Bolivia enfrenta un duro rebrote de la covid-19 sin recurrir a una nueva cuarentena
Las autoridades recogen cad¨¢veres sospechosos de haber contra¨ªdo el virus en calles y viviendas. El Gobierno quiere evitar las restricciones adoptadas en la primera ola
El periodo de alivio y de recuperaci¨®n de la normalidad ha terminado en Bolivia. La covid-19 vuelve a golpear al pa¨ªs andino. En los ¨²ltimos d¨ªas se ha registrado un r¨¢pido aumento de casos: de decenas por d¨ªa a m¨¢s de un millar el 23 de diciembre. Los epidemi¨®logos afirman que la tendencia seguir¨¢ en aumento. Las autoridades gubernamentales hablan de ¡°rebrote¡± y calculan que el aceleramiento de la enfermedad lleg...
El periodo de alivio y de recuperaci¨®n de la normalidad ha terminado en Bolivia. La covid-19 vuelve a golpear al pa¨ªs andino. En los ¨²ltimos d¨ªas se ha registrado un r¨¢pido aumento de casos: de decenas por d¨ªa a m¨¢s de un millar el 23 de diciembre. Los epidemi¨®logos afirman que la tendencia seguir¨¢ en aumento. Las autoridades gubernamentales hablan de ¡°rebrote¡± y calculan que el aceleramiento de la enfermedad llegar¨¢ a un nuevo ¡°pico¡± en febrero. Sin embargo, se niegan a decretar una cuarentena que ser¨ªa rechazada por varios sectores.
Una de las im¨¢genes m¨¢s horribles de la pandemia ha retornado al pa¨ªs: la Polic¨ªa ha estado recogiendo de viviendas, incluso de las calles, cad¨¢veres de personas sospechosas de haber contra¨ªdo el virus. Por lo pronto, son de gente que por alguna raz¨®n no quiso o pudo ir a los hospitales, pues todav¨ªa tienen disponibilidad de camas. Sin embargo, las unidades de terapia intensiva est¨¢n de nuevo cerca de su m¨¢ximo nivel de ocupaci¨®n, as¨ª que pronto habr¨¢ pacientes graves que no puedan ser atendidos. En los ¨²ltimos 14 d¨ªas se han presentado m¨¢s de 5.000 nuevos casos, de los cuales unos 750 se complicar¨¢n, seg¨²n las previsiones.
El presidente Luis Arce, elegido el pasado octubre, se ha reunido con los gobernadores de los nueve departamentos o regiones del pa¨ªs para coordinar un plan de acci¨®n, en un momento en que la delicada situaci¨®n de la econom¨ªa hace muy dif¨ªcil la adopci¨®n de nuevas restricciones a la movilidad de las personas. Arce quiere aumentar la cantidad de pruebas para detectar la presencia del virus, que es considerada insuficiente en todos los estudios sobre la reacci¨®n de Bolivia a la pandemia. Tambi¨¦n ha prometido la importaci¨®n de seis millones de vacunas con vistas al primer cuatrimestre de 2021. El Gobierno destinar¨¢ m¨¢s de 80 millones de d¨®lares a adquirir estas vacunas, que espera comprar de los diferentes laboratorios que las han desarrollado. El Mecanismo de Acceso Mundial a la Vacuna (COVAX) solo permitir¨¢ que Bolivia obtenga, gratuitamente, las dosis necesarias para cubrir al 20% de su poblaci¨®n, que en su conjunto es de 11 millones.
La oposici¨®n ha respaldado los anuncios del Gobierno, aunque se prev¨¦ una tormenta pol¨ªtica si se tiene que esperar las vacunas m¨¢s tiempo del prometido. Arce, que est¨¢ al frente del Gobierno desde el 8 de noviembre, culpa a su antecesora, Jeanine ??ez, de no haber llegado a acuerdos anticipados con los conglomerados productores de los medicamentos. La expresidenta ha replicado que la ¨²nica soluci¨®n realista para proveerse de estos es la plataforma COVAX.
El Gobierno est¨¢ empe?ado en enfrentar el rebrote de la covid sin tener que retornar a las medidas excepcionales, que se decretaron en marzo pasado, y que causaron la peor recesi¨®n que el pa¨ªs haya sufrido en tiempo de paz. Bolivia terminar¨¢ el a?o 2020 con un decrecimiento del 10% del Producto Interno Bruto. En julio, cuando el estado de excepci¨®n estaba en pleno vigor, la tasa de desempleo estaba en 11%, el doble que la de 2019. En los ¨²ltimos meses este indicador ha ido disminuyendo en el mismo ritmo en el que el confinamiento se suavizaba. Se esperaba que en los pr¨®ximos meses se produjese una recuperaci¨®n pronunciada de la actividad econ¨®mica, pero esta puede quedar cortada por la segunda ola.
Una nueva cuarentena ser¨ªa, adem¨¢s, rechazada por los sectores productivos, en particular de los emprendedores, que son la mayor parte de la fuerza de trabajo. Las personas entrevistadas por los medios, a falta de una encuesta reciente, declaran mayoritariamente que se tiene que seguir trabajando y que el cuidado debe ser personal. Las medidas de distanciamiento se han relajado mucho en todas partes, en particular en el ¨¢rea rural, donde nunca fueron significativas. En Santa Cruz de la Sierra y El Alto, las ciudades m¨¢s populosas del pa¨ªs y las m¨¢s golpeadas por el virus, mucha gente ha dejado de usar mascarillas, que faltan incluso en las reuniones de proclamaci¨®n de candidatos para las elecciones municipales y departamentales (regionales) que se realizar¨¢n en marzo, si los contagios no siguen descontrolados. Los pol¨ªticos han dejado de atacarse mutuamente por esta raz¨®n, porque el mal comportamiento es general y no hay distinci¨®n entre ideolog¨ªas.
Una mujer dijo a una televisora local que los bolivianos le perdieron ¡°el miedo a la enfermedad¡±, que ya saben c¨®mo ¡°atenderse a s¨ª mismos¡± con medicamentos como la ivermectina y el di¨®xido de cloro, que no est¨¢n probados cient¨ªficamente pero se encuentran reconocidos como beneficiosos para recuperarse de la covid. Acudir a estas y otras soluciones caseras y apoyarse de forma comunitaria con transfusiones de plasma hiperinmune ha sido la respuesta ciudadana ante las enormes carencias de los servicios de salud p¨²blica. Al menos 140 m¨¦dicos y enfermeros que atend¨ªan pacientes con covid han muerto.