Un conflicto de intereses rodea la recomendaci¨®n de vacunar a los ni?os contra la gripe
Casi todos los miembros del comit¨¦ de la Asociaci¨®n Espa?ola de Pediatr¨ªa que tom¨® la decisi¨®n reconocen relaciones econ¨®micas con los fabricantes de los f¨¢rmacos
La Asociaci¨®n Espa?ola de Pediatr¨ªa (AEP) ha dado este oto?o un salto cualitativo importante en sus recomendaciones sobre la vacunaci¨®n de la gripe. Por primera vez, la sociedad cient¨ªfica llama a vacunar a todos los ni?os de entre seis meses y cinco a?os de edad, una decisi¨®n que ha sido recibida con sorpresa por algunos sectores m¨¦dicos y que llega cuando los ...
La Asociaci¨®n Espa?ola de Pediatr¨ªa (AEP) ha dado este oto?o un salto cualitativo importante en sus recomendaciones sobre la vacunaci¨®n de la gripe. Por primera vez, la sociedad cient¨ªfica llama a vacunar a todos los ni?os de entre seis meses y cinco a?os de edad, una decisi¨®n que ha sido recibida con sorpresa por algunos sectores m¨¦dicos y que llega cuando los organismos reguladores eval¨²an si aprobar o no la vacuna pedi¨¢trica frente al coronavirus.
La propuesta de la AEP va m¨¢s all¨¢ de la posici¨®n del Ministerio de Sanidad, que solo considera necesario (y financia) la vacunaci¨®n de los menores con patolog¨ªas de riesgo o que conviven con personas que las sufren. Las familias que deseen inmunizar a sus hijos deber¨¢n recibir de su pediatra la receta y asumir el coste de la vacuna. Las disponibles cuestan unos 15 euros por dosis y el primer a?o se requieren dos, aunque en los siguientes basta con una. La poblaci¨®n diana asciende a unos 2,3 millones de ni?os. Sociedades cient¨ªficas como la Asociaci¨®n Espa?ola de Vacunolog¨ªa (AEV) y la Sociedad Espa?ola de Salud P¨²blica y Administraci¨®n Sanitaria (Sespas) no comparten la recomendaci¨®n de la AEP y siguen los criterios del ministerio.
Sobre el debate m¨¦dico, abierto desde hace a?os acerca de esta vacuna, planea la controversia en torno a los conflictos de inter¨¦s que surgen cuando sociedades cient¨ªficas emiten recomendaciones que tienen importantes repercusiones econ¨®micas mientras reciben cuantiosas aportaciones de las empresas farmac¨¦uticas beneficiadas por sus posicionamientos. La AEP y su fundaci¨®n recibieron en 2020 un total de 363.000 euros de dos de los mayores fabricantes de vacunas pedi¨¢tricas contra la gripe, GSK y Sanofi. Las dos compa?¨ªas destinaron tambi¨¦n el a?o pasado otros 253.000 euros a otras asociaciones de pediatras regionales y de atenci¨®n primaria.
En este caso, adem¨¢s, los 12 miembros del Comit¨¦ Asesor de Vacunas (CAV-AEP) que ha aprobado la recomendaci¨®n tambi¨¦n admiten haber percibido pagos de la industria en los ¨²ltimos cinco a?os, seg¨²n la declaraci¨®n de intereses incluida en la recomendaci¨®n. Los datos publicados por el sector ofrecen detalles m¨¢s precisos y actualizados: seis de ellos percibieron el a?o pasado entre 5.000 y 14.000 euros de GSK y Sanofi, otros tres cantidades menores (menos de 1.000 euros) y tres m¨¢s ning¨²n importe.
De los 12 miembros del Comit¨¦, todos declaran haber cobrado en los cinco a?os anteriores por participar en ¡°actividades docentes subvencionadas¡± por los fabricantes de vacunas; ocho forman o han formado parte de consejos asesores de las farmac¨¦uticas (en su mayor¨ªa de GSK); seis han contribuido a ensayos o estudios cl¨ªnicos de las compa?¨ªas; y en cuatro casos la relaci¨®n con la industria se limita a haber sido invitados a eventos o cursos de formaci¨®n. Solo uno de ellos deja claro en la declaraci¨®n de intereses que ¡°desde que es miembro del CAV-AEP no ha aceptado patrocinio directo alguno de ning¨²n laboratorio farmace?utico para ninguna actividad¡±.
Ildefonso Hern¨¢ndez, portavoz de Sespas, defiende que ¡°como norma general, no es bueno ni deseable que las sociedades cient¨ªficas hagan recomendaciones de este tipo que van m¨¢s all¨¢ de lo establecido por las autoridades sanitarias porque es algo que genera confusi¨®n entre los ciudadanos y que puede acabar provocando una presi¨®n innecesaria e interesada sobre el sistema sanitario¡±. Este especialista destaca que el asunto ¡°adquiere especial relevancia cuando existen conflictos de inter¨¦s en las personas que elaboran estas recomendaciones¡±.
Abel Novoa, coordinador del grupo de trabajo de bio¨¦tica de la Sociedad Espa?ola de Medicina Familiar y Comunitaria (Semfyc), recuerda que ¡°el objetivo no es impedir la colaboraci¨®n con la industria, sino que exista un buen gobierno es este ¨¢mbito¡±. ¡°Hay muchos ejemplos de instrumentos para que los distintos actores puedan relacionarse sin conflictos de inter¨¦s que puedan poner en duda su imparcialidad. Revistas de prestigio como JAMA, por ejemplo, no dejan que quienes firman los art¨ªculos donde se establecen los protocolos e indicaciones para el manejo de enfermedades tengan conflicto alguno. Otro ejemplo son los comit¨¦s de evaluaci¨®n de posibles conflictos que muchas sociedades cient¨ªficas han desarrollado en otros pa¨ªses, pero no todav¨ªa en Espa?a¡±, concreta.
En una respuesta por escrito, la AEP defiende que sus recomendaciones ¡°est¨¢n basadas siempre en el criterio cient¨ªfico¡± y que ¡°evita el respaldo de las actividades de la industria en las que no se aprecia otro inter¨¦s que el puramente comercial¡±. Sobre los cobros de los miembros del Comit¨¦ Asesor de Vacunas, la AEP sostiene que la relaci¨®n de sus miembros con la industria ¡°est¨¢ sujeta al Marco ?tico de la sociedad¡±, aunque estos especialistas ¡°en el ejercicio de su libertad profesional, pueden participar en otras actividades en calidad de expertos en su materia y a t¨ªtulo personal¡±.
La AEP asegura que ya ten¨ªa previsto recomendar la vacunaci¨®n universal de los ni?os de seis meses a cinco a?os el a?o pasado, pero que decidi¨® esperar porque entonces prioriz¨® ¡°la vacunaci¨®n de personas mayores y de grupos de riesgo¡±. Pese a ello, la sociedad pidi¨® el pasado febrero al Ministerio de Sanidad incluir a los ni?os en el calendario vacunal. Una petici¨®n que no ha sido atendida, pero que la AEP seguir¨¢ ¡°solicitando hasta que lo sea¡±.
Un portavoz de GSK considera que ¡°no tiene sentido deducir que estas colaboraciones condicionan el criterio cl¨ªnico de los profesionales sanitarios¡± y destaca que ¡°la colaboraci¨®n entre la industria farmac¨¦utica, profesionales sanitarios y sociedades cient¨ªficas y m¨¦dicas es particularmente importante¡± para ¡°la investigaci¨®n y el desarrollo de nuevos medicamentos y vacunas, y su uso adecuado¡±. Por su parte, Sanofi sostiene: ¡°Creemos que las interrelaciones entre industria farmac¨¦utica y profesionales sanitarios y organizaciones sanitarias son indispensables y benefician a todos¡±.
La Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) recomend¨® en 2012 la vacunaci¨®n de los ni?os contra la gripe, aunque esta medida ¡ªadoptada poco despu¨¦s de la amenaza pand¨¦mica de la gripe A¡ª no ha sido seguida por muchos pa¨ªses y las coberturas logradas en los que s¨ª lo han hecho son en general bajas.
Aunque la AEP asegura que el Centro Europeo para el Control y Prevenci¨®n de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en ingl¨¦s) tambi¨¦n recomienda esta medida desde ese a?o ¡ªalgunos documentos t¨¦cnicos de esas fechas evaluaban si pod¨ªa ser ¨²til en algunas situaciones¡ª, un portavoz del organismo no lo confirma. ¡°La Uni¨®n Europea y los Estados miembros no han acordado una recomendaci¨®n conjunta sobre la vacunaci¨®n de los ni?os¡±, expone por escrito. Dinamarca, Finlandia, Letonia y algunos Estados alemanes son los ¨²nicos de la Uni¨®n Europea ¡ªadem¨¢s del Reino Unido, que la abandon¨® en febrero de 2020¡ª que tienen programas de vacunaci¨®n universal para la infancia.
Seg¨²n la AEP, ¡°existe evidencia cient¨ªfica suficiente para recomendar la vacunaci¨®n antigripal universal en los ni?os de 6 a 59 meses¡±. Las razones son que esta medida ¡°proporciona al ni?o protecci¨®n individual y favorece la protecci¨®n familiar y comunitaria¡±, ya que ¡°los ni?os preescolares y escolares son los principales difusores de los brotes de la gripe¡±. La tasa de hospitalizaci¨®n de ni?os sanos es de ¡°uno de cada mil casos¡±, a?aden los pediatras.
El Ministerio de Sanidad y otras sociedades cient¨ªficas, por el contrario, piensan que la vacunaci¨®n infantil de ni?os sanos no presenta un balance coste-beneficio favorable dada la escasa gravedad de los cuadros cl¨ªnicos desarrollados por los menores. ¡°Es una vacuna con una efectividad reducida, que protege a cerca de la mitad de quienes la reciben. Est¨¢ indicada en personas para las que la gripe es realmente un riesgo, pero este no es el caso de los ni?os¡±, concluye Jos¨¦ Tuells, coordinador del grupo de trabajo de vacunas de Sespas.