diferentes partes del pa¨ªs. Algunas de ellas se han convertido en violentas, dejando el saldo de un polic¨ªa y un periodista muerto y m¨¢s de 140 heridos. Las fuerzas de seguridad han utilizado gases lacrim¨®genos, agua y palos para dispersar a las masas.
"Todo el pa¨ªs pide que estos monstruos sean ejecutados", dice el padre
Los indios exigen justicia para Amanat, ¡°La hija de India¡± o ¡°Coraz¨®n valiente¡±, como se le ha llamado en los medios, pues su identidad no ha sido revelada. Aunque en los ¨²ltimos d¨ªas se debate si deber¨ªa usarse su nombre real para las nuevas leyes para castigar la violaci¨®n que podr¨ªan aprobarse en los pr¨®ximos meses y que justamente han sido aceleradas por este caso. La familia de la v¨ªctima ha dado su aprobaci¨®n.
La estudiante de medicina, de 23 a?os, y su acompa?ante (su novio, seg¨²n algunos medios indios) salieron del cine y subieron por error a un autob¨²s que confundieron por p¨²blico. Los seis hombres, que pretend¨ªan ser pasajeros, insultaron a la chica por estar en la calle a esas horas (las nueve y veinte de la noche). Cuando su acompa?ante intent¨® defenderla, los sujetos lo golpearon fuertemente con una barra de acero en la cabeza y el vientre, seg¨²n fuentes que han tenido acceso al reporte policial. A ella la violaron en turnos durante m¨¢s de una hora. Le introdujeron una barra met¨¢lica por la vagina, lo que le perfor¨® los intestinos. Despu¨¦s, la pareja fue arrojada a la calle desde el autob¨²s en movimiento. El ch¨®fer del autob¨²s intent¨® atropellarla despu¨¦s, pero su acompa?ante logr¨® quitarla de su paso.
Por el momento ning¨²n
abogado quiere defender
a los detenidos
Una persona que pasaba por all¨ª los encontr¨® semidesnudos y llam¨® a la polic¨ªa, que lleg¨® media hora m¨¢s tarde y la traslad¨® a un hospital donde fue operada tres veces para quitarle los intestinos que se hab¨ªan gangrenado. Tras 11 d¨ªas en condici¨®n ¡°extremadamente cr¨ªtica¡± fue trasladada a un hospital en Singapur, donde muri¨® dos d¨ªas despu¨¦s.
En sus primeras declaraciones p¨²blicas, el padre de Amanat pidi¨® ayer la ejecuci¨®n de los responsables. ¡°El pa¨ªs entero demanda que estos monstruos sean ahorcados. Yo estoy a favor¡±, dijo. Tambi¨¦n record¨® que su hija siempre quiso ser doctora y que por eso toda la familia se mud¨® de su aldea en el empobrecido Estado de Uttar Pradesh a Nueva Delhi. ¡°Quer¨ªamos dar a nuestros hijos un mejor futuro¡±, dijo el padre, que trabaja como cargador en el aeropuerto de la ciudad.
Ir¨®nicamente Nueva Delhi es conocida como la ¡°capital de las violaciones¡±, una de las ciudades m¨¢s peligrosas para las mujeres. Cada 17 horas sucede uno de estos cr¨ªmenes en un territorio de 16 millones de habitantes.
En las protestas los manifestantes piden justicia. ¡°Esta es una oportunidad del Gobierno para dar un castigo ejemplar a estos violadores y que las mujeres sean respetadas¡±, asegura Kamal Allam, que es estudiante, como muchos de los congregados. ¡°Queremos salir libremente a la calle. A diario sufrimos vejaciones por ser mujeres. Es la obligaci¨®n del Gobierno protegernos¡±, dice indignada Aarthi Ghosh. Tambi¨¦n fuera de la corte, abogados con sus togas demandaron una sentencia ejemplar.
¡°La presi¨®n social ha sido esencial para que el Gobierno est¨¦ tomando este caso en serio¡±, asegura la directora del Centro de Estudios Sociales. Los casos de violaci¨®n tardan normalmente dos a?os en ser juzgados. Aunque, en tono conciliador, el presidente de la Corte Suprema, Altamas Kabir, dijo que ¡°un juicio r¨¢pido no debe hacerse al coste de un juicio justo¡±.
Tambi¨¦n por la presi¨®n de la poblaci¨®n, un miembro del Partido del Congreso, en el poder, fue detenido en el Estado de Assam, al noreste de India, investigado por la presunta violaci¨®n de una joven. Los detalles relacionados con la violaci¨®n de Amanat y la violencia contra las mujeres en general han sido portada de todos los peri¨®dicos desde hace tres semanas, cuando estos temas raramente ten¨ªan trascendencia.
La imagen de la polic¨ªa tambi¨¦n ha empeorado, ya que los ciudadanos perciben que les falta sensibilidad, que hay pocas mujeres polic¨ªas encargadas de tomar declaraci¨®n y examinar a las v¨ªctimas o que en muchos casos, por corrupci¨®n o ineficiencia, se niegan a levantar las denuncias.
La gobernadora de Nueva Delhi se ha presentado a algunas de las protestas rodeada por guardaespaldas y ha permanecido poco tiempo. En algunas ocasiones ha sido abucheada. Su Gobierno se ha apresurado a anunciar una serie de medidas para hacer de la capital un lugar m¨¢s seguro para sus habitantes. Ha prometido m¨¢s polic¨ªa en la noche, revisi¨®n a los conductores de autobuses y prohibir los vidrios tintados. Tambi¨¦n se ha puesto una l¨ªnea telef¨®nica de ayuda a las mujeres con problemas. El Gobierno federal ha creado un comit¨¦ que en el periodo de un mes dar¨¢ recomendaciones para cambiar la ley contra violaciones.
Pero, por ahora las mujeres entrevistadas coinciden que no se sienten seguras. ¡°Me siento tristemente identificada con Amanat. Podr¨ªa haber sido yo la que sal¨ªa del cine y ser violada de esa manera tan brutal¡±, reconoce Shreya Sharma. Esta empleada de 31 a?os admite que ha empezado a cargar el espray de pimienta que su madre le hab¨ªa regalado meses atr¨¢s. ¡°Creo que es lo ¨²nico que me puede proteger en una emergencia¡±, dice.
Mil p¨¢ginas de pruebas
Amanat estuvo consciente la mayor parte del tiempo y logr¨® dar su testimonio antes de morir. Aunque su madre se opuso a que su declaraci¨®n fuera grabada, la chica pudo hablar con los investigadores del caso. Este testimonio ser¨¢ clave en el juicio. Adem¨¢s, el expediente que contiene las pruebas y que consta de casi mil p¨¢ginas tambi¨¦n contiene la declaraci¨®n del acompa?ante de la chica, un ingeniero en inform¨¢tica de 28 a?os. La polic¨ªa tiene preparados a 30 testigos, entre los que se encuentra un hombre que asegura fue robado por el grupo de supuestos violadores. Otra prueba crucial en contra de los acusados es que tres de ellos tienen marcas de las mordidas que la chica les propin¨® cuando intentaba defenderse.
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