Todos los m¨¦dicos podr¨¢n objetar
La ley vigente solo permite inhibirse a los que participen ¡°directamente¡±
El anteproyecto de ley aprobado ayer reconoce el derecho de los profesionales sanitarios a objetar por motivos de conciencia de ¡°cualquier participaci¨®n o colaboraci¨®n¡± en los supuestos despenalizados del aborto. Es decir, la nueva norma asume la reivindicaci¨®n de los colectivos antiabortistas y algunos colegios de m¨¦dicos que ped¨ªan que se admitiera el derecho a objetar de todos los profesionales sanitarios y no solo de aquellos que participen en la interrupci¨®n del embarazo.
La ley de 2010 fue la primera en regular la objeci¨®n de conciencia, pero la restringe a los profesionales ¡°directamente implicados¡± en el aborto. El texto no concretaba qui¨¦nes son los ¡°directamente implicados¡±, pero el Ministerio de Sanidad aclar¨® que la interpretaci¨®n correcta era que solo pueden objetar el m¨¦dico que practique la intervenci¨®n, la comadrona y el anestesista. Con la reforma planteada por el ministro Alberto Ruiz-Gallard¨®n, este derecho se extiende a toda la cadena de profesionales que intervienen en el proceso, aunque sea de forma indirecta.
Este cambio colma, sobre todo, las expectativas de m¨¦dicos de atenci¨®n primaria que han solicitado poder negarse a atender a las mujeres que llegaran a su consulta pidiendo informaci¨®n para abortar. Algunos llegaron a reclamar este derecho ante los tribunales, que no se han puesto de acuerdo. En abril de este a?o, el Tribunal Superior de Justicia de Andaluc¨ªa emiti¨® la primera sentencia de un tribunal auton¨®mico sobre estos casos y neg¨® el derecho a objetar de los m¨¦dicos de atenci¨®n primaria.
Esteban Rodr¨ªguez, de la asociaci¨®n Ginec¨®logos por el Derecho a Decidir, se felicita por este cambio introducido en la ley. ¡°La norma vigente consolid¨® un r¨¦gimen de opresi¨®n contra las libertades individuales¡±, declara Rodr¨ªguez, que apunta que, adem¨¢s de a m¨¦dicos de atenci¨®n primaria, el nuevo texto abre la puerta a la objeci¨®n a los ginec¨®logos que aprecien malformaciones en una ecograf¨ªa. ¡°Cuando un m¨¦dico informa de una malformaci¨®n est¨¢ revelando la intimidad gen¨¦tica de un ser humano. Y no para hacerle un bien¡±, sostiene.
El texto establece que el profesional que quiera objetar deber¨¢ comunic¨¢rselo por escrito al director del centro. Joaqu¨ªn Fern¨¢ndez Crehuet, presidente del comit¨¦ deontol¨®gico del Colegio de M¨¦dicos de M¨¢laga, considera acertado este registro porque permitir¨¢ a los centros organizarse para garantizar la atenci¨®n a las mujeres, pero pide que se garantice tambi¨¦n la intimidad de los m¨¦dicos. La ley establece que la decisi¨®n del m¨¦dico tendr¨¢ ¡°car¨¢cter reservado¡± y se incluir¨¢ en su expediente personal.
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