La presi¨®n social y los rumores sobre el coronavirus ponen en aprietos al Gobierno de M¨¦xico

La presi¨®n social ha obligado al Gobierno mexicano a presentar un dato reclamado durante d¨ªas: el n¨²mero de pruebas diagn¨®sticas realizadas a la poblaci¨®n para detectar el coronavirus desde que se tuvo noticia del primer contagio. El subsecretario de Salud, Hugo L¨®pez-Gatell, ha dicho este viernes que han efectuado 9.100 entre el laboratorio nacional y otros descentralizados y que la adquisici¨®n del material m¨¦dico permitir¨¢ seguir haci¨¦ndolas. La conferencia matutina se ha iniciado este viernes con tintes pol¨ªticos por los rumores que est¨¢n circulando en la red, debido al miedo o la maledicencia, ¡°que desinforman¡± y no contribuyen al sosiego. El Gobierno, que hasta el momento ha confirmado 26 casos positivos en el pa¨ªs, ha apelado a la ¨¦tica en una situaci¨®n como la actual, cuando se espera que el pa¨ªs entre en fase de contagios comunitarios en apenas dos semanas.

La falta de ese dato ha ensombrecido la pol¨ªtica de comunicaci¨®n del Gobierno mexicano sobre el coronavirus, que celebra cada d¨ªa una rueda de prensa o dos si la conferencia matutina del presidente tambi¨¦n se destina a este asunto. En estos encuentros, los periodistas han venido preguntando por el n¨²mero de test efectuados a la poblaci¨®n para rastrear de forma aleatoria la presencia del virus. Ante la ausencia de respuesta en este asunto, se ha extendido la preocupaci¨®n y no faltan quienes le han atribuido al Gobierno ocultaci¨®n de datos. Estados Unidos, con un alto n¨²mero de contagios, tambi¨¦n ha contribuido a consolidar la opini¨®n de que M¨¦xico no pod¨ªa estar libre del virus dada la situaci¨®n de su vecino.

L¨®pez-Gatell ha tratado esta ma?ana a atajar esas creencias con algunas comparativas internacionales. Adem¨¢s de detallar que se han efectuado pruebas desde enero en las unidades donde se vigila la influenza, ¡°con sondeos semanales, sin que se hayan encontrado casos¡±. Tambi¨¦n ha asegurado que se han efectuado controles entre los que presentaban afecciones respiratorias en unidades de seguimiento intensivo y en centros de salud ordinarios, donde ya existe una red de vigilancia para la gripe desde 1970. Pero en este asunto as¨ª como en la disponibilidad de insumos m¨¦dicos para estos controles no hay una informaci¨®n tan precisa como en otros cap¨ªtulos.

¡°No es sorpresa que Estados Unidos tenga m¨¢s casos pues su relaci¨®n comercial con pa¨ªses como China o con Europa es m¨¢s intensa¡±, ha dicho el subsecretario. En todo caso, ha reconocido que el tr¨¢nsito del virus es esperable en M¨¦xico de norte a sur, por tanto se vigilar¨¢ especialmente esa ¨¢rea del pa¨ªs.

Espa?a tambi¨¦n le ha servido de ejemplo, por los dos casos reconocidos de coronavirus que tuvo durante semanas, hasta que se desat¨® la crisis. ?Pero cu¨¢ntos test se hicieron en ese tiempo en Espa?a?, han insistido los periodistas. En Espa?a no se han dado cifras sobre eso. Hubo al inicio controles laxos respecto a los casos sospechosos, es decir, aquellos que presentaban s¨ªntomas y hab¨ªan viajado a pa¨ªses de riesgo, como China. Solo despu¨¦s del estallido del virus en Italia se ampliaron las muestras entre aquellos que ten¨ªan neumon¨ªa de origen desconocido y ah¨ª ya fueron apareciendo casos que indicaban un contagio dentro de las propias fronteras. Los criterios para considerar casos sospechosos han ido cambiando y ampli¨¢ndose. ¡°Espa?a ha documentado dos ¨²nicos casos durante d¨ªas y nadie habl¨® de sospechas¡±, se ha defendido Gatell.

Ante la dispersi¨®n de noticias, en muchos casos falsas, el Gobierno se ha visto este viernes en la necesidad de ampliar los canales de comunicaci¨®n con la ciudadan¨ªa. Han anunciado que emitir¨¢n videos y audios que, eventualmente, podr¨¢n competir con los datos err¨®neos o malintencionados que se difunden en la red. Tambi¨¦n han acordado con el sistema p¨²blico de radiodifusi¨®n y pedido ayuda a los medios de comunicaci¨®n para mantener las noticias en el ¨¢mbito cient¨ªfico.

No es el ¨²nico obst¨¢culo con el que pelean estos d¨ªas. Hay instituciones haciendo la guerra por su cuenta, como es la Universidad Nacional Aut¨®noma de M¨¦xico (UNAM) que el jueves hablaba de fase 2 (el Gobierno a¨²n no la ha declarado) y anunciaban la suspensi¨®n de algunos encuentros masivos. O el Tecnol¨®gico de Monterrey, desde donde se anticipaba el fin del ciclo escolar y la suspensi¨®n de actividades. La Corte penal tambi¨¦n anunci¨® hace unas semanas medidas similares. ¡°Y el Congreso exhort¨® a declarar el estado de emergencia y a hacer lo que ya estamos haciendo¡±. L¨®pez Gatell ha reconvenido sutilmente a todos ellos y ha recordado que hay medidas que desgastan a la poblaci¨®n antes de tiempo, como la anulaci¨®n de citas multitudinarias. ¡°Si se aplican cuando no sirven, el d¨ªa que hay que aplicarlas la econom¨ªa se habr¨¢ resentido y la sociedad ya no las aplicar¨¢¡±, ha dicho. ¡°El miedo tambi¨¦n contagia y esto es un reto de salud p¨²blica¡±. ¡°Ojo con cancelar eventos sin base t¨¦cnica¡±, ha advertido. No se ha mostrado contrario a suspender algunas reuniones masivas si no afectan al devenir econ¨®mico o social y si se pueden posponer sin problemas.

El Gobierno tambi¨¦n se ha reunido con la Iglesia para modificar sus pr¨¢cticas rituales, ¡°el tema de la homil¨ªa y estas cosas¡±, y con empresas inform¨¢ticas para tratar de frenar los rumores, as¨ª como aerol¨ªneas. Con Aerom¨¦xico han acordado hacer test a los viajeros antes de salir del pa¨ªs para evitar contagios en otras zonas del mundo.

Los rumores pseudocient¨ªficos o directamente la superstici¨®n es algo que en M¨¦xico est¨¢ muy presente. No hay mercadillo que no tenga un amplio surtido de hierbas del campo a las que se les atribuyen p¨²blicamente curas y remedios de toda clase: para la bronquitis, los ri?ones, las migra?as, los dolores menstruales o el c¨¢ncer, sin que haya habido pol¨ªticas p¨²blicas que impidan esta pr¨¢ctica enga?osa. Los periodistas preguntaban este viernes en la rueda de prensa si ninguna vitamina ayuda a paliar el coronavirus porque se han extendido las bondades de la vitamina C. ¡°Ninguna¡±, ha contestado el subsecretario.

La Unidad de Inteligencia epidemiol¨®gica tratar¨¢ de combatir ahora estos rumores con informaci¨®n cient¨ªfica, pero quiz¨¢ llega un poco tarde.