Cuando una enfermedad de la piel amenaza al placer en la intimidad
La psoriasis condiciona la vida de las personas que la padecen. Puede limitar sus carreras profesionales, reducir sus c¨ªrculos sociales o afectar a sus relaciones sexuales, aunque los doctores aseguran que hay herramientas que ayudan a superar estas situaciones
Para buena parte del mill¨®n de espa?oles que la padecen, la psoriasis condiciona su forma de vida. Las molestias que causa (picor, inflamaci¨®n, sequedad o irritaci¨®n) o los s¨ªntomas que muestra (piel roja y escamas) crean una barrera tanto en las relaciones personales y de pareja, como en el trabajo. Hay efectos psicol¨®gicos determinantes provocados por el descenso de la autoestima. Pero tambi¨¦n hay causas f¨ªsicas muy limitadoras. Es el caso de las personas que sufren psoriasis genital, una variante que casi siempre est¨¢ en un contexto de psoriasis en otras partes del cuerpo. Su localizaci¨®n en el pubis, las ingles, los muslos, los genitales o las nalgas la convierten en una amenaza capaz de desactivar todo el placer en la vida ¨ªntima: casi la mitad de los afectados experimentan sensaciones de dolor en sus relaciones sexuales y un 80% tiene picores, de acuerdo con un estudio de 2015 publicado en el Journal of American Academy of Dermatology.
El gran escollo para los m¨¦dicos es la detecci¨®n del cuadro, asegura Miquel Ribera, dermat¨®logo del hospital Parc Taul¨ª de Sabadell (Barcelona). ¡°Si t¨² no le preguntas, el paciente no te lo ense?a o no te lo explica muchas veces por verg¨¹enza. Si ya de por si la psoriasis genera estigma, en estos casos a¨²n es m¨¢s patente¡±, explica. Una barrera que el doctor trata de vencer con este mensaje, tras m¨¢s de 30 a?os de trayectoria: ¡°Renunciar a una vida sexual sana y activa es a¨²n peor, por las secuelas psicol¨®gicas que puede dejar. Hay que vencer el pudor porque existen soluciones eficaces¡±.
A Txey Bravo, de 36 a?os, le empezaron a salir manchas en el cuerpo a los 12. Record¨® la fecha exacta hace poco al recuperar un diario ¨ªntimo de una adolescencia que qued¨® marcada por lo que, al principio, ni pensaba que fuera una enfermedad. ¡°Me maquillaba para tapar las manchas. Te pilla en plena pubertad, en plena ¨¦poca de conocer a chicos y es un poco complicado¡±, cuenta al tel¨¦fono.
Bravo lo habl¨® r¨¢pidamente con su familia, sus amigas y tambi¨¦n se puso en manos de dermat¨®logos. Sin embargo, hab¨ªa un aspecto de su vida en el que le cost¨® m¨¢s sincerarse con una psoriasis que poco a poco se fue extendiendo a otras partes del cuerpo. ¡°Al principio trataba de esconderlo con los chicos. Que no notaran mi incomodidad cuando me cog¨ªan por la cintura, por ejemplo. Pero al final se lo acab¨¦ contando a mi primera relaci¨®n estable. Fue como romper una barrera y ¨¦l lo entendi¨® perfectamente¡±, recuerda.
Vencer el temor a hablar de ello es clave tambi¨¦n para evitar que la enfermedad pueda derivar en otras posibles complicaciones, estiman los expertos. Entre un 20% y 30% de los afectados por la psoriasis tambi¨¦n sufre artritis psori¨¢sica. Un tipo de dolencia que puede producir inflamaci¨®n y deformidad en las articulaciones e incluso llevar al paciente a una situaci¨®n de invalidez y para la que es clave el diagn¨®stico precoz, seg¨²n se?alan los doctores.
Con exacerbaciones y remisiones impredecibles, y pese a tratarse de una enfermedad cr¨®nica, existen opciones farmacol¨®gicas para combatir la psoriasis (tanto genital como general). ¡°Entre un 80 y un 90% de los casos, se consigue eliminar totalmente los s¨ªntomas o, en un porcentaje m¨¢s bajo, atenuarlos casi por completo¡±, incide el doctor Ribera sobre una afecci¨®n m¨¢s com¨²n entre las mujeres que entre los hombres y que suele aparecer entre los 15 y los 35 a?os.
Con el tiempo, Bravo fue ganando una normalidad que la aparici¨®n de las manchas trastoc¨® en su adolescencia. Tanto en sus relaciones de pareja, donde hizo del di¨¢logo y la expresi¨®n de sus sensaciones y emociones un pilar, como en un d¨ªa a d¨ªa en el que en gran medida se ha podido desprender del retraimiento y la verg¨¹enza que le provocaban la mirada escrutadora de los otros. Ponerse el traje de ba?o en la playa es, por ejemplo, uno de sus triunfos.
Un freno en la vida laboral
M¨¢s all¨¢ de las relaciones ¨ªntimas, la psoriasis tambi¨¦n tiene una incidencia en otras facetas de la vida de los que sufren la enfermedad. Siete de cada diez pacientes aseguran que los s¨ªntomas afectan en general a su d¨ªa a d¨ªa, seg¨²n la encuesta m¨¢s amplia realizada en Espa?a que llev¨® a cabo la asociaci¨®n Acci¨®n Psoriasis en 2017.
El mayor impacto, revelan las respuestas del estudio, se produce en el cultivo de las relaciones sociales y en el desempe?o de la actividad laboral. La visibilidad de las lesiones cut¨¢neas y el miedo a que estas generen rechazo interfiere en seis de cada diez casos a la hora de planificar actividades con amigos o compa?eros. Asimismo, la mitad de los cerca de 1.500 encuestados creen que la enfermedad ha tenido un efecto negativo en el desempe?o de su carrera profesional.
El jefe del servicio de Dermatolog¨ªa del Hospital Universitario Fundaci¨®n Alcorc¨®n, Jos¨¦ Luis L¨®pez Estebaranz, corrobora esta impresi¨®n: ¡°Est¨¢ demostrado que los afectados progresan menos en el escalaf¨®n profesional porque les repercute en la autoestima y la confianza y tambi¨¦n pueden tener m¨¢s bajas¡±. L¨®pez Estebaranz apunta que la afectaci¨®n depende principalmente de dos factores: la severidad de la enfermedad y la zona afectada (las manos, los pies y el cabello son las m¨¢s comunes). ¡°Yo he llegado a tratar a un guitarrista famoso al que se le agrietaban las manos¡±, ejemplifica.
En este y en cualquiera de los casos, el especialista recomienda ponerse en manos de un especialista. ¡°Nos encontramos con muchos pacientes que ya tiraron la toalla porque en su d¨ªa no les dieron esperanza. Pero en los ¨²ltimos 15 a?os se han hecho avances enormes. Aunque se trata de una enfermedad cr¨®nica, hoy en d¨ªa es posible convivir con ella e incluso llegar a olvidar que est¨¢ ah¨ª d¨ªa tras d¨ªa gracias a los tratamientos¡±, sentencia.
El di¨¢logo y la complicidad, claves en las relaciones de pareja
Adem¨¢s de contactar con un especialista, los doctores se?alan el di¨¢logo en la intimidad como un aspecto clave para que las personas que sufren psoriasis puedan gozar de las relaciones sexuales. ¡°Incluso para parejas que llevan juntas muchos a?os puede seguir siendo un tab¨²¡±, explica Miquel Ribera, dermat¨®logo del hospital Parc Taul¨ª de Sabadell (Barcelona).
En su gu¨ªa de consejos, la asociaci¨®n Acci¨®n Psoriasis se?ala la importancia de hablar con la pareja y compartir con ella c¨®mo afecta la enfermedad ¡°para establecer un clima imprescindible de comprensi¨®n¡± y ¡°normalizar la situaci¨®n". Un pacto inicial imprescindible para encaminar las relaciones ¨ªntimas, evitando pr¨¢cticas que puedan generar incomodidad, y al que los expertos recomiendan sumar otras prevenciones como estar descansado y relajado, tomar medicaci¨®n para el dolor una media hora antes de tener sexo.
Asimismo, en el ¨¢mbito de las relaciones ¨ªntimas, los doctores aconsejan el uso de lubricantes para hidratar la piel y evitar roces que, asegura Ribera, pueden provocar lesiones en las zonas afectadas. Una recomendaci¨®n a la que suma dos consejos m¨¢s: vestir ropa interior de algod¨®n y usar cremas ¡°de barrera o protectoras¡± si se practica alg¨²n tipo de deporte, una situaci¨®n que podr¨ªa da?ar especialmente la zona de las ingles a causa de nuevo de las rozaduras.