El Chicle ide¨® un lastre infalible para asegurarse de que Diana no emergiese
La acusaci¨®n cree que, tras errar en el primer intento, perfeccion¨® el mecanismo con dos bloques de adobe y un cable de red. La defensa trata de sembrar dudas sobre la investigaci¨®n
Al final del pozo de 10 metros de profundidad en el que apareci¨® el cuerpo de Diana Quer, despu¨¦s de dragarlo, se recuperaron unos cuantos objetos que ayudaron a los investigadores a perfilar su dibujo del suceso. Hab¨ªa dos tramos de cinta adhesiva, tres trozos de bridas de pl¨¢stico, el tanga, unos auriculares y el bolso de Yves Saint Laurent de la v¨ªctima, un bloque de cemento y otros dos m¨¢s grandes, de adobe, unidos por un cable de la luz. En la superficie del agua, mientras tanto, flotaban dos botes, de desodorante Dove y de otro producto cosm¨¦tico, probablemente escapados del bolso abierto. Diana estaba completamente desnuda, flotando a unos 50 cent¨ªmetros del fondo de arena y limo y asegurada con un lastre de 18,4 kilos de peso. Ese lastre result¨® ser un ingenio infalible para mantener oculta durante casi 500 d¨ªas a la turista madrile?a de 18 a?os desaparecida de A Pobra do Carami?al (A Coru?a) el 22 de agosto de 2016.
El invento contaba con dos bloques de adobe como el otro par que apareci¨® en el fondo. Y esta vez los enormes ladrillos tambi¨¦n estaban unidos por un cable pasado por sus agujeros, aunque mucho m¨¢s recio, grueso y largo, propio de una instalaci¨®n "de red" inform¨¢tica, "de transmisi¨®n de datos" o "de un sistema de alarma". La acusaci¨®n cree que, tras arrojar el cad¨¢ver al pozo y comprobar que flotaba, Jos¨¦ Enrique Abu¨ªn Gey trat¨® varias veces de hundirlo con pesos. Los primeros dos bloques unidos por un fino cable el¨¦ctrico probablemente no funcionaron, no quedaron enganchados en el cuerpo al lanzarlos al agua y cayeron al fondo.
As¨ª que a los segundos, con el propio cable con el que los uni¨®, de nueve metros de largo, El Chicle les confeccion¨® unas asas que, seg¨²n uno de los guardias civiles que llevaron a cabo la primera inspecci¨®n ocular, le sirvieron para "controlar" la bajada de los bloques hasta la altura donde flotaba el cad¨¢ver. De esta manera, cuando estaban a la altura de la cintura de la v¨ªctima, al soltar los pesos por los laterales de su espalda, los bloques se hundieron r¨¢pidamente hasta tocar el fondo y el cable que los un¨ªa se desplaz¨® hasta las axilas y arrastr¨® con ¨¦l a la muchacha.
Tanto la Fiscal¨ªa como la acusaci¨®n particular, ejercida por los padres de Diana Quer, defienden que esta maniobra El Chicle no la llev¨® a cabo la misma noche en que mat¨® a la chica, sino unos 20 d¨ªas despu¨¦s. Es (mientras no avancen las sesiones del juicio con la llegada de peritos como el entom¨®logo y los forenses) una inc¨®gnita la raz¨®n en la que se basan para defender que la secuencia completa no se produjo en la madrugada del 22 de agosto. El Chicle sostiene que arroj¨® a su v¨ªctima y la lastr¨® de una sola vez, y que cuando cerr¨® el registro del pozo, una pesada tapa cuadrada de hormig¨®n de 45 cent¨ªmetros de lado, la muchacha segu¨ªa flotando.
El primer d¨ªa, en su declaraci¨®n, Abu¨ªn tambi¨¦n dijo que todos los cables utilizados los hab¨ªa obtenido "arranc¨¢ndolos" de la propia nave industrial de Asados (Rianxo) en cuyo s¨®tano se encuentra el aljibe de agua dulce que eligi¨® como sepultura para la joven. La Guardia Civil inspeccion¨® las instalaciones de la f¨¢brica abandonada y no pudo llegar a esa conclusi¨®n: "El cable de red viene marcado con los metros que mide", ha explicado esta ma?ana en la quinta sesi¨®n del juicio un agente del equipo de Criminal¨ªstica. "El que lastraba el cuerpo de Diana" empezaba en el metro 33.216, ha detallado el guardia civil, mientras que el usado en las instalaciones de la nave marcaba "unos 3.000 menos". El desfase de tres kil¨®metros de cable, que adem¨¢s no estaba arrancado, sino "cortado" por sus extremos, es un ingrediente m¨¢s que sirve a la acusaci¨®n para desmentir al hombre de 43 a?os al que atribuyen el rapto, el asesinato y la violaci¨®n de la turista madrile?a.
Una brida "sin vuelta atr¨¢s"
Aparte del lastre, el otro asunto en torno al que han girado las preguntas a los dos guardias civiles que han declarado este lunes ha sido la brida pl¨¢stica, de color negro, de ocho mil¨ªmetros de grosor y unos 60 cent¨ªmetros de largo que emergi¨® enredada en el cabello de la v¨ªctima. Se trata de un dispositivo "de un solo uso", de esos que cuando se cierran "ya no tienen vuelta atr¨¢s", ha especificado un investigador. El latiguillo hallado estaba cerrado, dejando un extremo sobrante de unos 37 cent¨ªmetros y formando una circunferencia con el resto. Esta oquedad tan angosta es la que, para la acusaci¨®n, caus¨® la muerte por estrangulamiento de Diana. Su forma "redonda", pr¨¢cticamente "perfecta", "se?ala que estaba abrazando el cuello de Diana", ha llegado a afirmar esta ma?ana un agente despu¨¦s de asegurar que, si no apretase nada, el hueco ser¨ªa "m¨¢s bien ovalado".
El estado en el que se hallaba el cad¨¢ver provoc¨® que, durante el levantamiento, se desprendiera el cr¨¢neo, de ah¨ª que la abogada de la defensa, Mar¨ªa Fernanda ?lvarez, mantenga que no se puede probar que esa correa pl¨¢stica apret¨® alguna vez el cuello de la joven. Para evitar una condena de prisi¨®n permanente revisable, El Chicle se aferra a que la muerte fue un homicidio involuntario ("accidental", dijo), no un asesinato, que se produjo cuando presion¨® m¨¢s de lo que pretend¨ªa la garganta de una v¨ªctima a la que, seg¨²n su testimonio, jam¨¢s viol¨®.
A diferencia de los otros fragmentos de brida encontrados en el fondo del pozo, la supuesta arma homicida sali¨® a la luz enredada en la melena larga y oscura del cad¨¢ver. El buzo que se sumergi¨® para recuperar los restos mortales explic¨® el pasado viernes que con el cr¨¢neo, apareci¨® "una zona de cuero cabelludo y cabello". Esos mechones "estaban dentro de la brida y tambi¨¦n la rodeaban", han confirmado este lunes otros dos miembros del instituto armado.
Pero este equipo de Criminal¨ªstica no se hizo cargo de la cadena de custodia de la brida cuando se retir¨® del escenario del crimen. Su intervenci¨®n se limit¨® a fotografiarla, y la prueba pas¨® en aquel momento a manos de los forenses junto con el cad¨¢ver. El hecho de que en un informe judicial se insista varias veces en que la brida med¨ªa "cinco cent¨ªmetros" de anchura y que la fotografiada por la Guardia Civil mida en realidad ocho ha sido utilizado este lunes por la abogada de Abu¨ªn para desacreditar la investigaci¨®n.
En la misma l¨ªnea, ha criticado otros muchos detalles, como que no se llegasen a analizar los dos fragmentos de cinta adhesiva de unos 50 cent¨ªmetros de largo con los que se sospecha que Diana Quer fue amordazada y maniatada. El guardia civil que declaraba ha reconocido que se hab¨ªan entregado en el juzgado y que no pasaron por el laboratorio de Criminal¨ªstica, y justific¨® la decisi¨®n en que las cintas estaban "podridas" por efecto del agua del pozo. "Todos sabemos que el drama del planeta es que el pl¨¢stico no se degrada con facilidad", ha reprochado la defensa.
El d¨ªa que Abu¨ªn se adelant¨® al medidor l¨¢ser de la Guardia Civil
A medida que avanzan las sesiones del juicio por la muerte de Diana Quer, y cuando ya solo faltan cuatro d¨ªas para el alegato final, va quedando patente que Jos¨¦ Enrique Abu¨ªn, alias El Chicle, conoc¨ªa al mil¨ªmetro la nave de Asados (Rianxo) donde mantuvo oculto el cuerpo de la joven durante 497 d¨ªas hasta que confes¨®.
Pocos meses despu¨¦s de matar a Diana y arrojar su cad¨¢ver al pozo de agua dulce y fr¨ªa, los propietarios de la antigua f¨¢brica de gaseosas La Pitusa que despu¨¦s se reconvirti¨® en muebler¨ªa encargaron a una empresa de limpieza el vaciado completo de las instalaciones. A nadie se le ocurri¨® entonces mirar dentro del aljibe, pero las plantas del inmueble fueron vaciadas de toda la basura acumulada en un espacio que durante a?os hab¨ªa sido objeto de actos vand¨¢licos y que era continuamente saqueado por personas que sab¨ªan que all¨ª a¨²n se almacenaban armarios, mesas y muchos colchones. El propio Chicle se hab¨ªa llevado madera y muebles varias veces para equipar su casa.
La exhaustiva limpieza industrial fue un obst¨¢culo para la investigaci¨®n, porque supuestamente elimin¨® pruebas del crimen en las dos plantas (baja y s¨®tano) en las que se cree que El Chicle viol¨®, asesin¨® y despu¨¦s arrastr¨® el cuerpo de su v¨ªctima. En un ¨¢ngulo del suelo de cemento, a los pies de una enorme pintada azul en la pared que dice "Eskupe y Eskapa", ¨²nicamente apareci¨® un cuchillo dom¨¦stico, con mango de madera, que de momento no se sabe si est¨¢ vinculado con el suceso.
En las fotos de la reconstrucci¨®n de la Guardia Civil, las grandes estancias aparecen di¨¢fanas, pero en la madrugada del 22 de agosto de 2016, sin luz el¨¦ctrica y en total oscuridad, el acusado se manej¨® para sortear todo tipo de trastos hacinados y para bajar dos tramos de escalera, de 14 y de cuatro pelda?os, respectivamente, hasta el espacio en el que le aguardaba el pozo.
Dos guardias civiles han recordado este lunes que la noche del levantamiento del cad¨¢ver, mientras estaban llevando a cabo la medici¨®n l¨¢ser de aquel s¨®rdido s¨®tano abandonado, Abu¨ªn les hizo un comentario que los impresion¨®. "Si vais a medir lo que hay entre un pilar y otro, ya os lo digo yo: son cinco metros", les asegur¨® el detenido. A continuaci¨®n, los agentes comprobaron las dimensiones. El Chicle hab¨ªa acertado.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.