El ¨²ltimo regreso a casa de ¡®La Pirata¡¯ Olivia
La familia de la ni?a supuestamente asesinada por su madre tras obtener el padre la custodia evita rencores y llora la injusticia
Olivia hizo su ¨²ltimo viaje con una almohadita entre las piernas. As¨ª lleg¨® a Oviedo el pasado viernes con su padre, que la dej¨® all¨ª para que pasara el fin de semana con su madre antes de que se mudara definitivamente con ¨¦l, tras lograr la custodia en los tribunales. A Olivia la enterraron este martes en Torrecaballeros (Segovia, 1.400 habitantes) despu¨¦s de que la Polic¨ªa la encontrara la medianoche del lunes muerta sobre la cama en el piso de la capital asturiana en la que viv¨ªa con su progenitora, Noem¨ª Mart¨ªnez. La madre, presuntamente, le suministr¨® un c¨®ctel fatal de barbit¨²ricos. El dolor ha abatido a una familia con ganas de que La pirata, como apodaban a esa ni?a de seis a?os por su afici¨®n a los juegos de piratas, volviera para siempre a casa. El padre, Eugenio Garc¨ªa, llevaba cinco a?os litigando para que los tribunales le concedieran su cuidado. La sentencia lleg¨® la semana pasada. Al hombre lo abrazan sus allegados mientras lo devora la pena e intenta resolver un interrogante: ¡°?Por qu¨¦ ha muerto Olivia?¡±.
Torrecaballeros se ha llenado de dudas y de l¨¢grimas, de sospechas y de abrazos, de adultos que se agarran la mano para resistir los cinco eternos minutos de silencio ante el Ayuntamiento y de ni?os que, incr¨¦dulos, han recibido la peor de las noticias en el puente de Halloween. La hermanastra de Olivia, de unos 10 a?os, pelea contra el llanto con el apoyo de los peluches favoritos de ambas: un cocodrilo verde pistacho y un leoncito gris que estruja contra su pecho. La peque?a no sabe d¨®nde mirar mientras su padre agradece el cari?o de la multitud congregada en el pueblo natal de los abuelos, sacudidos por la noticia en Benidorm (Alicante), donde se encontraban con el Imserso. A las cinco de la ma?ana del lunes los avisaron de lo ocurrido, pero les dijeron que la menor hab¨ªa muerto en un accidente de tr¨¢fico para intentar rebajar el impacto de la verdad. Los abuelos observan desolados las palabras de Eugenio sobre su nieta, esa ¡°pirata que enredaba en el p¨¢del [negocio de su padre en Segovia], era una disfrutona¡±.
La Polic¨ªa lleg¨® al piso avisada por el hermano de la madre, a quien seg¨²n El Comercio la mujer le hab¨ªa enviado el siguiente mensaje: ¡°Antes de dejarla con ¨¦l, la mato¡±. El progenitor explica con entereza las sensaciones que lleva rumiando desde la llamada policial. ¡°No supimos verlo, pero espero haberla podido ayudar al m¨¢ximo todo el tiempo que estuve con ella¡±, solloza el segoviano. ¡°Hoy [martes] es el d¨ªa de Olivia, el odio no lleva a ning¨²n lado y [a la madre] no le guardamos rencor, pero esto no puede volver a pasar porque destroza familias¡±, afirma Garc¨ªa, que pide centrarse en la menor y no desarrollar en p¨²blico detalles de la causa judicial abierta, con la sospechosa detenida pero a¨²n sin ser puesta a disposici¨®n judicial. El lustro de pugna con la acusada hab¨ªa tenido desenlace feliz para ¨¦l, y supuso la promesa que le hizo a la ni?a cuando la recogi¨® el viernes del colegio rumbo a Asturias, donde su madre se hab¨ªa afincado en junio: ¡°Volver¨¢s a casa¡±.
El padre busca consuelo en que al menos su hija descansar¨¢ en su pueblo, abrazada al unicornio que su padre, que se la ¡°com¨ªa a besos en el tanatorio de Oviedo¡±, le coloc¨® entre las manos. Su foto permanece ante el consistorio de la localidad y muestra una ni?a alegre, con gafas rosas y dos coletas que se agitaban cuando correteaba por all¨ª los veranos.
El alcalde del municipio, Rub¨¦n Garc¨ªa, amigo personal de la familia de la v¨ªctima, trata tambi¨¦n de contener el sufrimiento mientras reitera su apoyo a los afectados. ¡°Es una ni?a a la que he visto nacer, no te puedes creer que haya pasado una salvajada as¨ª, con este silencio apoyamos a nuestra pirata desde el respeto y desde la cercan¨ªa¡±, expone el regidor, y pide que la reacci¨®n ¡°llegue hasta donde tenga que llegar para que esto no se pueda repetir¡±. ¡°No han dejado que esta ni?a alegre se convierta en una gran mujer¡±, ha lamentado en un discurso matinal ante el edificio consistorial tras los minutos de silencio.
El duelo ha persistido en Torrecaballeros durante toda la tarde en la que se ha celebrado una misa por la difunta. La iglesia se ha llenado y decenas de personas han asistido en silencio desde el exterior a las oraciones, hasta que a las cinco de la tarde ha salido el f¨¦retro entre la desolaci¨®n de sus allegados. ¡°?Me la han quitado, me la han quitado!¡±, exclamaba la pareja actual de Eugenio, Maricruz Mart¨ªn, mientras un hombre del pueblo, at¨®nito, recog¨ªa en una frase el sentir de la localidad: ¡°Si no lo veo, no lo creo¡±. El coche f¨²nebre donde han trasladado el ata¨²d hacia el cementerio demostraba con sus coronas de flores la gran afici¨®n de Olivia. ¡°Tu familia ¡®pirata¡¯ no te olvida¡±, rezaba la principal, tras el cual se ha formado una comitiva que ha caminado hacia el camposanto desde el templo y ha provocado que se cortara la carretera nacional que conecta Segovia con Soria. La tarde ca¨ªa cuando el grupo, encabezado por el padre y Maricruz Mart¨ªn agarrados de la mano, mientras ella sosten¨ªa el cocodrilo de la peque?a, se ha dirigido al cementerio.
Esta vez ya no hab¨ªa ni?os. Los presentes han escuchado las palabras del padre y de su actual pareja. Esta verbalizaba lo que llevaba sintiendo desde que la pesadilla empez¨®: ¡°?No te olvidaremos!¡±. Eugenio sollozaba un ¡°?Adi¨®s, chiquitina!¡± e, instantes antes de que volvieran los abrazos y la gente regresara a Torrecaballeros, lanzarle su ¨²ltima promesa: ¡°Te prometo que te vamos a hacer justicia¡±.
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