De la consulta a la consejer¨ªa
Tras d¨¦cadas como m¨¦dico de familia y docente universitaria, a Ver¨®nica Casado, responsable de Salud de Castilla y Le¨®n, le toca ahora gestionar la pandemia
Ver¨®nica Casado (Reims, Francia, 61 a?os) pasa ¡°entre 12 y 14 horas diarias¡± en su despacho, el de consejera de Salud de Castilla y Le¨®n. El reto es frenar la pandemia en una comunidad extensa y envejecida, a medio camino entre Madrid y el Pa¨ªs Vasco, y donde se multiplican los problemas: en las residencias de ancianos ¡ªm¨¢s de 3.000 fallecidos¡ª , adem¨¢s de por contagios descontrolados hace unas semanas en Le¨®n y Salamanca, y estos d¨ªas en Burgos. Su departamento destaca por su...
Ver¨®nica Casado (Reims, Francia, 61 a?os) pasa ¡°entre 12 y 14 horas diarias¡± en su despacho, el de consejera de Salud de Castilla y Le¨®n. El reto es frenar la pandemia en una comunidad extensa y envejecida, a medio camino entre Madrid y el Pa¨ªs Vasco, y donde se multiplican los problemas: en las residencias de ancianos ¡ªm¨¢s de 3.000 fallecidos¡ª , adem¨¢s de por contagios descontrolados hace unas semanas en Le¨®n y Salamanca, y estos d¨ªas en Burgos. Su departamento destaca por su contundencia: si por ella fuese, admite, habr¨ªan ordenado un confinamiento domiciliario en toda la comunidad hace semanas. Pero el Ministerio de Sanidad no lo permite y la consejera batalla para disponer de esa herramienta jur¨ªdica por si la necesitaran.
La consejera lleg¨® al cargo hace a?o y medio, cuando dijo ¡°s¨ª¡± a la propuesta de Francisco Igea, vicepresidente de la Junta, de Ciudadanos, m¨¦dico como ella, que valor¨® su experiencia m¨¢s que el premio a la mejor m¨¦dico del mundo en 2018. La consejera reconoce que lo medit¨® ¡°much¨ªsimo¡±. Pero le apasionan los retos. El coronavirus ha desbordado la peor de sus previsiones. ¡°Mi vida es la covid¡±, sentencia la l¨ªder de un equipo ¡°maravilloso¡± que bromea con el ¡°horario de panadero¡± que sufren para intentar abarcarlo todo.
La principal cr¨ªtica recibida radica en la gesti¨®n de las residencias. M¨¢s de 3.000 usuarios de centros sociosanitarios de Castilla y Le¨®n han fallecido por covid-19. De ellos, casi dos tercios fallecieron en las propias residencias. El Gobierno defendi¨® que se les tratara en esos centros y no en hospitales para no colapsarlos. Las 191 p¨¢ginas del informe elaborado por el ¨¢rea de Familia sustentan lo ocurrido en ¡°la dimensi¨®n de la pandemia¡±. Al menos 6.100 personas han muerto por coronavirus en la regi¨®n, incluyendo a quienes ten¨ªan s¨ªntomas compatibles. Este martes la covid se llev¨® a 47 castellanoleoneses, la mayor cifra en un d¨ªa en la segunda ola. Casado apunta a la fragilidad del territorio m¨¢s envejecido, tras Asturias, ubicado entre grandes focos de movilidad: Madrid y Euskadi.
La consejera encara la crisis sanitaria con una trayectoria de m¨¢s de 30 a?os en el gremio de la bata blanca, que comenz¨® en el barrio vallisoletano de Arturo Eryes. Al poco, recal¨® junto a otros colegas en el centro de salud de Parquesol, donde coincidi¨® con Tom¨¢s Mor¨¢n. Este m¨¦dico prepara con caf¨¦ otra jornada maratoniana en unas instalaciones donde se acumulan personas para someterse a PCR, recuerda su pensamiento al conocerla: ¡°Debe de ser muy buena¡±. ?l contaba con buena nota, pero Casado le ganaba. Pronto descubri¨® a una especialista concienzuda, ¡°muy accesible y con muchos conocimientos¡±. Mor¨¢n se asombr¨® cuando conoci¨® su salto pol¨ªtico, pues la ve¨ªa m¨¢s orientada a lo universitario. El perfil de la consejera permite estas dudas: lo mismo preside la Sociedad Espa?ola de Medicina de Familia que imparte clases en la universidad o tutela a los estudiantes en pr¨¢cticas, los residentes. El galeno celebra que una sanitaria ocupe un cargo pol¨ªtico, pero los milagros, a Lourdes: ¡°Seamos realistas, los recursos son los que son. Hab¨ªa que haber actuado hace 15 a?os¡±.
La exinquilina de la consulta 12, madre de una psic¨®loga y con un marido m¨¦dico, complementa sus frases sobre la pandemia con gr¨¢ficos inseparables sobre la gravedad del momento. Su ajetreada rutina ha reducido su ocio a paseos por el campo. Tampoco se separa del m¨®vil cuando hace zumba, lamenta, y aprovecha para destacar los beneficios del deporte. Leer, a?ade, ayuda a desconectar. Antes de dormir, un deseo: ¡°Que esto se acabe ya¡±. Su enfermero est¨¢ ahora mismo contagiado.
La pediatra Lola S¨¢nchez, tambi¨¦n empleada en el centro de salud de Parquesol, cree que el tiempo le ha dado tablas a Casado. S¨¢nchez valora que ¡°conozca la base¡± y su experiencia como administradora, y destaca que, pese a un car¨¢cter ¡°serio¡±, siempre acude a las despedidas de los j¨®venes ¡°resis¡±, m¨¦dicos en pr¨¢cticas. Casado, que en esas fiestas elige refrescos porque no bebe alcohol, se enorgullece de que las distintas promociones la incluyen siempre en la orla: ¡°?Me han puesto un 9,5 de nota!¡±. Sus pupilos en pr¨¢cticas ensalzan su exigencia, no apta para holgazanes. Pedro Casta?o y Beatriz Rico, de 28 a?os, la acompa?aron seis meses, siempre con ¡°un alto nivel de velocidad y concentraci¨®n¡±, pero ¡°marcando las distancias¡±. Sergio Garrido, de 27, comenta que en otras rotaciones apenas rellenaban una memoria de tres p¨¢ginas; con ella, cubrieron 60.
Casta?o aplaude sus m¨¦todos, como cuando fing¨ªa ser una anciana con dolencias para que sus alumnos analizaran esos males ficticios: ¡°Hola, soy Amparo, tengo 85 a?os y me duele la tripa¡±. La idea cal¨® y ahora en Parquesol los residentes m¨¢s veteranos act¨²an as¨ª con los m¨¢s j¨®venes. Rico agradece la calma que le trasmiti¨® Casado antes de un importante examen: ¡°Llegu¨¦ nervios¨ªsima, pero me dijo que era una pr¨¢ctica m¨¢s y que sab¨ªa hacerlo perfectamente¡±, relata. Y acert¨®. La responsable sanitaria reconoce a?orar la consulta y asegura pensar frecuentemente en sus pacientes: ¡°?Estar¨¢n bien? ?Seguir¨¢n el tratamiento?¡±.
La consejera tambi¨¦n es art¨ªfice de que la especialidad de medicina de familia haya prosperado en Valladolid. El tercer piso de la facultad, con un peque?o museo anat¨®mico, gan¨® popularidad. Garrido admite risue?o que sus amigos y ¨¦l se turnaban para saltarse alguna clase, pero que estas lecciones eran mucho m¨¢s din¨¢micas que otras asignaturas. M¨¢s serio, afirma que ech¨® en falta que una profesional como ella informara al sector, con franqueza, sobre la escasez de medios en primavera, m¨¢s all¨¢ de comunicados de apoyo. Hubiera preferido m¨¢s sinceridad, insiste, aunque admite que las complejidades de la pol¨ªtica pueden provocar que ¡°tenga las manos atadas¡±. El joven pensaba que su exprofesora no aguantar¨ªa ¡°el politiqueo¡±, pero Casado sigue firme. Su figura representa la postura castellanoleonesa con el virus, mucho m¨¢s restrictiva que otros lugares. La estrategia de confinar r¨¢pidamente municipios con alta incidencia, no obstante, no se demostr¨® plenamente eficaz: Igea reconoci¨® que esa medida no cambi¨® tendencias. Los alcaldes de Palencia o Le¨®n, que sufrieron estos cierres, reclamaron m¨¢s actuaciones del Ejecutivo.
Casado explica que su peor momento fue su ¨²ltimo cumplea?os, el 23 de marzo, en pleno ojo del hurac¨¢n: el mundo se desmoronaba, no sab¨ªan c¨®mo impedirlo y nadie pod¨ªa darle siquiera un abrazo de consuelo. Por eso lucha sin cuartel para volver a los buenos tiempos: ¡°?ramos felices y no nos d¨¢bamos cuenta¡±. Ojal¨¢, pide, recuperar pronto sus escapadas con las amigas a un spa, ideal para aliviar tensiones. Su excompa?era Lola S¨¢nchez asegura que el tes¨®n le sobra a la doctora Ver¨®nica: ¡°Si no hace m¨¢s es porque no puede¡±. Y zanja: ¡°Conoci¨¦ndola¡¡±.
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