La f¨®rmula 360? que ha cambiado el pron¨®stico del c¨¢ncer de mama y reduce el riesgo de reca¨ªdas
El autocuidado es tan importante como el diagn¨®stico precoz. La iniciativa ¡®Cuenta contigo¡¯, de Lilly con la colaboraci¨®n de FECMA, se dirige a las pacientes que pueden sufrir reca¨ªdas, una de cada cinco diagnosticadas. Promueve la autoconfianza y el autoconocimiento para afrontar la situaci¨®n en la mejor condici¨®n posible. Los m¨¦dicos y las pacientes est¨¢n de acuerdo: la palabra esperanza est¨¢ cada vez m¨¢s presente en el historial cl¨ªnico
El a?o pasado se diagnosticaron 33.000 casos de c¨¢ncer de mama en Espa?a, 90 cada d¨ªa. La cifra, le¨ªda as¨ª, abruma porque muestra la magnitud de la enfermedad. Es el tumor m¨¢s frecuente en las mujeres, pero tambi¨¦n uno de los de mejor pron¨®stico gracias a una f¨®rmula que tiene varios sumandos: cribado de la enfermedad, diagn¨®stico precoz, tratamiento personalizado e investigaci¨®n para seguir avanzando en el conocimiento del tumor y en nuevos tratamientos. El protagonismo de las pacientes, a trav¨¦s de la formaci¨®n y el autocuidado, complementa la f¨®rmula porque el primer apoyo en el c¨¢ncer de mama es la persona que lo sufre. Es as¨ª en cualquier diagn¨®stico, pero especialmente si la noticia es una reca¨ªda.
Miguel Mart¨ªn, jefe del Servicio de Oncolog¨ªa del Hospital Gregorio Mara?¨®n de Madrid, califica el abordaje que se ha hecho del c¨¢ncer de mama desde hace a?os como una historia de ¨¦xito. Al margen de otros factores, lo atribuye a la implicaci¨®n de las mujeres, a su lucha constante: ¡°Esto hace que se puedan investigar nuevos medicamentos, est¨¢n siempre dispuestas a participar en ensayos cl¨ªnicos y nunca tiran la toalla. Son m¨¢s resilientes que los hombres, valoran m¨¢s cada minuto de vida que ganan¡±.
Las mujeres est¨¢n siempre dispuestas a participar en ensayos cl¨ªnicos y nunca tiran la toalla. Son m¨¢s resilientes que los hombres, valoran m¨¢s cada minuto de vida que gananMiguel Mart¨ªn, jefe del Servicio de Oncolog¨ªa del Hospital Gregorio Mara?¨®n (Madrid)
En el ¨¢mbito de la investigaci¨®n, el conocimiento molecular del c¨¢ncer de mama ha sido determinante en los ¨²ltimos a?os porque ha permitido caracterizar mejor los tumores y avanzar en el tratamiento personalizado. As¨ª, dentro del subtipo de c¨¢ncer que representa el 70% de los diagn¨®sticos, conocido como luminal, hay dos entidades cl¨ªnicas muy diferenciadas. Ambos son sensibles a tratamientos hormonales. ¡°Hay uno m¨¢s peque?o, poco agresivo, que habitualmente se opera, no precisa quimioterapia y con tratamiento hormonal suele funcionar bien¡±, explica Josefina Cruz, onc¨®loga del Hospital Universitario Canarias. El segundo tambi¨¦n tiene receptores hormonales que pueden ayudar a los onc¨®logos a controlarlo con tratamiento hormonal, pero la cara que muestra es muy distinta: ¡°Sus c¨¦lulas son m¨¢s agresivas, crecen m¨¢s r¨¢pido y precisan quimioterapia antes o despu¨¦s de operar¡±. Este subtipo, adem¨¢s de ser m¨¢s agresivo, tambi¨¦n registra m¨¢s probabilidades de reca¨ªda.
?Y si el c¨¢ncer reaparece?
Aunque la gran mayor¨ªa de los c¨¢nceres de mama se diagnostican en estadios iniciales, una de cada cinco pacientes sufrir¨¢ una reca¨ªda a lo largo de su vida, gran parte en los dos primeros a?os, pero tambi¨¦n m¨¢s all¨¢ de los cinco, 10 e incluso 15 a?os. Para determinar las probabilidades de que el tumor cobre vida de nuevo, hay una serie de datos cl¨ªnicos como el grado histol¨®gico de la enfermedad, el tama?o del tumor o el n¨²mero de ganglios axilares invadidos. Adem¨¢s, se?ala Miguel Mart¨ªn, ¡°existen las nuevas plataformas gen¨®micas, unas herramientas muy sofisticadas que consisten en el an¨¢lisis del RNA del tumor y que nos van a decir qu¨¦ pacientes tienen buen pron¨®stico y no necesitan un tratamiento agresivo, frente a las que s¨ª tienen mal pron¨®stico y lo necesitan¡±.
La iniciativa Cuenta contigo, puesta en marcha por Lilly en colaboraci¨®n con la Federaci¨®n Espa?ola de C¨¢ncer de Mama (FECMA), se dirige a las pacientes que pueden sufrir reca¨ªdas tras la cirug¨ªa o la quimioterapia, y que la gran mayor¨ªa se corresponden con pacientes con criterios cl¨ªnicos de alto riesgo de recidiva. Su objetivo es promover el conocimiento y el autocuidado para que afronten esa situaci¨®n en la mejor condici¨®n posible. Hay dos recidivas posibles: en la propia mama, con mejor pron¨®stico terap¨¦utico, y en ¨®rganos como el h¨ªgado, el pulm¨®n o el hueso. En el segundo caso, de momento no hay curaci¨®n, pero s¨ª existe la posibilidad de prolongar la esperanza de vida ¡°porque tenemos muchas alternativas y modalidades de tratamiento diferentes¡±, apunta la doctora Josefina Cruz. El proceso vuelve al punto de partida, hay que estudiar el tumor y comprobar si es sensible a hormonas. ¡°Vamos a tratar a la paciente seg¨²n el nombre y apellidos de la enfermedad en ese momento, porque, a veces, los tumores cuando han aparecido inicialmente son de un subtipo y el que aparece en la reca¨ªda puede haber variado¡±, explica la especialista.
Se tiende a que las decisiones terap¨¦uticas sean compartidas entre los equipos de especialistas y las enfermas, y ese clima lo facilita todo. ¡°Sin la confianza que tengo en mi m¨¦dico a d¨ªa de hoy me hubiese costado mucho m¨¢s¡±, asegura la paciente Paula Gonz¨¢lez.
Personalizar la atenci¨®n a las pacientes con c¨¢ncer abarca el tratamiento, pero va mucho m¨¢s all¨¢. Detr¨¢s de cada diagn¨®stico hay una persona con necesidades y requerimientos distintos que precisan una respuesta individualizada. Paula Gonz¨¢lez, miembro de la Federaci¨®n Espa?ola de C¨¢ncer de Mama, recuerda la frase que le dijo una enfermera el primer d¨ªa de tratamiento: ¡°No hay enfermedades, sino enfermos¡±. Esa idea le ayud¨® mucho a asumir un papel protagonista en su enfermedad. Ese es otro de los cambios profundos que ha experimentado la oncolog¨ªa en las ¨²ltimas d¨¦cadas. Ahora se tiende a que las decisiones terap¨¦uticas sean compartidas entre los equipos de especialistas y las pacientes. Es un enfoque que act¨²a como un lubricante, permite crear un clima que lo facilita todo, confiesa Paula. ¡°Sin la confianza que tengo en mi m¨¦dico a d¨ªa de hoy me hubiese costado mucho m¨¢s¡±.
Nuevos retos asistenciales
Uno de los efectos de implicar al paciente todo lo posible en el proceso es que mejora el cumplimiento terap¨¦utico, por ejemplo, una vez superada la fase aguda de la enfermedad. Josefina Cruz se?ala que ¡°hay que insistir en que el tratamiento ayuda a disminuir el riesgo de que el c¨¢ncer vuelva. Hay pacientes que s¨ª, lo llevan m¨¢s a rajatabla, y otras que pueden tener efectos adversos en su d¨ªa a d¨ªa y pueden tener la tentaci¨®n de abandonar el tratamiento¡±.
A Paula Gonz¨¢lez le diagnosticaron el tumor con 28 a?os, edad en la que todav¨ªa no se aplican los programas de cribado de c¨¢ncer de mama, una medida fundamental en la detecci¨®n precoz de la enfermedad, lo que se traduce a su vez en un mejor pron¨®stico. La consecuencia inmediata es que aumenta la supervivencia porque se curan m¨¢s enfermas. Otro efecto menos conocido es que reduce lo que los especialistas denominan ¡®carga terap¨¦utica¡¯ para curar a una paciente. ¡°Si capturamos un tumor en un estadio avanzado aunque todav¨ªa curable, para tratarlo hay que poner quimioterapia, hormonoterapia, radioterapia¡ mientras que si se diagnostica un par de a?os antes, posiblemente pueda curarse solo con terapia hormonal¡±, explica Miguel Mart¨ªn. Adem¨¢s de aumentar las probabilidades de curaci¨®n, un tratamiento menos agresivo reduce las secuelas que pueden llegar a condicionar mucho la vida de las pacientes.
El n¨²mero de mujeres que sobreviven al c¨¢ncer es, afortunadamente, muy elevado, y eso plantea retos asistenciales porque, aunque est¨¢n curadas, tienen necesidades por los tratamientos que han recibido y porque han de pasar revisiones peri¨®dicas. ?Est¨¢n bien cubiertas esas necesidades? La asistencia oncol¨®gica en los hospitales est¨¢ enfocada al tratamiento de las fases agudas, con un seguimiento de cuatro o cinco a?os, pero no m¨¢s all¨¢. En opini¨®n de los onc¨®logos, ser¨ªa necesaria una buena conexi¨®n de los servicios especializados con la medicina primaria para que las pacientes recibieran una atenci¨®n integral. En palabras de Miguel Mart¨ªn, ¡°para lograrlo necesitamos que los m¨¦dicos de primaria est¨¦n seguros de que en cualquier momento pueden conectar con el hospital para resolver cualquier asunto relativo a una paciente y no se les cargue con una responsabilidad que puede llegar a resultar abrumadora¡±. Lograrlo completar¨ªa la f¨®rmula que ha cambiado la perspectiva del c¨¢ncer de mama.