La cuarentena por el ¨¦bola sume a Liberia en el caos

Las extraordinarias medidas que est¨¢n imponiendo los pa¨ªses afectados por la epidemia de ¨¦bola que ya se ha cobrado 1.350 v¨ªctimas mortales est¨¢n generando los primeros problemas de seguridad ciudadana. Este mi¨¦rcoles, las calles de Monrovia, la capital de Liberia, fueron el escenario de enfrentamientos cuando decenas de ciudadanos de West Point, barrio en torno al cual se ha decretado una cuarentena sanitaria, comenzaron a arrojar piedras a la polic¨ªa, que respondi¨® con gases lacrim¨®genos para dispersar a la multitud. Al menos cuatro personas resultaron heridas, seg¨²n AFP.

Los vecinos estaban muy enfadados porque se encontraron, por la ma?ana, todos los accesos bloqueados con barricadas levantadas por la polic¨ªa con muebles y alambres de espino, lo que les imped¨ªa ir a trabajar o a comprar al mercado. ¡°Simplemente nos lo encontramos esta ma?ana. Salimos y no pod¨ªamos ir a ninguna parte¡±, dijo Alpha Barry, de 45 a?os. ¡°No tengo comida y estamos asustados¡±, a?adi¨® este guineano residente en Liberia, padre de cuatro hijos.

Este barrio, uno de los m¨¢s populares y humildes de la capital liberiana, con unos 75.000 habitantes, ya fue el escenario el pasado fin de semana de un ataque a un centro provisional de aislamiento protagonizado por residentes que se opon¨ªan a la presencia de enfermos de ¨¦bola en la zona. En dicho ataque se escap¨® una veintena de enfermos que, seg¨²n las autoridades liberianas, ya han sido localizados y vueltos a aislar. La presidenta liberiana Ellen Johnson-Sirleaf ha decretado un toque de queda nocturno, entre las 21.00 y las 6.00, para evitar nuevos incidentes. Adem¨¢s, se ha ordenado el cierre de todos los centros y establecimientos de ocio del pa¨ªs.

¡°No hemos sido capaces de controlar la propagaci¨®n del virus debido a la resistencia por parte de los ciudadanos, a las pr¨¢cticas culturales en los entierros y al desprecio a los consejos del personal sanitario y a las advertencias del Gobierno¡±, ha asegurado Johnson-Sirleaf en un comunicado en el que anunci¨®, adem¨¢s, la cuarentena en torno a dos barrios, West Point y Dolo Town, en Margibi.

Mientras tanto, en Sierra Leona tambi¨¦n aumenta el malestar ciudadano. Adama Ba, un empresario que regenta un hotel en Freetown, aseguraba por tel¨¦fono a EL PA?S que ya est¨¢ notando ¡°un aumento de los precios en la calle¡±. ¡°Como esto siga as¨ª se va a producir un levantamiento popular¡±, dijo. La poblaci¨®n se enfrenta adem¨¢s a otro problema. Muchas personas enfermas de cualquier dolencia no tienen a donde ir. ¡°Los centros de salud se est¨¢n quedando vac¨ªos, el personal sanitario no acude a trabajar¡±, a?adi¨® En este contexto, cada vez m¨¢s ciudadanos extranjeros est¨¢n dejando el pa¨ªs. La Embajada de Canad¨¢ se ha sumado a otras legaciones que recomiendan a sus ciudadanos abandonar Sierra Leona.

En otro de los pa¨ªses afectados, Nigeria, la conmoci¨®n ha venido por el quinto fallecimiento por ¨¦bola. Se trata de la doctora Stella Ameyo Adadevoh, quien, al igual que ocurriera con el doctor Umar Khan en Sierra Leona, ya es considerada una hero¨ªna en su pa¨ªs. Seg¨²n han publicado los medios locales, Adadevoh se contagi¨® de ¨¦bola cuando atendi¨®, junto a su equipo, al primer enfermo de ¨¦bola en este pa¨ªs, el liberiano-estadounidense Patrick Sawyer.

¡°Ella misma, con la ayuda de la enfermera Justina Obi Ejelonu, retuvo a Sawyer en el hospital de Lagos cuando este intent¨® quitarse el gotero y levantarse de la cama. La acci¨®n de Adadevoh probablemente salv¨® muchas vidas en Nigeria, porque si el paciente hubiera logrado salir del hospital hubiera entrado en contacto con much¨ªsimas personas¡±, asegura el peri¨®dico nigeriano Vanguard. Ella fue la primera persona oficialmente contagiada de ¨¦bola en Nigeria y su salud se hab¨ªa deteriorado mucho en la ¨²ltima semana, hasta el punto de que amigos y colegas hab¨ªan pedido ayuda a Estados Unidos para intentar salvarla. Sin embargo, la ayuda no lleg¨®.

El miedo al ¨¦bola no se queda en los pa¨ªses afectados. Tambi¨¦n se empieza a notar en otros de la regi¨®n. En Senegal, por ejemplo, se est¨¢n produciendo cancelaciones de reservas hoteleras y muchos turistas han decidido escoger otro destino. En lugares tan alejados dentro del continente, como Kenia o Sud¨¢frica, los operadores tur¨ªsticos tambi¨¦n empiezan a percibir esta tendencia.

Este mi¨¦rcoles, la compa?¨ªa a¨¦rea Air France ha confirmado que algunos de sus trabajadores se est¨¢n negando a volar a Guinea, Sierra Leona o Liberia, aunque la aerol¨ªnea mantiene de momento sus vuelos.