¡°Me queda un semestre, es absurdo dar marcha atr¨¢s¡±
A Carlos Fern¨¢ndez le denegaron la beca por haberse matriculado de menos cr¨¦ditos de los requeridos
Carlos Fern¨¢ndez est¨¢ en 4? de Derecho en la Universidad de Barcelona (UB). Est¨¢ en la recta final de la carrera, pero se acaba de topar con un gran obst¨¢culo para pagar la matr¨ªcula. Le denegaron la beca del ministerio por haberse matriculado de menos cr¨¦ditos de los requeridos. ¡°Lo hice porque no me quer¨ªa arriesgar a matricularme de m¨¢s cr¨¦ditos y despu¨¦s encontrarme con la beca denegada y sin poder pagar el curso¡±, justifica Carlos, casi intuyendo lo que le iba a pasar.
Con la petici¨®n de ayuda rechazada, se encontr¨® con un recibo de 700 euros por 27 cr¨¦ditos matriculados. Casi el mismo importe que abon¨® hace cuatro a?os, cuando empez¨® la carrera, por 60 cr¨¦ditos. Est¨¢ haciendo lo imposible para reunir el dinero, pero todav¨ªa le quedan 300 euros por conseguir. El plazo se le ha pasado, as¨ª que la UB ha dejado en suspenso su matr¨ªcula (junto a unos 500 estudiantes m¨¢s) y le han cerrado el acceso al campus virtual. Con todo, se ha presentado a los ex¨¢menes porque su intenci¨®n es pagar cuando pueda y que la universidad lo readmita.
¡°Me queda un semestre para acabar la carrera. Llegados a este punto, es absurdo dar marcha atr¨¢s¡±, tercia, rechazando la idea de abandonar los estudios, como han hecho otros muchos, por cuestiones econ¨®micas. La afirmaci¨®n en el caso de Carlos no es balad¨ª. Este joven de 27 a?os fue uno de esos numerosos estudiantes que, durante la ¨¦poca dorada del ladrillo, abandonaron los estudios prematuramente para trabajar en el sector de la construcci¨®n. Ya en esa ¨¦poca, Carlos se empez¨® a arrepentir de haber dejado las clases. Desempolv¨® los libros y se sac¨® el bachillerato. Entonces lleg¨® la crisis y la empresa donde trabajaba se vio abocada al cierre.
El joven, de Olesa de Montserrat, decidi¨® empezar la carrera de Derecho desafiando las dificultades econ¨®micas. ¡°En casa somos tres y una hipoteca¡±, se permite bromear. Pero, a continuaci¨®n, ya en un tono m¨¢s serio, explica que la familia se sustenta en el sueldo del padre ¡ªla madre est¨¢ de baja por larga enfermedad¡ª que llega justo para sobrevivir. ¡°No sufrimos, pero solo tenemos para comer y pagar facturas. No hacemos nada m¨¢s¡±, comenta.
Carlos hace un esfuerzo adicional estos d¨ªas para intentar aprobar todos los ex¨¢menes y volver a pedir la beca el a?o que viene que le permita acabar las pocas asignaturas que le quedan.
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