El incendio, el colibr¨ª y la econom¨ªa circular
El fuego devora el bosque. Los animales paralizados, menos un colibr¨ª que arroja sobre las llamas una gota de agua. Algunos se burlan. ¡°Vale, pero yo he hecho mi parte¡±. As¨ª, gota a gota, podr¨ªa funcionar la econom¨ªa perfecta
Si un c¨ªrculo gira sobre su eje, forma una esfera. La Tierra por ejemplo. Y si ese mundo sustituye la econom¨ªa lineal por su alternativa circular, el premio tambi¨¦n es La Tierra.
En ese hipot¨¦tico caso, la especie humana habr¨ªa sabido conciliar su crecimiento con la gesti¨®n de los recursos finitos y de la riqueza necesaria no solo para mantener el bienestar, sino para pagar la factura de esa transici¨®n.
Cerramos el zoom y lo centramos en una peque?a ciudad espa?ola. Melilla puede ser dos veces aut¨®noma, por estatus pol¨ªtico y por el proyecto Second Life, que recupera bater¨ªas usadas de coches el¨¦ctricos (Nissan Leaf) para inyectar energ¨ªa inmediata si falla la central t¨¦rmica que la abastece.
As¨ª propone Endesa una soluci¨®n triple: a los riesgos de las redes el¨¦ctricas aisladas, al almacenaje de grandes cantidades de energ¨ªa que podr¨ªa compensar la dependencia meteorol¨®gica de las renovables, y para la monta?a de bater¨ªas que acumular¨¢ el deseable ¨¦xito del coche el¨¦ctrico.
Perd¨®n, la soluci¨®n m¨¢s bien ser¨ªa cu¨¢druple: ¡°En el momento actual, con consumos y volatilidad de precios cada vez mayores, son mas necesarias las innovaciones que reutilizan productos, incrementan su vida ¨²til y reducen el consumo de materias primas escasas¡±, apunta Mar¨ªa Malaxechevarr¨ªa, directora general de Sostenibilidad de Endesa.
C¨ªrculo virtuoso
Imaginemos que a un proyecto as¨ª se suman avances como unas bater¨ªas mucho m¨¢s eficientes ¡ªlas que desarrolla el I+D+i ahora¡ª, veh¨ªculos con piezas de ecodise?o pensadas para instalarlas en otros coches, como quien dona un ¨®rgano ¡ªRenault ya construye una factor¨ªa orientada en ese sentido¡ª, y adem¨¢s que cada vez m¨¢s de esos veh¨ªculos se destinan al uso compartido o al alquiler para reducir su n¨²mero.
Un cambio de modelo as¨ª implica un reseteo, necesita un gota a gota para perforar una de las materias m¨¢s duras de la naturaleza (humana): la rutina. Por ejemplo para asumir nuevas costumbres como el intercambio de ropa usada o la venta de segunda mano que ya ensayan marcas y plataformas.
Entiendo que las empresas grandes tienen la responsabilidad social de ayudar a las peque?as?ngel Fern¨¢ndez, presidente del Patronato de la Fundaci¨®n Econom¨ªa Circular.
M¨¢s all¨¢ de estas cu?as sostenibles en la econom¨ªa lineal, la gran pregunta es c¨®mo lograr la cuadratura del c¨ªrculo, c¨®mo implantar un modelo que consume menos sin sacrificar su equivalente en actividad. El presidente del patronato de Fundaci¨®n Econom¨ªa Circular, ?ngel Fern¨¢ndez, recomienda una mirada realista que no demonice. ¡°S¨ª, con pl¨¢sticos o gasolina, pero este modelo nos ha tra¨ªdo hasta las mayores cotas de desarrollo humano o esperanza de vida. Preferimos que las empresas se transformen, no que cierren¡±. Transici¨®n, no demolici¨®n.
Las grandes compa?¨ªas no le preocupan tanto como la mir¨ªada de pymes sin tantos recursos. Aqu¨ª puede funcionar el efecto domin¨®: ¡°Para cumplir sus objetivos de sostenibilidad, necesitan extender esos criterios a sus cadenas de suministro e incluir a las pymes en este viaje. Entiendo que las grandes tienen la responsabilidad social de ayudar a las peque?as¡±.
?Negocio redondo?
Todo depende del c¨®mo. ¡°De este gran cambio pueden surgir grandes oportunidades, un est¨ªmulo a la competitividad y la innovaci¨®n. Reaprovechar materias requiere nuevas tecnolog¨ªas y procesos que pueden repercutir en crecimiento, empleo y nuevas cadenas de valor¡±, apunta Bego?a G¨®mez, directora de Comunicaci¨®n, Relaciones con Pacientes y ESG de Novartis, una farmac¨¦utica que aspira a la neutralidad en el uso de pl¨¢sticos para 2030.
Ejemplos de esas oportunidades no faltan, como la empresa toledana Preco y su sistema de reciclaje qu¨ªmico de pl¨¢sticos que elimina los aditivos t¨®xicos y reduce el degradado progresivo causado por el actual reciclado mec¨¢nico. ?ngel Fern¨¢ndez sugiere otro ejemplo de nuevo empleo en negocios como el alquiler de electrodom¨¦sticos o el dise?o para durar: ¡°Si compras una televisi¨®n nueva, viene de Taiwan o Corea. Para repararla, bajar¨¢s al taller de la esquina¡±.
Ese modelo de eterno retorno es un sue?o de libertad para gente tan pobre como la europea en materias primas. ¡°Reducir esa dependencia del exterior permitir¨ªa a cualquier actividad superar problemas como la escasez de recursos, asegurar el suministro y reducir el impacto medioambiental¡±, a?ade Bego?a G¨®mez.
La mente lastra o vuela
Pero volvemos al problema del cambio cultural colectivo e imprescindible. ¡°La falta de concienciaci¨®n es un lastre para el despegue ¡ªapunta Mar¨ªa Malaxechevarr¨ªa¡ª. Hay poca comprensi¨®n del concepto circular y sus beneficios, adem¨¢s sus productos tienden a ser m¨¢s caros limitando la demanda¡±.
Cultura circular en la financiaci¨®n: que el banco de la esquina conceda un cr¨¦dito a ese taller de reparaci¨®n de electrodom¨¦sticos aunque la carpeta de negocios similares est¨¦ vac¨ªa. En la legislaci¨®n, que ha avanzado en Espa?a pero necesita est¨ªmulos a pie de calle: ¡°En Francia, la ley casi proh¨ªbe el desperdicio de alimentos y tiendas o restaurantes tienen que firmar acuerdos con organizaciones sociales para que la comida no acabe en la basura¡±, propone Fern¨¢ndez.
Reaprovechar materias requiere nuevas tecnolog¨ªas y procesos que pueden repercutir en crecimiento y empleoBego?a G¨®mez, directora de Comunicaci¨®n, relaciones con Pacientes y ESG de Novartis
Cultura circular en educaci¨®n, a¨²n sin oficios especialistas en la formaci¨®n profesional y con pocos grados y m¨¢steres universitarios en ecodise?o y otros criterios circulares. A veces las empresas recurren a la autoformaci¨®n, como Endesa, que ha creado la primera academia espa?ola de Econom¨ªa Circular junto con Campus Iberus.
Y evoluci¨®n cultural en la capacidad de entendimiento mutuo. Una transformaci¨®n tan profunda implica choques entre lo pasado y lo nuevo. De los cambios contra la resistencia al cambio. Del consumir mucho menos con tener buen trabajo. O de las visiones ecologistas gen¨¦ricas con su aplicaci¨®n real sobre el terreno.
En este sentido, Fern¨¢ndez pone el ejemplo del apoyo te¨®rico a los veh¨ªculos el¨¦ctricos, pero al mismo tiempo el rechazo pr¨¢ctico a la explotaci¨®n de una reserva de litio en Extremadura para fabricar bater¨ªas. ¡°Necesitamos planteamientos de debates inteligentes y una especie de juez de paz que acerque posiciones para que cedan unos y otros, porque si no estamos hablando de entelequias¡±.
Otros casos de cooperaci¨®n sensata
En el proyecto Hoteles Circulares, en Mallorca, participan varias cadenas multinacionales, Iberostar entre ellas. Explicado de forma esquem¨¢tica, la gestora de residuos Tirme ayuda a los hoteles a recoger y clasificar su desperdicio org¨¢nico. Convierte parte en compost, que a su vez nutre las huertas locales cuyos productos vuelven al paladar de los clientes. Mediante c¨®digos QR pueden ver la historia de ese tomate.
¡°Valoramos much¨ªsimo cualquier iniciativa privada que tome decisiones audaces e integre la econom¨ªa circular en su estrategia de negocio¡±, explica Sandra Benbeniste, directora de la Oficina de Sostenibilidad EMEA (Europa, Oriente Medio y ?frica) de Grupo Iberostar, que ha eliminado los pl¨¢sticos de un solo uso, aspira a lo mismo con sus residuos de vertedero para 2025 y desarrolla iniciativas de consumo responsable de pescado azul y salud costera.
La falta de concienciaci¨®n es un lastre para el despegue. Hay poca comprensi¨®n del concepto circular y sus beneficiosMar¨ªa Malaxechevarr¨ªa, directora general de Sostenibilidad de Endesa.
La Fundaci¨®n Cotec para la Innovaci¨®n destaca varios casos de circularidad en su ¨²ltimo informe, pero este especialmente por su origen en la sociedad civil: el Acuerdo Vall¨¦s Circular vincula a los 23 municipios del Vall¨¦s Occidental y otras instituciones y agentes para trabajar en red. Cada a?o celebra un encuentro donde se proponen soluciones y un ¨¢gora de estrategias de ecodise?o en las empresas locales. De ah¨ª han surgido proyectos como aprovechar la biomasa de los bosques para prevenir incendios.
Fern¨¢ndez es moderadamente optimista, cree en el efecto multiplicador de la tecnolog¨ªa all¨ª donde no llegue la mentalidad con la fuerza necesaria. La madurez tecnol¨®gica tiende a acelerarse. Y aunque no tenga relaci¨®n directa con la circularidad, Mutua Madrile?a recuerda un hito en la capacidad de reacci¨®n humana gracias a la ciencia, m¨¦dica en este caso: ¡°El 12 del diciembre de 2019 se hospitaliza la primera persona enferma de covid; el 11 de enero de 2020 se secuencia por primera vez el ADN del virus; el 24 de febrero de 2020 la primera vacuna est¨¢ lista para comenzar su ensayo en personas¡±.
Principios, fines y datos culturales
La economía circular se basa en ocho principios:
- La Eco-concepción considera el impacto medioambiental en toda la vida de un producto.
- La Ecología industrial optimiza la gestión de stocks y flujos de materiales, energía y servicios.
- Funcionalidad para priorizar el uso frente a la posesión.
- Reintroducir productos con usos diferentes a los que disfrutaron sus primeros consumidores.
- Reutilizar residuos o partes de residuos que pueden servir para elaborar productos nuevos.
- Reciclaje: aprovechar los materiales todavía útiles de los residuos.
- Reparar los artículos estropeados.
- Obtener energía de los residuos que no se puedan reciclar.
Según The Circularity Gap Report 2019, el 9% de la economía mundial es circular. ¿Mucho, poco? Poco si se estanca. Y una cifra prometedora si sirve de efecto llamada.
De acuerdo con la Fundación Cotec, la generación de residuos en España está por debajo de la media europea. Sin embargo, aquí acaban en un vertedero el 54% de esos residuos, más del doble de la media comunitaria. Es un porcentaje aún más preocupante si el objetivo de la Unión es reducir la media al 10% en 2030. Un dato mejor: el informe de 2019 de Cotec detalla 167 casos de éxito en economía circular española, el triple que dos años antes.
Para finales de esta década y con relación a los datos de 2010, la Estrategia Española de Economía Circular aspira a reducir un 30% el consumo nacional de materiales, disminuir un 15% la generación de residuos y mejorar un 10% la eficiencia en el uso del agua. Y pretende una caída drástica de los residuos alimenticios: un 50% menos en los hogares y el consumo minorista.