Siete claves sobre la esclerosis m¨²ltiple

La esclerosis m¨²ltiple es una enfermedad neurodegenerativa que padecen 2,5 millones de personas en el mundo, 47.000 de ellas en Espa?a. Lesiona las c¨¦lulas del sistema nervioso central, formado por el cerebro y la m¨¦dula espinal, y se manifiesta de manera distinta en cada paciente. Afecta m¨¢s a las mujeres que a los hombres, en una proporci¨®n de siete a tres, y la incidencia es mayor en los pa¨ªses m¨¢s distantes de la l¨ªnea del Ecuador (norte de Europa, Canad¨¢ y EE. UU.). El origen de la patolog¨ªa se atribuye a una conjunci¨®n de varias causas, sobre todo ambientales, como la deficiencia de vitamina D, la acci¨®n de algunos virus, el consumo de tabaco o una dieta poco saludable. Est¨¢ catalogada como una dolencia autoinmune, un concepto que engloba las enfermedades en las que el sistema inmunitario tiene un funcionamiento an¨®malo y deja de combatir las bacterias, virus y otros agentes externos que penetran en el organismo. En el caso de la esclerosis m¨²ltiple, se vuelve contra las neuronas da?ando la capa grasa que las rodea, la mielina.

1. ?Hay un tipo de enfermedad m¨¢s grave que otros?

?Tengo esclerosis m¨²ltiple? Tan importante como responder a esta pregunta es conocer qu¨¦ modalidad de la enfermedad se sufre. Al 85% de las personas se les diagnostica esclerosis m¨²ltiple remitente recurrente (EMRR), que se caracteriza por la aparici¨®n de fases de agudizaci¨®n, denominados brotes, con s¨ªntomas que pueden durar d¨ªas, semanas e incluso meses. Si no se trata, entre el 50% y el 60% de los pacientes desarrollan una modalidad denominada esclerosis m¨²ltiple secundaria progresiva (EMPS), en la que se registra un empeoramiento creciente de los s¨ªntomas. El 10% de los enfermos sufren esclerosis m¨²ltiple primaria progresiva (EMPP), que se distingue por la ausencia de brotes y por un empeoramiento de las funciones neurol¨®gicas desde el diagn¨®stico. Una minor¨ªa padece la conocida como esclerosis m¨²ltiple benigna, que presenta los s¨ªntomas m¨¢s leves de todas y en la que, transcurridos 10 o 15 a?os del diagn¨®stico, la discapacidad es escasa.

2. ?Existe alg¨²n tratamiento eficaz?

Los m¨¦dicos y el personal de enfermer¨ªa disponen de diversas opciones para encontrar la terapia m¨¢s adecuada para cada paciente. Los tratamientos modificadores de la enfermedad (TME) pueden retrasar los da?os que la esclerosis m¨²ltiple causa en el sistema nervioso central. La terapia no solo va dirigida contra los s¨ªntomas, su objetivo es tratar tambi¨¦n la enfermedad subyacente. Como en otras patolog¨ªas, un seguimiento constante de los profesionales sanitarios es fundamental ya que los tratamientos no funcionan igual en todas las personas.

3. ?Por qu¨¦ es importante un diagn¨®stico precoz?

Cuanto antes se conoce un problema, m¨¢s eficiente puede ser la manera de abordarlo. En el caso de la esclerosis m¨²ltiple, aunque la persona afectada se sienta bien, no quiere decir que la evoluci¨®n de la enfermedad se haya detenido. Esta puede permanecer activa e ir produciendo da?os, lo que sugiere, seg¨²n la investigaci¨®n, que el tratamiento se inicie justo despu¨¦s del diagn¨®stico. No obstante, el criterio siempre deben establecerlo los profesionales sanitarios. En los tipos recurrentes de esclerosis m¨²ltiple, una intervenci¨®n temprana con un tratamiento modificador de la enfermedad puede reducir las reca¨ªdas, limitar el da?o causado en las fases iniciales, as¨ª como retrasar la discapacidad y su impacto a largo plazo en la salud f¨ªsica y mental, adem¨¢s de influir en el estado de ¨¢nimo.

4. Me fatigo mucho y me duele la cabeza, ?tendr¨¦ esclerosis m¨²ltiple?

Estos s¨ªntomas son comunes a muchas enfermedades y no son suficientes para hacer un diagn¨®stico de ninguna de ellas, por lo que debe valorarlos un especialista. Los da?os que provoca la esclerosis m¨²ltiple se registran en distintas partes del sistema nervioso central, lo que hace que se manifiesten en una ampl¨ªsima variedad de s¨ªntomas. Esta dolencia hace realidad el dicho de que no hay enfermedades sino enfermos porque los signos que muestran var¨ªan en cada uno de ellos. Es muy poco probable que una persona sufra todos los s¨ªntomas. La sensaci¨®n de cansancio, si no est¨¢ relacionada con una actividad intensa, es un rasgo muy com¨²n, afecta al 96% de los enfermos. M¨¢s del 90% presentan problemas de equilibrio y coordinaci¨®n, y un 75% sufre trastornos visuales.

5. ?Se puede prevenir la enfermedad?

La medicina no ha desentra?ado todav¨ªa el origen de la esclerosis m¨²ltiple, pero s¨ª ha demostrado que hay cuatro h¨¢bitos que contribuyen a su control y a la mejora de la calidad de vida de los pacientes, un elemento clave al hablar de una enfermedad cr¨®nica. El ejercicio f¨ªsico es muy importante porque ayuda a mantener el tono muscular, mejora capacidades como la memoria y la atenci¨®n, y tambi¨¦n el estado de ¨¢nimo, lo que aumenta a su vez la tolerancia al estr¨¦s. En segundo lugar, la dieta mediterr¨¢nea, con abundancia de prote¨ªnas y ¨¢cidos grasos de origen vegetal, disminuye los factores que promueven la inflamaci¨®n y se relacionan con otras dietas ricas en grasas animales. La tercera rutina recomendable es tomar el sol 30 minutos al d¨ªa, ya que facilita la producci¨®n de vitamina D cuyo d¨¦ficit se relaciona con un funcionamiento an¨®malo del sistema inmune. Por ¨²ltimo, se aconseja vacunarse todos los a?os contra la gripe porque, en ocasiones, las infecciones pueden desencadenar un brote de esclerosis m¨²ltiple.?

6. ?Los afectados llevan una vida normal?

Depende de la evoluci¨®n de la enfermedad y esta no se puede prever. Se conocen algunos factores de riesgo que afectan a su curso y pueden desencadenar los brotes. Los estudios han asociado una progresi¨®n negativa con algunas conductas de riesgo como tener sobrepeso u obesidad, soportar un estr¨¦s continuado, seguir dietas que favorecen la inflamaci¨®n (la esclerosis m¨²ltiple es una enfermedad inflamatoria y neurodegenerativa) o consumir tabaco. Se ha demostrado que fumar agrava el da?o neuronal porque reduce la capacidad del organismo para sintetizar mielina. Por otra parte, el estr¨¦s y las infecciones pueden actuar como desencadenantes de los brotes.

7. ?Si mi padre tuvo esclerosis m¨²ltiple, puedo sufrirla yo?

Las investigaciones sobre la probabilidad de tener esclerosis m¨²ltiple cuando la ha padecido alg¨²n familiar revelan que, si el enfermo es uno de los progenitores, la posibilidad de que la pase uno de los hijos es de un 5% (de 20 a 40 veces m¨¢s que la poblaci¨®n general). Si el afectado es el hermano, el porcentaje se reduce al 2%. Se estima que hay una treintena de genes implicados en el desarrollo de la enfermedad, pero eso no quiere decir que sea una patolog¨ªa de transmisi¨®n gen¨¦tica. Los factores ambientales son determinantes: act¨²an como un interruptor de la esclerosis m¨²ltiple, interfieren en el sistema inmunol¨®gico provocando anomal¨ªas en su funcionamiento. Una caracter¨ªstica singular de la enfermedad es que las consecuencias de estos est¨ªmulos ambientales solo aparecen si la persona ha estado expuesta a ellos durante los primeros a?os de la vida.