Un chute de caballo

Sangre de caballo y orina humana entre los premios de la 32? edici¨®n de Ars Electronica, que desde hoy y hasta el martes se exhiben como es tradicional en la ciudad austriaca de Linz.

Haberland es una m¨¢quina productora y expendedora de tejido celular potencialmente apto para el consumo humano. Para producir estas microalgas comestibles, utiliza como fuente de energ¨ªa la luz solar y como nutriente, la orina humana.

Haberland, obra del colectivo barcelon¨¦s BlablabLAB (formado por Jordi Bari, Raul Nieves y Gerard Rubio) es un homenaje al bot¨¢nico austriaco Gottlieb Haberlandt, que en 1936 fue el primero en investigar el cultivo de tejido celular fuera del organismo. La obra es uno de los "proyectos inspiradores e inusuales" reunidos en Create your world, una de las principales exposiciones del intenso programa del festival. BlablabLAB obtuvo dos menciones de honor.

Una obra de body art extremo, May the Horse Live in Me, fue premiada en la categor¨ªa de Arte h¨ªbrido en los Ars Electronica Prix, los premios m¨¢s prestigiosos y cuantiosos del new media art. La pieza del colectivo Art Orient¨¦ Objet (formada por la pareja francesa Marion Lavalle-Jeantet y Beno?t Mangin) mezcla arte biol¨®gico y body art extremo. Durante la acci¨®n, la artista se inyecta plasma de caballo, con el objetivo de impulsar la investigaci¨®n sobre los efectos terap¨¦uticos de la sangre equina.

Lavalle-Jeantet explic¨® que hab¨ªa preparado su cuerpo durante varios meses para tolerar las inmunoglobulinas de la sangre de caballo. La artista denomina este proceso como "Mitridatizaci¨®n" en homenaje a Mithridates VI de Pontus, que cultivaba la inmunidad de los venenos ingiriendo regularmente microdosis de estos. Gracias a su preparaci¨®n la artista no ha padecido un posible shock anafil¨¢ctico. "Desde entonces tengo la sensaci¨®n de ser extrahumana", explica.

Tambi¨¦n resulta llanativo Sayonara, espect¨¢culo japon¨¦s interpretado por humanos y robots (a veces casi indistinguibles), y Tesla Orchestra, un concierto a base de bolas de fuego, rel¨¢mpagos, danza y m¨²sica, generados por las dos bobinas Tesla (un tipo de transformador resonante creado por el infravalorado inventor hom¨®nimo) m¨¢s grandes del mundo.

Otro artista afincado en Barcelona, Alex Posada, expone The Particle, una enorme escultura repleta de energ¨ªa positiva que, a trav¨¦s de los anillos tachonados de luces multicolores LED que la rodean, produce sonidos y crea formas tan fascinantes como transitorias. La presencia espa?ola se completa con Alex Roman, menci¨®n de honor en Animaci¨®n digital con The Third & The Seventh, que ilustra la fusi¨®n visual entre arquitectura y cine.

Bajo el t¨ªtulo Origin, How It All Begins, el festival (www.aec.at/news/en/) por primera vez colabora con el CERN (organizaci¨®n europeo de investigaci¨®n nuclear) en la b¨²squeda de las condiciones para innovar, y en los nuevos paradigmas sociales que puedan sustituir a los que la crisis ha dejado como obsoletos o ineficaces. "La b¨²squeda de los or¨ªgenes de la materia que se realiza en el CERN es mucho m¨¢s que una analog¨ªa simb¨®lica para salir airosos de los enormes desaf¨ªos que debemos afrontar si queremos legar este mundo a nuestros descendientes", aseguran Christine Sch?pf y Gerfried Stocker, directores del festival.

Investigating the Big Bang revela los entresijos del CERN para demostrar que su importancia no radica solo en la b¨²squeda de la escurridiza e hipot¨¦tica part¨ªcula de Higgs, sino en las ideas que ah¨ª se generan.