Sin rastro del virus en estas calles
Cientos de pueblos se mantienen sin ning¨²n vecino contagiado de covid tras cinco meses de pandemia
A pesar de la oleada de brotes que inunda la nueva normalidad, en Espa?a a¨²n hay pueblos ajenos al coronavirus. Son localidades que resisten sin casos positivos, a resguardo de la expansi¨®n de la pandemia. Extremadura tiene un 30% de municipios sin contagiados (118 de 388), Andaluc¨ªa (189 de 786 municipios) y la Comunidad Valenciana (139 de 542) mantienen la cuarta parte de sus localidades ajenas al virus, seguidas de Asturias (16 de 78, un 20%), Catalu?a (166 de 947, un 18%), Galicia (26 de 313, un 8%) y Madrid (13 de 179, un 7%), gracias a una mezcla de factores: una compleja orograf¨ªa y una escasa actividad tur¨ªstica y econ¨®mica, que se suman a la tard¨ªa penetraci¨®n de la enfermedad en ciertos territorios.
En el extremo opuesto, con la covid-19 copando cada pueblo, destacan el Pa¨ªs Vasco, cuyos 251 municipios tienen vecinos contagiados, mientras que Castilla y Le¨®n tiene casos positivos en sus 248 zonas b¨¢sicas de salud, sin excepci¨®n alguna. No todas las regiones han recopilado sus datos por municipios o comarcas, o algunas lo han hecho solo a partir de mayo, lo que invalida la comparativa.
?A qu¨¦ se debe que ciertas zonas resistan el avance del pat¨®geno? ¡°El primer factor es la llegada del virus: cuanto m¨¢s tarde, m¨¢s conciencia de la gravedad de la situaci¨®n tienen los vecinos. Es una suma de factores, pero tambi¨¦n ha influido la reacci¨®n de las autoridades locales, hubo algunos alcaldes que se lo tomaron como una cuesti¨®n personal y potenciaron las medidas de higiene y prevenci¨®n¡±, razona Ildefonso Hern¨¢ndez, portavoz de la Sociedad Espa?ola de Salud P¨²blica y Administraci¨®n (SESPAS). ¡°?Realmente est¨¢n libres de covid o no se han detectado casos por ausencia de PCR? La ¨²nica manera de mantener a raya el virus es evitar las concentraciones, fiestas y verbenas, donde corra el alcohol¡±, plantea Jes¨²s Molina, de la Sociedad Espa?ola de Medicina Preventiva, Salud P¨²blica e Higiene (SEMPSPH).
Porque con fiestas o sin ellas, la infecci¨®n se expande poco a poco y el cerco se va cerrando: Andaluc¨ªa ha pasado en la ¨²ltima semana de 198 a 189 pueblos sin rastro de covid, que representan 165.000 habitantes, el 2% de su poblaci¨®n de 8,4 millones.
En la administraci¨®n de loter¨ªa de Canillas de Aceituno (M¨¢laga, 1.677 habitantes) la suerte se reparte cada d¨ªa. Es la que buscan quienes compran sus boletos a diario o sue?an que la Navidad traiga de nuevo premios al pueblo, como hizo en 2007 y 2015. El azar es tambi¨¦n uno de los motivos por los que, seg¨²n sus vecinos, la covid-19 ha pasado de largo. Las estad¨ªsticas marcan un cero en su casilla de casos positivos. ¡°Crucemos los dedos para que sigamos as¨ª¡±, dice la vecina Sandra P¨¦rez. Pero esta localidad, como todas las cercanas, tambi¨¦n ha hecho sus sacrificios para contener la pandemia: la piscina municipal est¨¢ clausurada, igual que las pistas deportivas y el gimnasio p¨²blico. Las fiestas y verbenas veraniegas han sido canceladas. El ocio queda restringido a paseos por el campo y noches a la fresca junto a las casas. ¡°Son medidas dr¨¢sticas y un gran esfuerzo para nuestros vecinos, pero no podemos arriesgarnos¡±, dice Vicente Campos, el alcalde.
En M¨¢laga hay 28 municipios que suman 19.000 vecinos sin casos positivos. La mayor¨ªa, en dos ¨¢reas concretas: el Valle del Genal y La Axarqu¨ªa, justo donde se encuentra Canillas de Aceituno. Su entorno es una sucesi¨®n de campos de mango y aguacate, que van ganando terreno al olivar y a vi?edos en lomas que parecen imposibles de vendimiar. La playa se ve en el horizonte, pero est¨¢ a media hora de camino, en V¨¦lez-M¨¢laga, que registra 200 casos confirmados. ¡°Junto al mar hay m¨¢s gente, por eso este a?o hemos elegido un pueblo¡±, dice el franc¨¦s Christophe Roger en un buen espa?ol. Frente a la oficina de informaci¨®n de la que acaba de salir este turista hay una fuente levantada en 1712. Tambi¨¦n cuatro jubilados que, con mascarilla y a distancia, charlan a la sombra en la Plaza de la Constituci¨®n. ¡°Ser¨¢ el abrigo de la sierra, yo qu¨¦ s¨¦. Pero aqu¨ª no hemos hecho nada especial para que el virus no entre¡±, dice Juan. ¡°Como alguno venga con el virus, ser¨¢ peligroso: la poblaci¨®n est¨¢ muy envejecida¡±, a?ade Amparo Acu?a, responsable del centro Guadalinfo de la localidad (red p¨²blica andaluza que da acceso a Internet y competencias digitales, sobre todo en zonas rurales).
Las 80 curvas de la carretera que ascienden hasta Canillas de Aceituno son 80 razones que dificultan la llegada del coronavirus. La v¨ªa es un para¨ªso para ciclistas y una tortura para los conductores. Sin embargo, los propios vecinos desmontan el mito del aislamiento: ¡°Cada d¨ªa hay repartidores, proveedores, mucha gente que va a la playa, emigrantes de Barcelona y Arag¨®n que han venido en verano a ver sus familias¡¡±, aseguran en una improvisada charla varios de ellos en la calle, donde insisten en que ¡°hay movimiento, pero no aglomeraciones¡±. Esa incomunicaci¨®n es la que buscaron con barreras f¨ªsicas algunos municipios de C¨¢diz, como Setenil de las Bodegas, que ech¨® tierra en sus accesos por carretera, algo que no le ha librado de tener seis casos de coronavirus. Otros, como Zahara de la Sierra, donde pusieron vallas y cadenas, s¨ª han conseguido esquivar la pandemia. De vuelta a M¨¢laga, Alozaina, donde instalaron un arco desinfectante para veh¨ªculos, ha registrado cuatro positivos.
A 11 kil¨®metros al oeste de Canillas de Aceituno, a trav¨¦s de la ruta del aceite y los montes, se encuentra La Vi?uela. Con 2.034 habitantes, es el mayor municipio de M¨¢laga sin contagios. Su casco urbano est¨¢ dividido en dos. En el nuevo, los vecinos hacen cola de manera ordenada, manteniendo las distancias y conversando con mascarillas ante el cajero autom¨¢tico o el centro de salud. En el antiguo, las calles est¨¢n vac¨ªas, como si hubiera vuelto el confinamiento. ¡°Hay m¨¢s movimiento del que parece¡±, dice Iv¨¢n G¨®mez desde la carnicer¨ªa de los hermanos Serrano Hijano. Casi la mitad de la poblaci¨®n ¨Del 44%¨D es extranjera, principalmente brit¨¢nicos, muchos de los cuales han visitado el Reino Unido en los ¨²ltimos meses. ¡°Pero est¨¢n muy sensibilizados y, como la gente del pueblo, siguen cumpliendo todas las medidas con bastante seriedad¡±, afirma Jos¨¦ Juan Jim¨¦nez, regidor de La Vi?uela, que subraya que es ¡°un compendio de circunstancias¡± las que han conseguido que el municipio no tenga casos positivos por covid. ¡°Al menos, de momento, estamos limpios¡±, sentencian Marta y Juan, jubilados que se resguardan del calor en el interior del restaurante La Vi?a con la esperanza de que lo m¨¢s cerca que tengan la pandemia sea en la televisi¨®n.
Con informaci¨®n de Mikel Ormazabal, Juan Navarro, Ignacio Zafra y Juan Jos¨¦ Mateo.
Pi?or, la f¨¢brica de f¨¦retros del estado de alarma, mantiene su coraza anticovid
Hace unos d¨ªas, los vecinos de Pi?or (Ourense), temieron haber perdido su envidiable coraza anticoronavirus. Unos j¨®venes del pueblo tuvieron que confinarse de forma preventiva en su casa por formar parte de una pandilla, del municipio cercano de O Carballi?o, en la que se detectaron cuatro positivos. El alcalde, Jos¨¦ Luis Gonz¨¢lez (PP), cuenta que entre los 1.176 habitantes de esta localidad famosa en Espa?a por basar su econom¨ªa en la fabricaci¨®n de ata¨²des, con nueve factor¨ªas, cundi¨® "la preocupaci¨®n por los chavales", pero tras las pruebas PCR, "result¨® que no estaban infectados".
Pi?or sigue presumiendo de ser uno de los 26 municipios de Galicia sin casos detectados desde el principio de la pandemia. Y esto, a pesar de que la actividad industrial se dispar¨® hasta desbordar a las empresas de cajas mortuorias durante lo m¨¢s duro de la primera curva. Las importaciones de ata¨²des chinos (que desde hace a?os pulverizaron el sector con sus bajos precios) se hab¨ªan parado, y las funerarias y aseguradoras se abalanzaron sobre Pi?or para hacer acopio.
El continuo trasiego de camiones llegados de toda Espa?a para recoger f¨¦retros cuando las muertes se multiplicaban en residencias y hospitales no logr¨® que el virus prendiera en el pueblo. En algunas factor¨ªas prohibieron la entrada a todos los forasteros, y en casi todas obligaban a los transportistas a permanecer dentro de la cabina mientras los propios operarios de las f¨¢bricas, pertrechados de mascarillas y guantes, cargaban a toda velocidad las cajas por la parte de atr¨¢s. Los camioneros no pod¨ªan pisar suelo firme mientras no abandonaran los confines de Pi?or.
Estos d¨ªas pasados, para evitar que los chicos confinados tuvieran la tentaci¨®n de salir de casa, seg¨²n cuenta el alcalde, el Ayuntamiento se ofreci¨® "hasta a comprarles tabaco". Mientras tanto, desde tiempos del estado de alarma no se baja la guardia, asegura Gonz¨¢lez, y menos ahora que han venido de vacaciones vecinos que hab¨ªan emigrado a Catalu?a y que el Camino de Santiago, que atraviesa el pueblo, ha recobrado la vida con un continuo goteo de peregrinos. "Muchos de estos llevan la mascarilla de bolso", critica el regidor popular.
La motobomba recorre Pi?or desinfectando los espacios comunes. "La farmacia, el centro de salud, las f¨¢bricas, el Ayuntamiento...", enumera el gobernante local, que cuando empez¨® todo esto dict¨® un bando con su tel¨¦fono m¨®vil para colgarlo por las aldeas, a disposici¨®n de los vecinos, al tiempo que se repart¨ªan "mascarillas y guantes". Durante el confinamiento, una brigada del consistorio y miembros de Protecci¨®n Civil se dedicaron a hacer los recados y a ir ¡°a la carnicer¨ªa, al supermercado, a la farmacia o a buscar los papeles del sintrom¡±, a todos los que lo pidieron. / SILVIA R. PONTEVEDRA / ?SCAR CORRAL (FOTO)
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