Mar del Plata clama justicia por la violaci¨®n en grupo de una joven de 14 a?os
Los vecinos de esta ciudad costera argentina temen que quede impune, como ocurri¨® con el feminicidio de Luc¨ªa P¨¦rez
"?Y si hubiera sido mi hija?". Camila, quiosquera de la ciudad argentina de Mar del Plata, se ha repetido cientos de veces esta pregunta desde el pasado 1 de enero. Ese d¨ªa se enter¨® de que hab¨ªan detenido a cinco hombres por la presunta violaci¨®n de una adolescente de 14 a?os en un camping cercano. "Yo quer¨ªa ir a celebrar A?o Nuevo a ese camping, pero no fuimos porque estaba lleno. Mi hija tiene 15 a?os, s¨®lo uno m¨¢s que esa pobre chica. Ahora lo pienso y... ", dice, sin encontrar las palabras que definan ese temor que masca rodeada de peri¨®dicos con la agresi¨®n sexual en portada.
Los hechos denunciados sucedieron dentro de los l¨ªmites de Miramar, una peque?a ciudad de playa de 30.000 habitantes en la que se refugian muchos marplatenses que huyen de las aglomeraciones del verano austral. Al igual que Camila, quien prefiere no dar su apellido, los cinco acusados y la presunta v¨ªctima son de Mar del Plata. La noticia golpe¨® a esta ciudad costera en el arranque de la temporada de vacaciones, durante un fin de semana largo en el que llegaron unos 230.000 turistas, solo una peque?a parte de los m¨¢s de cuatro millones que recibir¨¢ cuando haya terminado el verano. Tras varios d¨ªas de lluvias, muchos vecinos est¨¢n m¨¢s pendientes del pron¨®stico meteorol¨®gico que de las noticias, pero se indignan al hablar del caso. "?C¨®mo pudieron hacer algo as¨ª? Espero que se pudran en la c¨¢rcel", responde Manuel Briano desde su peque?o almac¨¦n. Los cinco sospechosos han sido escrachados en las redes sociales y sus perfiles se han llenado de cientos de insultos y de peticiones de justicia.
Se trata de Lucas Pitman, de 21 a?os, Tom¨¢s Agust¨ªn Jaime (23), Juan Cruz Villalba (23), Manuel D¨ªaz (23) y Roberto Costa (21). Est¨¢n detenidos desde el 1 de enero acusados de abuso sexual con acceso carnal agravado, un delito con penas de entre 8 y 20 a?os de c¨¢rcel. Seg¨²n la reconstrucci¨®n difundida por los medios, son j¨®venes de clase media, a los que unen aficiones como el surf y el rugby. Este grupo de amigos lleg¨® al camping El Durazno en una furgoneta para celebrar la Nochevieja e instal¨® una tienda de campa?a en la que presuntamente ocurri¨® la violaci¨®n de la menor. Despu¨¦s de buscarla por todo el recinto, la madre de la adolescente la encontr¨® junto a ellos y alert¨® al padre, quien llam¨® a la polic¨ªa y las acompa?¨® a la comisar¨ªa para denunciar el abuso.
Briano, como muchos otros, tiene dudas de que los responsables sean castigados. "Si hay dinero de por medio los van a encubrir, as¨ª funciona ac¨¢", comenta Lucas Giovanni, taxista de 50 a?os. "Mir¨¢ lo que pas¨® con Luc¨ªa P¨¦rez, los absolvieron. Es un esc¨¢ndalo, pero es as¨ª", coincide con ellos Camila, en referencia a una adolescente de 16 a?os muerta hace un a?o y medio. La fiscal sostuvo que P¨¦rez fue drogada y violada hasta la muerte. Los jueces, en cambio, dictaminaron que muri¨® de sobredosis y tuvo relaciones sexuales consentidas, por lo que absolvieron a los dos imputados de los cargos por abuso sexual.
La madre de P¨¦rez, Marta Montero, particip¨® este jueves en una marcha en Miramar para exigir justicia por el caso. Durante la concentraci¨®n, Montero acus¨® a los jueces de haber recibido dinero a cambio de la "vergonzosa" sentencia por la muerte de su hija, que ha sido recurrida. "Como pa¨ªs nos han dejado de la forma m¨¢s retr¨®grada y antigua, como una justicia de hace 50 a?os atr¨¢s", asegur¨® Montero. Acudi¨® a la marcha acompa?ada de su marido y con una imagen de su hija colgada del pecho. "Cuando nosotros empezamos el juicio la condena ya estaba escrita. Ya estaban comprados estos jueces", asegur¨®.
Conscientes de la sensibilidad que despierta este tema, las autoridades provinciales desplazaron de forma fulminante al polic¨ªa a cargo de la investigaci¨®n. Argumentaron que no hab¨ªa actuado con rapidez en las horas inmediatas a los hechos denunciados, claves para preservar la escena del crimen y recabar evidencias.
La Fiscal¨ªa, por su parte, mantiene en reserva la identidad de la v¨ªctima por su condici¨®n de menor. S¨®lo se sabe que recibe atenci¨®n psicol¨®gica y que en los pr¨®ximos d¨ªas declarar¨¢ en c¨¢mara Gesell. La fiscal Florencia Salas tampoco ha confirmado los detalles que han trascendido de las declaraciones de Pitman, Jaime, Villalba, D¨ªaz y Costa el mi¨¦rcoles ante el juez. Al parecer, dos de los acusados admitieron haber mantenido relaciones sexuales con la menor, pero aseguraron que fueron consentidas. El informe m¨¦dico preliminar les juega en contra: se hallaron lesiones vaginales compatibles con abuso sexual. Incluso con su consentimiento, por tratarse de una menor de entre 13 y 15 a?os, la legislaci¨®n argentina prev¨¦ penas de entre 3 y 10 a?os si se demuestra que los adultos se aprovecharon de la inmadurez sexual de la adolescente.
Mientras los sospechosos declaraban ante el juez, los familiares de los detenidos se enfrentaron a los medios de comunicaci¨®n presentes. "Los quiero ver ac¨¢ cuando la Justicia diga que es mentira. Son una mierda", grit¨® uno de los padres. Otro arroj¨® un argumento pol¨¦mico: "Con los que tienen que hablar son con los padres de la nena que la salieron a buscar a la madrugada despu¨¦s de no saber nada de ella".
La fiscal y el juez tendr¨¢n los resultados de los an¨¢lisis gen¨¦ticos la pr¨®xima semana. Junto a las declaraciones testimoniales y a las dem¨¢s pericias ordenadas, como el an¨¢lisis de las comunicaciones telef¨®nicas, ser¨¢n claves para esclarecer qu¨¦ ocurri¨® la madrugada de A?o Nuevo y determinar responsabilidades.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.