Facturas de miles de euros tras enfermar en el extranjero y no tener seguro: ¡°Perd¨ª todo lo que ten¨ªa ahorrado por estupidez¡±

Javier Sampedro pide que quede muy claro que si perdi¨® todo el dinero que ten¨ªa ahorrado en un tratamiento hospitalario en M¨¦xico fue por pura ¡°estupidez¡±. ¡°Ni se me hab¨ªa ocurrido que algo pudiera pasar, as¨ª que no pens¨¦ en contratar un seguro. Estuve ingresado lo m¨ªnimo para poder empaquetarme a m¨ª mismo en un avi¨®n y volver a Espa?a. Me cobraron literalmente hasta por respirar, porque el ox¨ªgeno que necesit¨¦ est¨¢ incluido en una factura que supera los 30.000 euros¡±, relata. Sampedro, de 63 a?os, se dio de bruces con el verdadero coste que puede tener una enfermedad, algo que se suele olvida...

Javier Sampedro pide que quede muy claro que si perdi¨® todo el dinero que ten¨ªa ahorrado en un tratamiento hospitalario en M¨¦xico fue por pura ¡°estupidez¡±. ¡°Ni se me hab¨ªa ocurrido que algo pudiera pasar, as¨ª que no pens¨¦ en contratar un seguro. Estuve ingresado lo m¨ªnimo para poder empaquetarme a m¨ª mismo en un avi¨®n y volver a Espa?a. Me cobraron literalmente hasta por respirar, porque el ox¨ªgeno que necesit¨¦ est¨¢ incluido en una factura que supera los 30.000 euros¡±, relata. Sampedro, de 63 a?os, se dio de bruces con el verdadero coste que puede tener una enfermedad, algo que se suele olvidar gracias a la gratuidad del Sistema Nacional de Salud espa?ol y que cada a?o sufren algunos viajeros con mala suerte y poca previsi¨®n.

Casos como el suyo son extremos e infrecuentes. El coste medio de los percances de salud en los viajes es de 434 euros, seg¨²n un informe de la Asociaci¨®n Empresarial del Seguro (Unespa), que analiz¨® 312.000 casos que sus socios tuvieron que sufragar el a?o pasado. Por lo general son problemas menores, pero puede suceder cualquier cosa. En 2023, Unespa tiene registrados gastos de hasta 74.000 euros en Israel, de 56.000 en Canad¨¢ o de 48.000 en Estados Unidos. Cuando es necesaria una repatriaci¨®n, el coste puede dispararse hasta los 150.000 que tuvo que pagar una aseguradora para traer a un cliente desde Islandia. Aunque el informe no lo especifica, es probable que fuera necesario fletar un avi¨®n medicalizado.

Esos casos estaban cubiertos por los seguros que los viajeros hab¨ªan contratado previamente, pero cuando no se hace, los tiene que pagar de su bolsillo el turista. Sampedro tuvo la mala suerte de sufrir un caso extra?¨ªsimo: una rabdomiolisis, una rotura muscular que suele producirse por culpa de accidentes de tr¨¢fico o ca¨ªdas pero que a ¨¦l le sobrevino de repente. ¡°Estaba pasando un par de semanas en casa de una amiga y un d¨ªa, por la calle, me desplom¨¦ en el suelo. Me qued¨¦ completamente paralizado, no pod¨ªa ni levantar una mano¡±, explica.

En el proceso, las c¨¦lulas musculares vierten desechos al torrente sangu¨ªneo. Esto va a parar a los ri?ones, que sufren un fallo. La factura del Hospital Espa?ol de M¨¦xico inclu¨ªa, adem¨¢s del mencionado ox¨ªgeno, la di¨¢lisis, todos los medicamentos, las pruebas, las sondas... ¡°Y la propia estancia hospitalaria, que sale como estar en un hotel de cinco estrellas¡±, cuenta Sampedro, que en cuanto pudo salir de all¨ª vol¨® a Madrid para acabar de recuperarse en el Cl¨ªnico San Carlos de Madrid.

Imposible saber cu¨¢ntos turistas tienen que pagar de su bolsillo la asistencia en el extranjero. El balance de la actividad consular de 2023 del Ministerio de Exteriores muestra que se otorgaron ¡°267 ayudas individuales extraordinarias por un importe total de alrededor de 90.000 euros concedidas a personas de nacionalidad espa?ola que se encontraban en situaciones concretas y puntuales de necesidad o especial vulnerabilidad¡±. En general esto se refiere a personas que han sufrido alg¨²n accidente o problema de salud y recurren al consulado para recibir ayuda, pero es un dinero que tienen que reembolsar posteriormente. Y, por supuesto, los que no tuvieron que recurrir a esta instancia, no forman parte de esa cifra.

Katia Estace, directora ejecutiva de la consultora de seguros AON, una firma de servicios profesionales dedicada a la gesti¨®n y transferencia de riesgos, dice que los datos de reservas de viajes y seguros pueden dar pistas sobre su uso, y calcula que aproximadamente la mitad de los viajeros contratan uno. ¡°Desde la pandemia hubo un cambio y aumentaron, as¨ª como las coberturas, pero tambi¨¦n es cierto que la gente se olvida y est¨¢ comprando seguros m¨¢s baratos¡±, se?ala. Seg¨²n sus cifras, los turistas nacionales se est¨¢n moviendo m¨¢s por Espa?a, donde no suelen contratar un seguro. ¡°Donde se deja el resto es en los grandes viajes, y casi siempre cuando van a Estados Unidos, Canad¨¢ o Jap¨®n. Ah¨ª tienes que buscar una cobertura ilimitada porque de lo contrario puedes acabar hipotecando tu casa, puede ser tremenda una hospitalizaci¨®n all¨ª¡±, contin¨²a.

Qu¨¦ comprobar para contratar un seguro

La asociaci¨®n de consumidores FACUA recomienda, antes de contratar un seguro de viajes, comprobar las coberturas sanitarias del pa¨ªs de destino, los precios de la atenci¨®n y decidir en funci¨®n de esas variables. Gabriela Camayd, abogada de la organizaci¨®n, aconseja leer bien las condiciones, tanto generales como particulares del contrato, para evitar sorpresas. Porque no es suficiente contratar un seguro, hay que saber bien qu¨¦ cubre o qu¨¦ no.

¡°Primero hay que comprobar si contempla ingreso, operaciones, o si deja fuera servicios¡±, explica. ¡°Luego el importe que cubre, que puede ser ilimitado o por una cantidad m¨¢xima. A lo mejor una p¨®liza cubre 50.000 euros, que puede parecer mucho, y que quiz¨¢s en un pa¨ªs como Marruecos es suficiente porque el coste sanitario muy raramente va a exceder esa cifra, pero que en Estados Unidos se puede quedar corta muy f¨¢cilmente¡±, contin¨²a. En esa letra peque?a pueden quedar excluidas las situaciones de pandemia, algo que les cost¨® a muchas personas a las que la covid les pill¨® en el extranjero.

La mayor¨ªa de los seguros se contratan para viajes fuera de Europa. Dentro de la UE y en pa¨ªses asociados, como Noruega, suele ser suficiente con la tarjeta sanitaria europea, que se puede obtener de forma gratuita y que se adapta a las coberturas del destino. Si tiene ciertas franquicias, habr¨¢ que pagarlas. Y solo se tiene acceso a los tratamientos que est¨¦n incluidos para los que all¨ª viven. Si un turista de un pa¨ªs con cobertura dental llega a Espa?a y tiene un problema que requiera un dentista, aqu¨ª la tarjeta sanitaria no lo cubrir¨¢.

La abogada de FACUA tambi¨¦n aconseja tener en cuenta si el seguro cubre enfermedades preexistentes, algo que muchas veces est¨¢ excluido y que puede dar como resultado que a una persona que tuviera padecimientos card¨ªacos, por ejemplo, no le cubra la asistencia si sufre un infarto al coraz¨®n.

Si la compra del viaje se realiza con ciertas tarjetas de cr¨¦dito, estas pueden incluir un seguro, as¨ª que muchas personas pueden gozar de ciertas coberturas, incluso sin saberlo. Pero conviene asegurarse de cu¨¢les son y hasta donde llegan. Tambi¨¦n algunos seguros de salud privada que se contratan para la asistencia en Espa?a a?aden servicios en el extranjero.

Mercedes Tejero, gerente de la Confederaci¨®n Espa?ola de Agencias de Viaje, recomienda muy encarecidamente contratar seguro que en viajes grandes ¡°supone un porcentaje muy peque?o del coste¡±. Como responsable de m¨²ltiples grupos de turistas a lo largo de su carrera, ha visto de todo y, en su experiencia, la atenci¨®n de los seguros ha sido siempre ¡°muy buena¡±. ¡°Siempre viajamos con un seguro fuerte. Tienen un tel¨¦fono de atenci¨®n de 24 horas y si pasa algo llamas y te dicen qu¨¦ hacer, o te remiten a alg¨²n hospital¡±, cuenta. Este punto es tambi¨¦n importante, ya que muchas p¨®lizas no cubren los siniestros si la atenci¨®n se realiza antes de notificarlo.

Desde esguinces a ingresos en la UCI

Tejero dice que son muy frecuentes las ca¨ªdas de todo tipo, con torceduras de tobillos, esguinces o alguna rotura de huesos. ¡°Desde la se?ora que iba con tacones y se cay¨® y tuvimos que acompa?ar porque no sab¨ªa ingl¨¦s, hasta un ataque epil¨¦ptico en Turqu¨ªa donde un hombre tuvo que ir al hospital, o un se?or que se puso malo en Tailandia y se tuvo que quedar ingresado durante m¨¢s tiempo del que duraba el viaje. Se qued¨® con una acompa?ante porque el seguro cubr¨ªa a ambos. Eso es tambi¨¦n algo que se debe comprobar¡±, relata.

Adri¨¢n Fern¨¢ndez y su esposa, Sof¨ªa Parada, vivieron en una pesadilla en un viaje a Canc¨²n en mayo de este a?o. ?l sufri¨® un paro card¨ªaco en la piscina del hotel, a pocos d¨ªas de regresar a Espa?a. Tuvo que ser ingresado en cuidados intensivos con un coste de 8.000 euros diarios. Tuvieron que permanecer 21 d¨ªas m¨¢s de los previstos, hasta que Fern¨¢ndez se recuper¨® y pudo volver por su propio pie, con unos gastos m¨¦dicos de unos 150.000 euros, que pudieron sufragar gracias a una recaudaci¨®n de fondos en la que se volcaron los vecinos de Alzira, de donde son originarios, seg¨²n contaron a su regreso a los medios de comunicaci¨®n.

En el mismo mes, ?lex Garc¨ªa, de 36 a?os, estaba finalizando el calvario que empez¨® Tailandia, donde sufri¨® una pancreatitis. ?l hab¨ªa firmado un seguro, pero las complicaciones m¨¦dicas de su caso estuvieron a punto de costarle la vida. Tras varias tentativas de regreso frustradas, tuvo que traerlo un avi¨®n medicalizado del Gobierno espa?ol, que llevaba 11 sanitarios y t¨¦cnicos en aeroevacuaciones.

Ese tipo de transportes suponen gastos enormes si los tienen que sufragar los propios pacientes que, cuando viajan sin seguro, no solo pueden sufrir una pesadilla de salud, sino tambi¨¦n la ruina.