Vuelve el detective Max Payne, un h¨¦roe atormentado
Rockstar busca redefinir el g¨¦nero de acci¨®n con la tercera entrega del investigador
Temblad, criminales. Max Payne ha vuelto. Diez a?os despu¨¦s de revolucionar los videojuegos de acci¨®n, y cuando ya nadie le esperaba, el m¨ªtico detective regresa para imponer su particular visi¨®n de la justicia y, de paso, protagonizar el "shooter m¨¢s cinematogr¨¢fico de la historia", seg¨²n prometen desde Rockstar, el estudio responsable de este juego y otros tan conocidos como la galardonada saga Grand Theft Auto.
La nueva entrega de Payne, un antih¨¦roe complejo, c¨ªnico y atormentado, llegar¨¢ a las consolas PS3 y XBOX el 18 de mayo y al PC el 1 de junio, tras sucesivos retrasos que seg¨²n sus desarrolladores se deben a la obsesi¨®n por despojarlo de fallos de programaci¨®n, los temidos bugs, tan frecuentes en las ¨²ltimas grandes producciones. "Es el juego al que sus propios creadores quer¨ªan jugar", aseguran los portavoces de la compa?¨ªa en Madrid para recalcar el nivel de perfecci¨®n que quiere alcanzar Rockstar con su ¨²ltima criatura.
Max Payne 3 es deudor de cl¨¢sicos de la novela negra como?Raymond Chandler y de pel¨ªculas como Teniente Corrupto (1992) o, m¨¢s recientemente, Ciudad de Dios (2002) y Tropas de ?lite (2007). El juego retoma la historia de Max, un ex polic¨ªa de Nueva York embarcado en una cruzada contra el crimen tras el brutal asesinato de su mujer y su beb¨¦. Si en las primeras dos entregas, en 2001 y 2003, la ciudad de los rascacielos era el escenario de sus investigaciones, en una atm¨®sfera oscura y desasosegante, ahora nuestro h¨¦roe, envejecido y con un dr¨¢stico cambio de imagen, luchar¨¢ contra el delito y la corrupci¨®n en los ambientes turbios y degradados de la metr¨®poli brasile?a de Sao Paulo.
"Las ciudades son un protagonista m¨¢s del juego. Antes Nueva York y ahora San Paulo son tan importantes en la historia como el propio Payne", explican desde Rockstar. As¨ª se entiende el obsesivo nivel de detalle con el que aparecen plasmadas en la versi¨®n inacabada del juego que pudo probar este periodista. Una de las fases se desarrolla en un bloque de apartamentos desvencijados en Manhattan. Las paredes est¨¢n desconchadas, pero sobre ellas se pueden leer perfectamente decenas de grafitos. Un detalle m¨¢s del perfeccionismo de los artistas de Rockstar. En el caso de Sao Paulo, adem¨¢s de ver documentales como Favela Rising, el equipo visit¨® las favelas y tambi¨¦n las mansiones de lujo, para empaparse del contraste y luego plasmarlo en el juego.
Con su ¨²ltima producci¨®n, Rockstar recupera las se?as de identidad que hicieron grandes los dos primeros cap¨ªtulos: el ¡®bullet time¡¯ o tiempo bala, la narraci¨®n en off y los flashbacks. El tiempo bala, que por primera vez emple¨® en el cine el realizador John Woo, es la clave de la jugabilidad, una especie de c¨¢mara lenta que se activa en mitad de la acci¨®n para acabar de certeros disparos con los enemigos. La narraci¨®n en off, un recurso estil¨ªstico del cine negro muy en boga en los a?os 40 y 50, sirve en este caso para ir desgranando el argumento al comienzo de cada fase, mientras que los flasbacks dan las claves de la intrincada historia de Max.
Para transmitir el m¨¢ximo realismo posible, los programadores han invertido muchas horas en mejorar el movimiento de nuestro protagonista y su interacci¨®n con el entorno. "El cuerpo de Max Payne reacciona de forma distinta en funci¨®n de los obst¨¢culos que se encuentre". En uno los niveles se desata un tiroteo en una estaci¨®n de autobuses y Max se parapeta tras varios cad¨¢veres para seguir sumando bajas a su lista. Ni rastro del molesto clipping (error que hace que los cuerpos se fundan) que aparec¨ªa cada dos por tres en las dos primeras entregas.
El poderoso arsenal del juego tambi¨¦n se ha equilibrado para que la espectacularidad no acabe por arruinar la experiencia de juego. Max no podr¨¢ llevar m¨¢s de dos armas consigo. Y el peso y el retroceso de las mismas al disparar afectar¨¢ a sus movimientos, haci¨¦ndolos m¨¢s torpes. Algo importante en un juego en el que cada segundo cuenta. Y es que el t¨ªtulo ofrece acci¨®n fren¨¦tica desde el primer minuto. Es un c¨®ctel de explosiones y tiros, donde apenas hay tiempo para pensar. Sus autores aseguran que han logrado llevar "la precisi¨®n de un juego como Call of Duty a la perspectiva de acci¨®n en tercera persona". "Cada bala tendr¨¢ una trayectoria y una f¨ªsica diferente", explican. Pero a diferencia del archiconocido simulador de guerra, en Max Payne el argumento juega un papel primordial. Un argumento del que se conoce poco, debido al celo con el que Rockstar maneja toda la informaci¨®n que rodea a este juego. Quieren ir ofreci¨¦ndola en peque?as dosis, como los analg¨¦sicos que sirven a Max para recuperar salud a lo largo del juego. "Max Payne consiste, ante todo, en matar con estilo", resumen sus autores.
Nuevas experiencias
Max Payne 3 no pod¨ªa resistirse a lo que ya es casi un imperativo de la actual generaci¨®n: tener un modo multijugador online a la altura de los tiempos que corren. Pero a diferencia de los actuales reyes de la colina (Halo, Call of Duty o Battlelfield), Rockstar busca una experiencia alejada del anonimato que acaba imponi¨¦ndose en esos campos de batalla virtuales. Charlie Bewsher, responsable de este ¨¢rea del juego, lo explicaba hace poco d¨ªas a IGN. "Lo que m¨¢s nos gusta de jugar en red son las relaciones que acabas entablando con otros jugadores". Para potenciar ese v¨ªnculo, Max Payne 3 tendr¨¢ varios modos de juego diferentes, entre los que destaca el denominado Payne Killer. Dos jugadores asumen el rol de Max y de su compa?ero Passos, mientras el resto forman otro gran equipo cuyo objetivo es acabar con los dos detectives. El grupo que m¨¢s puntos sume gana la partida. Hasta ah¨ª nada fuera de lo habitual. El giro est¨¢ en que si matamos a Max o a Passos, autom¨¢ticamente pasamos a formar d¨²o con el jugador que acabamos de eliminar, lo que nos obligar¨¢ a reconciliarnos por la v¨ªa r¨¢pida y entablar estrategias con el que hasta hace un instante era nuestro enemigo. Otra modalidad ser¨¢ 'Gang Wars', un duelo por equipos al que se a?adir¨¢ un "componente narrativo" para que lo que suceda en una partida afecte al desarrollo de la siguiente.
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