Flickr se pone al d¨ªa
Yahoo! y Google pelean por atraer a los aficionados a la fotograf¨ªa
Como tantos proyectos en Internet, termin¨® siento algo diferente para lo que fue pensado. Flickr era un chat de un juego online canadiense que permit¨ªa compartir fotograf¨ªas. Cobr¨® vida propia y desde 2004 es un contenedor social de im¨¢genes. Los usuarios pueden subir hasta 200 fotograf¨ªas gratis. Si pagan 20 euros al a?o pasan a tener espacio sin l¨ªmites. Aunque muchos lo usan como disco duro virtual para conservar una copia de su archivo, otros se lanzan a superarse y compartir la creatividad.
En estos ¨²ltimos cinco a?os la evoluci¨®n ha sido constante. En 2005 Yahoo! compr¨® este servicio y llegaron las primeras mejoras. Los grupos para im¨¢genes, como el dedicado al n¨²mero 37, se han convertido en cl¨¢sicos.
V¨ªdeo y retoque
Despu¨¦s lleg¨® la posibilidad de pedir copias impresas sin salir del servicio y la subida de v¨ªdeos. Esta ¨²ltima decisi¨®n fue seguida de una gran pol¨¦mica. ?C¨®mo pod¨ªan atreverse a llamar im¨¢genes en movimiento a v¨ªdeos de hasta 30 segundos si este era un lugar para las fotos? se preguntaban los fan¨¢ticos de las im¨¢genes. Han seguido esta senda, aunque no es su negocio principal, y permite subir v¨ªdeos de alta definici¨®n desde el iPhone.
Al tiempo que crec¨ªa le surgi¨® un competidor, Picasa, un servicio similar de Google que se integra en la cuenta de correo del usuario. Funciona tanto online como programa de escritorio. Desde el primer momento destac¨® por su facilidad para retocar las im¨¢genes, virtud que se ha visto potenciada con la compra de Picnik, un poderoso editor online. Flickr ya hab¨ªa sumado este servicio, pero no fue capaz de ultimar su compra.
La guerra sigue abierta, el terreno de batalla ahora es la interfaz del usuario. En esto, sigue ganando el cl¨¢sico Flickr. Entre sus ¨²ltimos cambios destaca una interfaz sencilla y limpia pero con mucha informaci¨®n. De un vistazo se pasa de una imagen a otra, se ve con qu¨¦ c¨¢mara y en qu¨¦ lugar se hizo la imagen. Incluso permite intentar vender una foto concreta a la agencia Getty Images para que la comercialice en el mercado profesional.
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