El dato sobre prostituci¨®n que lleva d¨¢ndose m¨¢s de una d¨¦cada pero ning¨²n estudio confirma
Hace al menos 14 a?os que se repite desde distintos ¨¢mbitos que entre el 80% y el 90% de las mujeres en situaci¨®n de prostituci¨®n son v¨ªctimas de explotaci¨®n, una cifra que deriva de la observaci¨®n
Hay un dato que se repite desde hace m¨¢s de una d¨¦cada: que entre el 80% y el 90% de mujeres en situaci¨®n de prostituci¨®n son v¨ªctimas de explotaci¨®n o de trata con fines de explotaci¨®n sexual en Espa?a. Aparece en declaraciones de responsables pol¨ªticos de distintos partidos, en informaciones policiales, en campa?as de asociaciones y plataformas que luchan contra este problema estructural y global, en documentos oficiales auton¨®micos y en medios de comunicaci¨®n, incluido este. Lleva a?os oscilando en ese alto porcentaje que ning¨²n estudio ha corroborado mientras que las estimaciones de organizaciones como Naciones Unidas llevan esos mismos a?os movi¨¦ndose alrededor de un 14%.
Hace poco m¨¢s de una semana, por primera vez, hubo un dato, aunque limitado, resultado de un an¨¢lisis en Espa?a. El Ministerio de Igualdad public¨® el primer macroestudio que se ha hecho para hacer un acercamiento a los n¨²meros de esta forma de violencia sobre las mujeres ¡ªTrata, explotaci¨®n sexual y prostituci¨®n de mujeres: una aproximaci¨®n cuantitativa¡ª, y los resultados estimaron un 24,2%. Un valor que se aleja del 90%.
?De d¨®nde sale entonces ese 80%, 90%? Es el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO, responsable de las estad¨ªsticas oficiales sobre trata), el ¨²nico organismo que puede apuntar un origen: ¡°La aproximaci¨®n deriva, en la mayor¨ªa de los casos, de la observaci¨®n directa de aquellos profesionales que tienen contacto directo con personas en entornos de prostituci¨®n (fuerzas y cuerpos de seguridad, trabajadores sociales u organizaciones y entidades de la sociedad civil especializadas en la asistencia a v¨ªctimas de trata). Sin embargo, no existe ning¨²n estudio concreto que confirme de manera categ¨®rica este extremo¡±.
?Y por qu¨¦ hay tanta diferencia entre esa estimaci¨®n por observaci¨®n y el dato del estudio reci¨¦n publicado? Por las limitaciones. Este estuvo centrado exclusivamente en analizar los anuncios de prostituci¨®n en p¨¢ginas web que ofertan ¡°servicios presenciales¡±, y en base a eso calcul¨® que hay 114.576 mujeres en situaci¨®n de prostituci¨®n. De ellas, aplicando una serie de variables, cifr¨® en 27.757 (ese 24,2%) las que est¨¢n en riesgo de explotaci¨®n sexual .
La investigaci¨®n, por tanto, deja fuera parte del espacio online (no se han rastreado todas las webs que existen; est¨¢n por ejemplo excluidas webs o anuncios de cibersexo y v¨ªdeos de contenido sexual o redes sociales y otras plataformas), y tambi¨¦n el resto de espacios f¨ªsicos donde se da la prostituci¨®n y que no est¨¢n ligados a Internet o no tienen por qu¨¦ estarlo, como la calle, los clubs, los hoteles o los pisos. Y hay, adem¨¢s, diversos problemas metodol¨®gicos siempre existentes en este ¨¢mbito para acercarse lo m¨¢s posible a la realidad, como que estas mujeres son lo que en estad¨ªstica se denomina ¡°poblaci¨®n oculta o de dif¨ªcil acceso¡±.
?Cu¨¢nto porcentaje de prostituci¨®n queda entonces excluido del estudio? En el informe, teniendo en cuenta las acotaciones anteriores, se hizo ese c¨¢lculo, el de cu¨¢ntas mujeres, en total, podr¨ªa haber en todos los espacios: online, en la calle, en clubs, en pisos, en centros de masajes¡ La horquilla resultante fue de entre 152.735 y 184.234.
Si se coge la parte alta de esa horquilla, es decir, suponiendo que sean 184.234 las mujeres en prostituci¨®n en Espa?a, y se restan las 114.576 que son solo de las webs que analizaron, la cifra en los ¨¢mbitos que el estudio dej¨® fuera es de 69.758 mujeres. Si esas 69.758, todas, estuvieran sometidas a redes de explotaci¨®n, el porcentaje de v¨ªctimas de trata respecto al total de mujeres en prostituci¨®n ser¨ªa de un 53,9%, que sigue estando alejado del 90% aunque se acercar¨ªa m¨¢s, por ejemplo, al 50% que el Ayuntamiento de Barcelona estim¨® para las mujeres en situaci¨®n de prostituci¨®n de esa ciudad hace varios a?os.
?De d¨®nde procede tanta disparidad? De la dificultad de acercarse al primer dato necesario para calcular las v¨ªctimas de trata y explotaci¨®n sexual: el n¨²mero de mujeres de prostituci¨®n. As¨ª, cualquier n¨²mero, en cualquier caso, ser¨¢ siempre una estimaci¨®n. En Europa, por ejemplo, la UE calcula que ni?as y mujeres son entre el 87% y el 95% de las v¨ªctimas de trata con fines de explotaci¨®n sexual. ?Cu¨¢ntas? El Parlamento aproxima unas 7.000 al a?o en toda la Uni¨®n Europea, pero matiza siempre: ¡°Es probable que la cifra real sea significativamente mayor, ya que muchas v¨ªctimas siguen sin ser detectadas¡±.
La dificultad de acercarse a un dato
La explotaci¨®n sexual y la trata con fines de explotaci¨®n sexual, y la prostituci¨®n que deriva de ellas, son una de las formas de violencia de g¨¦nero m¨¢s ocultas y, por tanto, m¨¢s dif¨ªciles de perseguir y de cuantificar, no solo en Espa?a sino en todo el mundo.
Desde el CITCO se?alan que esto se debe en Espa?a a dos motivos principales. Uno, ¡°que la prostituci¨®n es una ¡®actividad¡¯ [se?alan el organismo entre comillas] sobre la que no existe ning¨²n tipo de regulaci¨®n, por lo que no se cuenta con cifras exactas del n¨²mero real de personas que se encuentran en situaciones de prostituci¨®n¡±. Y dos, que tanto en trata como en explotaci¨®n sexual ¡°se habla de que terceras personas aprovechan la situaci¨®n de necesidad o vulnerabilidad de las v¨ªctimas¡±.
Explican que ¡°la mayor¨ªa de las mujeres en entornos de prostituci¨®n proceden de terceros pa¨ªses con una dif¨ªcil situaci¨®n interna, o que viven en entornos de pobreza y desestructurados donde las oportunidades de prosperar de manera digna son escasas¡±, algo que seg¨²n el organismo ¡°hace pensar que un porcentaje elevado se encuentran en esta situaci¨®n de necesidad y que de no existir la misma no acudir¨ªan a este tipo de entornos como estrategia de supervivencia¡±; tambi¨¦n ¡°que muchas v¨ªctimas, especialmente las de trata de seres humanos, son enga?adas sobre la actividad real que van a llevar a cabo y que una vez explotadas es muy complicado que puedan denunciar su situaci¨®n y visibilizar su explotaci¨®n¡±.
Son necesarias consideraciones formales para que una mujer pueda constar oficialmente como v¨ªctima de explotaci¨®n sexual, consideraciones que pueden ser policiales o judiciales, y, desde la entrada en vigor de la ley del solo s¨ª es s¨ª, tambi¨¦n puede ser a trav¨¦s de una acreditaci¨®n por parte de m¨²ltiples organismos auton¨®micos y provinciales.
Pero en general, incluso cuando las instituciones u organismos detectan la posibilidad de que una mujer sea v¨ªctima, la situaci¨®n de vulnerabilidad econ¨®mica, social y de seguridad por su propia vida y las de sus familias, puede hacer que esa identificaci¨®n sea imposible, que ellas declaren no serlo por miedo a sus explotadores o a perder su ¨²nica forma de subsistencia, y que afirmen estar ejerciendo la prostituci¨®n de manera voluntaria y libre.
A eso se a?aden otros obst¨¢culos que el tercer informe del Parlamento Europeo sobre la trata de personas se?alaba como ¡°lagunas¡±. Inclu¨ªa entre ellas las ¡°bajas tasas de condenas, inconsistencias en el registro y presentaci¨®n de datos, la consideraci¨®n insuficiente de las necesidades espec¨ªficas de las v¨ªctimas y el apoyo, en general, d¨¦bil¡±; tambi¨¦n ¡°las diferencias jur¨ªdicas en los enfoques para criminalizar a quienes, a sabiendas, utilizan los servicios de las v¨ªctimas de la trata de personas¡±, y los ¡°cambios en la naturaleza del delito a lo largo de los a?os, incluido los m¨¦todos de reclutamiento¡±.
La evoluci¨®n del delito
El delito est¨¢ cambiando, adapt¨¢ndose. En ese informe, el Parlamento Europeo indic¨® que no solo esa violaci¨®n de los derechos humanos no hab¨ªa disminuido, ¡°sino que hab¨ªa evolucionado¡± y hab¨ªan surgido nuevos riesgos.
El ¨²ltimo informe sobre trata de seres humanos de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), con datos de 2019 hasta 2021, revel¨® una bajada en el n¨²mero de v¨ªctimas de explotaci¨®n sexual detectada en todo el mundo respecto a a?os anteriores ¡ªdetect¨® en 2020, con informaci¨®n de 104 pa¨ªses, m¨¢s de 14.000 v¨ªctimas¡ª. Sin embargo, la ONU no lo achacaba a una reducci¨®n de la explotaci¨®n, su principal hip¨®tesis fue que los cierres y los confinamientos durante la covid la movieron a ¡°lugares menos visibles¡±.
Esa es la tendencia que la mayor¨ªa de organismos y cuerpos policiales de todo el mundo creen que ha seguido. En Espa?a, desde el CITCO explican que ¡°la prostituci¨®n, localizada tradicionalmente en los clubes de alterne, ha pasado a ubicarse en espacios m¨¢s privados, tales como pisos, chalets, viviendas de alquiler tur¨ªstico, que permiten, adem¨¢s, una mayor movilidad de las potenciales v¨ªctimas, lo que dificulta su detecci¨®n y, por ello, su cuantificaci¨®n¡±.
A eso se suma de manera creciente el uso de la tecnolog¨ªa ¡°por las redes criminales en todas las fases de la trata, especialmente en la captaci¨®n, control de las v¨ªctimas y publicidad de sus servicios¡±, como consta en el ¨²ltimo informe de Interior sobre trata. El CITCO advierte sobre esto: ¡°Pese a que no hay casos a¨²n confirmados de v¨ªctimas que sean explotadas en entornos online, tanto la comunidad nacional de expertos como la internacional han expresado su preocupaci¨®n por el posible uso de estos entornos, no solo para favorecer la captaci¨®n, control y publicidad de situaciones de explotaci¨®n, sino tambi¨¦n para llevar a cabo la propia explotaci¨®n¡±. Inciden en que ¡°es una situaci¨®n a tener en cuenta ya que puede mermar de manera notable la capacidad de detecci¨®n de v¨ªctimas de explotaci¨®n y trata de seres humanos¡±.
En Espa?a hay otra casu¨ªstica a?adida, que la explotaci¨®n sexual supone un mayor porcentaje sobre toda la trata que en otros lugares que puede deberse, entre otras razones, al ¡°nodo relevante¡± que es el pa¨ªs para este delito por su ¡°disposici¨®n geogr¨¢fica¡± y ¡°sus lazos culturales¡± con Latinoam¨¦rica, apunta Interior, adem¨¢s de por ser destino tur¨ªstico. El a?o pasado, seg¨²n la Fiscal¨ªa General del Estado, la explotaci¨®n sexual supuso el 72% de todas las modalidades de trata, seguida de la laboral, con un 25%; en Europa fue de alrededor del 56% y el 28%, respectivamente; y de forma global, est¨¢n ambas rozando el 40%.
Las cifras seguras
Carmen Mart¨ªnez, la delegada del Gobierno contra la Violencia de G¨¦nero, incidi¨® la pasada semana varias veces en que en prostituci¨®n, trata y explotaci¨®n ¡°no hay cifras seguras¡±, sino m¨¢s bien casos que se detectan. Al igual que ocurre en el resto de violencias contra las mujeres, los datos con los que cuentan el Estado no se corresponden ¡°con el n¨²mero real de v¨ªctimas¡±, porque ¡°nunca se identifican todas las que son¡±.
As¨ª, los ¨²nicos datos que pueden darse como exactos son los de las v¨ªctimas identificadas, aquellas que ya constan oficialmente como v¨ªctimas de trata para las instituciones, aunque los n¨²meros de unas y otras tambi¨¦n difieran porque la detecci¨®n, los procedimientos, los tiempos y el reconocimiento de las mujeres como v¨ªctimas son distintos. Los de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado registraron el a?o pasado ¡°664, en su inmensa mayor¨ªa mujeres (98%) y entre ellas 12 menores de edad¡±; la Fiscal¨ªa General del Estado, en su Memoria de 2023, recogi¨® 543; el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado, 287.
Con esos n¨²meros podr¨ªan hacerse tambi¨¦n estimaciones con las horquillas que fijan distintas organizaciones y e investigaciones. Pero son tambi¨¦n dispares. Por ejemplo, ser¨ªan 976 las mujeres en situaci¨®n de prostituci¨®n v¨ªctimas de trata si se coge el ratio del informe t¨¦cnico de investigaci¨®n Cultura de datos en la trata de seres humanos ¡ªde la C¨¢tedra de Refugiados y Migrantes Forzosos del Instituto Universitario de Estudios sobre Migraciones¡ª, para las cifras conocidas de 2022; pero ser¨ªan 13.280 si se coge el de Naciones Unidas, que calcula que ¡°los pa¨ªses industrializados¡± identifican de media a una de cada 20 v¨ªctimas. Esta ¨²ltima ser¨ªa, eso s¨ª, una cifra muy similar a la que la Delegaci¨®n de Gobierno contra la Violencia de G¨¦nero calcul¨® en 2018 en un informe (13.317).
N¨²meros distintos, estimaciones dispares, horquillas m¨¢s o menos amplias con las que cuesta dibujar una perspectiva de la realidad y que por ello conducen a una conclusi¨®n: los enormes huecos que existen en torno al n¨²mero de mujeres en prostituci¨®n y, por tanto, tambi¨¦n en el n¨²mero de v¨ªctimas de trata y explotaci¨®n sexual. En el CITCO, en cualquier caso, aseguran que ¡°entre la comunidad de expertos en esta materia es amplio el consenso que considera que la explotaci¨®n es mayoritaria frente a la prostituci¨®n libremente ejercida¡±.
Mientras se ahonda en ese conocimiento de la realidad, la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, la Organizaci¨®n Internacional para las Migraciones y diversos organismos internacionales llevan varios a?os advirtiendo de que el mundo actual, el contexto sociopol¨ªtico actual, aumenta a¨²n m¨¢s el riesgo para millones de mujeres y ni?as, porque el riesgo de ser v¨ªctima de trata y explotaci¨®n aumenta con las crisis, los conflictos y las emergencias clim¨¢ticas.
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