La investigaci¨®n avanza contra la LLC, la leucemia m¨¢s frecuente
No se cura, pero s¨ª se controla. Los avances en las terapias contra la leucemia linfoc¨ªtica cr¨®nica han permitido modificar el curso de la enfermedad y aumentar no solo la supervivencia, sino tambi¨¦n la calidad de vida de los afectados
El lenguaje de la calle, habitualmente tan impreciso cuando se habla de patolog¨ªas complejas, tiende a referirse a la leucemia como si se tratara de una ¨²nica enfermedad. En realidad, bajo ese t¨¦rmino gen¨¦rico se alude a un grupo de c¨¢nceres que afectan a la sangre y la m¨¦dula ¨®sea. Dentro de ese grupo de tumores, la leucemia linfoc¨ªtica cr¨®nica (LLC) es el tipo m¨¢s frecuente en los adultos de los pa¨ªses occidentales, y representa el 30% de los casos de leucemia que se diagnostican cada a?o.
Los apellidos de esta leucemia ©¤linfoc¨ªtica y cr¨®nica©¤ nos dan la primera pista de sus caracter¨ªsticas: se trata de una enfermedad que afecta a los linfocitos, un tipo de gl¨®bulo blanco que juega un papel importante en el sistema inmunitario. Y es cr¨®nica: a diferencia de las leucemias agudas, suele desarrollarse m¨¢s lentamente y, en algunos casos, permanecer controlada durante un tiempo antes de requerir tratamiento.
Este tipo de enfermedades son de evoluci¨®n muy lenta; cuando no las sospechas y vas teniendo peque?os s¨ªntomas, los achacas a cualquier casoBego?a Barrag¨¢n, presidenta de la Asociaci¨®n Espa?ola de Afectados por Linfoma, Mieloma y Leucemia
Una enfermedad cr¨®nica
Estas caracter¨ªsticas deben explicarse bien al paciente que recibe el diagn¨®stico y que, frecuentemente, acude al especialista asustado por la palabra ¡®leucemia¡¯. ¡°Hay que empezar por responder a sus preguntas y a su preocupaci¨®n¡±, explica el doctor Francesc Bosch, jefe del Servicio de Hematolog¨ªa del Hospital Vall d¡¯Hebron (Barcelona) y presidente del Grupo Espa?ol de Leucemia Linfoc¨ªtica Cr¨®nica (GELLC). ¡°Les insistimos en que es una enfermedad cr¨®nica, que no tiene nada que ver con las leucemias agudas que conocemos. Muchas veces el paciente no necesita tratamiento, y te preguntan si est¨¢n tan mal que no los vamos a tratar, y no es as¨ª; es solo que la enfermedad est¨¢ en una fase inicial y no hace falta¡±, confirm¨® el especialista durante una entrevista en Hora 25, en la Cadena SER, en el marco del mes de los c¨¢nceres de la sangre. Un espacio con la colaboraci¨®n de Johnson & Johnson, el grupo GELLC y la asociaci¨®n de pacientes AEAL.
Pero, antes de llegar a ese diagn¨®stico, ha habido previamente unos s¨ªntomas, unas se?ales de alerta que han sido motivo de consulta. Bego?a Barrag¨¢n, presidenta de la Asociaci¨®n Espa?ola de Afectados por Linfoma, Mieloma y Leucemia (AEAL), y ella misma paciente de un c¨¢ncer de la sangre, explica que ¡°este tipo de enfermedades son de evoluci¨®n muy lenta; cuando no las sospechas y vas teniendo peque?os s¨ªntomas, los achacas a cualquier caso¡±. En su caso, por ejemplo, atribuy¨® su cansancio a la mudanza que estaba haciendo.
Carlos Fern¨¢ndez tambi¨¦n estaba muy cansado. ¡°Llegaba del trabajo, me sentaba en el sof¨¢ y, en ese momento, era como si no pudiese con mi cuerpo¡±. Tras un par de anal¨ªticas que revelaron cifras elevadas de linfocitos, lleg¨® finalmente el diagn¨®stico de LLC. No era un t¨¦rmino que le resultara desconocido: tambi¨¦n su padre tuvo la enfermedad.
Nuevas dianas terap¨¦uticas
Porque, aunque se desconocen las causas de la mayor¨ªa de los casos de LLC, las ¨²ltimas investigaciones han logrado identificar que existen ciertos genes cuyas mutaciones pueden desencadenar la evoluci¨®n de la enfermedad. Adem¨¢s, tambi¨¦n se ha visto que aquellas personas con parientes de primer grado (padres, hijos o hermanos) que sufran LLC tienen m¨¢s del doble de posibilidades de desarrollarla que aquellas que no tienen estos antecedentes familiares. No obstante, el doctor Bosch matizaba: ¡°No se trata estrictamente de una enfermedad hereditaria¡±.
Al igual que otros c¨¢nceres de la sangre, la LLC sigue siendo una enfermedad incurable, pero en los ¨²ltimos tiempos la investigaci¨®n de nuevas dianas terap¨¦uticas y el desarrollo de medicamentos innovadores ha permitido dar pasos relevantes en cuanto a la supervivencia de los pacientes. En este sentido, la doctora Mar¨ªa Jos¨¦ Terol, jefa de secci¨®n de Hematolog¨ªa del Hospital Cl¨ªnico de Valencia, explica que la ¨²ltima d¨¦cada ha supuesto un cambio de paradigma en el tratamiento de la enfermedad: ¡°Hace 15 o 20 a?os, a aquellos pacientes que necesitaban tratamiento se les trataba con esquemas de quimioterapia, con todo lo que ello supone de efectos secundarios¡±.
Eso ha cambiado gracias a nuevas terapias que impulsan una mejora continua en la supervivencia, que han permitido dejar de administrar tratamientos quimioter¨¢picos a algunos pacientes y pasar a nuevos medicamentos con un mejor perfil de eficacia y tolerabilidad, que no solo han prolongado el tiempo libre de tratamiento y la supervivencia, sino tambi¨¦n su calidad de vida. Estos avances, explican los doctores Bosch y Terol, han supuesto que ¡°en los ¨²ltimos haya cambiado completamente la evoluci¨®n de la enfermedad¡±.
Es algo que vive d¨ªa a d¨ªa Carlos Fern¨¢ndez, que recuerda la diferencia entre c¨®mo vivi¨® su padre con LLC y c¨®mo es su d¨ªa a d¨ªa: ¡°No necesito a nadie para el cuidado diario, voy de viaje, tengo una calidad de vida totalmente normal¡±. Desde hace tres a?os, de hecho, no sigue tratamiento, porque la enfermedad ha remitido.
No necesito a nadie para el cuidado diario, voy de viaje, tengo una calidad de vida totalmente normalCarlos Fern¨¢ndez, paciente de LLC e hijo de afectado
Sopesar los tratamientos en caso de repunte
Remisi¨®n no implica cura, y es importante entender que ¡°no se busca tanto eliminar la patolog¨ªa como controlarla. Se trata de cronificar la enfermedad, igual que cuando tratamos una hipertensi¨®n arterial, que se controla pero nunca se cura. Logramos impactar de manera que muchos pacientes fallecer¨¢n por otras causas¡±, contin¨²a el doctor Bosch. Y, en los casos en los que la enfermedad vuelve, se busca la terapia m¨¢s adecuada: ¡°Si ha pasado mucho tiempo, significa que el tratamiento inicial ha funcionado muy bien; tenemos entonces la opci¨®n tratar nuevamente al paciente con ese mismo f¨¢rmaco y no quemar armas terap¨¦uticas¡±.
Todos estos avances, que han permitido modificar el curso natural de la leucemia linfoc¨ªtica cr¨®nica, son recibidos con esperanza por los pacientes. Como se?ala Bego?a Barrag¨¢n, ¡°resultan fundamentales para quienes tienen este tipo de leucemia, y tambi¨¦n para los que tienen otros tipos de c¨¢nceres de la sangre. Ves que se sigue investigando, que se sigue avanzando, y eso es esperanzador¡±.