?Qu¨¦ hacemos con la pobreza infantil?
??Kaserian ingera!?, es la frase con la que suelen saludarse los masai en suajili significa algo parecido a ??C¨®mo est¨¢n los ni?os!?. Si los ni?os est¨¢n bien, el resto de la tribu tambi¨¦n lo est¨¢.
Hace unos d¨ªas cuando le preguntaban a nuestro Presidente de Gobierno en el debate del Estado de la Naci¨®n sobre sus planes para resolver la terrible situaci¨®n de la pobreza infantil respond¨ªa que no iba a entrar sobre ese asunto.
Seg¨²n los datos aportados por Save The Children presentado hace unos d¨ªas, en Espa?a existen actualmente casi tres millones (2.826.549) de ni?as y ni?os en situaci¨®n de pobreza, o lo que es lo mismo de cada 10 ni?os o ni?as que viven aqu¨ª, 3 son pobres. Desde el Observatorio Social de Espa?a, dirigido por el Profesor Vicent Navarro, se?alan que nuestro pa¨ªs es el campe¨®n entre los que m¨¢s han aumentado la pobreza infantil en los ¨²ltimos a?os. En Espa?a el porcentaje de ni?os que viven en hogares con pobreza extrema ha crecido m¨¢s de 4 puntos porcentuales desde que empez¨® la crisis, la cifra m¨¢s alta de toda la UE, s¨®lo por debajo de Ruman¨ªa y Bulgaria.
Esta tendencia es una tradici¨®n hispana, los asuntos relacionados con la infancia tienen un lugar poco destacado en las agendas pol¨ªticas de este pa¨ªs; ni en las ¨¦pocas malas (¨¦sta lo es), ni en las ¨¦pocas de bonanza econ¨®mica la infancia ha despertado inter¨¦s en la mayor¨ªa de los pol¨ªticos y pol¨ªticas, m¨¢s all¨¢ de declaraciones en el d¨ªa mundial de turno, en efem¨¦rides in¨²tiles o en actos lacrim¨®genos. La ley de protecci¨®n a la infancia qued¨® sin aprobar por el anterior gobierno y sigue sin aprobarse por el actual, m¨¢s preocupado en obligar a la mujeres a tener hijos que no desean que en protegerlos una vez nacidos.
Mientras que en la UE la media del PIB dedicado a pol¨ªticas p¨²blicas de protecci¨®n a la infancia se sit¨²a en torno al 2%, en nuestro pa¨ªs nos conformamos con la mitad. Pa¨ªses como Dinamarca o Finlandia destinan el 12% del gasto total en pol¨ªticas sociales a su infancia, Espa?a dedica el 5%, seg¨²n un reciente estudio de la Fundaci¨®n Primero de Mayo.
Quienes trabajamos con ni?os, sabemos que los efectos de la privaci¨®n infantil son altamente perjudiciales y se relacionan con problemas de salud en la edad adulta. El impacto de la mala nutrici¨®n o falta de est¨ªmulos educativos en edades tempranas, al principio del r¨ªo de la vida, pueden tener consecuencias de dif¨ªcil y costoso arreglo, comprometiendo no solo el futuro de esos ni?os, sino el de todos, disminuyendo la capacidad econ¨®mica y productiva del pa¨ªs.
Las pol¨ªticas p¨²blicas bien orientadas pueden hacer mucho por la infancia. Los recursos tienen impacto real sobre la felicidad y sobre la salud. Si bien existe una estrecha relaci¨®n entre la situaci¨®n de pobreza de los ni?os y el desempleo de sus padres o la p¨¦rdida de renta de estos; aquellos pa¨ªses con pol¨ªticas s¨®lidas de apoyo a la infancia son capaces de contrarrestar los efectos de dichas situaciones de pobreza, como han se?alado los profesores Donald Acheson y Richard Wikinson, contrarrestando incluso las peores situaciones, al reducir el estr¨¦s y las enfermedades que produce en las personas pobres la diferencia entre su renta y la de las ricas.
Invertir en la infancia es la mejor forma de salir de la crisis. Como destaca el ¨²ltimo informe de la Oficina de Investigaci¨®n de UNICEF sobre bienestar infantil en pa¨ªses ricos, la experiencia acumulada y constatada dice que aquellos pa¨ªses que en situaciones de crisis hicieron mayor esfuerzo en medidas de apoyo a la infancia (proteger recursos educativos, sanitarios y sociales dirigidos a los ni?os y las familias) salieron m¨¢s reforzados de las mismas.
Si ya nos hemos convencido, podemos dar algunas pistas de c¨®mo hacerlo.
Es fundamental que los ni?os y sus familias tengan acceso a recursos adecuados. Una renta b¨¢sica para las familias, acceso al empleo de padres y madres con salarios dignos, prestaciones econ¨®micas a familias con hijos o alivios tributarios, prestaciones sanitarias y farmacia, educaci¨®n, libros de texto o acceso a recursos educativos de calidad, comedor, transporte, vivienda y ocio.
En un reciente estudio sobre bienestar y pobreza infantil, auspiciado por la propia Comisi¨®n Europea, se realizan una serie de recomendaciones a este respecto que podemos resumir en aquellas que se sabe que han demostrado mayor eficacia contra las malas elecciones en tiempos de austeridad como restringir prestaciones a colectivos concretos o potenciar la beneficencia en detrimento de la universalidad y la equidad. El acceso a servicios de calidad para la infancia -educaci¨®n, salud, vivienda y protecci¨®n social-, es determinante para la democracia, el bienestar y el desarrollo de nuestro pa¨ªs. Para eso es necesario romper con la din¨¢mica de infiltraci¨®n de pol¨ªticas educativas no inclusivas y garantizar t¨¦cnicamente que ning¨²n ni?o se quede atr¨¢s, seg¨²n sus capacidades, evitando la segregaci¨®n y poniendo ¨¦nfasis en el desarrollo individual de cada ciudadano o ciudadana menor de edad. La vida de la infancia la hacen m¨¢s feliz y saludable los servicios sanitarios accesibles a todos los ni?os y ni?as, el acceso a una vivienda y a entornos de convivencia y juego decentes, con independencia de la formaci¨®n, la renta o la procedencia de sus padres. Los servicios sociales y de protecci¨®n de menores que apuestan por la promoci¨®n del bienestar, la prevenci¨®n y los cuidados en entornos familiares frente a los residenciales, determinan en gran medida el futuro de la ciudadan¨ªa en un pa¨ªs.
Es hora de entrar en estos asuntos, incluirlos en las agendas pol¨ªticas y ponerlos en pr¨¢ctica, porque todos los ni?os y ni?as, como en el Peter Pan de JM Barri¨¦, crecen y no esperan a que las crisis terminen. No podemos perder tiempo, hay que empoderar a los ni?os y ni?as, son los que mejor conocen su situaci¨®n y los m¨¢s creativos e innovadores a la hora de aportar soluciones positivas a todos estos problemas, empecemos a actuar en equipo con ellos.
Mariano Hern¨¢n es profesor de Salud P¨²blica Infantil. Antonio Molina es psic¨®logo de protecci¨®n de Menores.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.