La educaci¨®n en el siglo XXI: la ciencia del aprendizaje
Los estudiantes pasar¨¢n una parte importante de su tiempo interactuando con aparatos inteligentes que les ayudar¨¢n a aprender individualmente, a su ritmo y a su estilo
?Por qu¨¦ podemos lanzar m¨®viles mejores cada pocos meses, y coches mejores todos los a?os, pero no somos capaces de decir que hemos mejorado el sistema educativos incluso a lo largo de varias d¨¦cadas? La pregunta es pertinente en casi todos los pa¨ªses del mundo.
Creo que hay una respuesta simple a la pregunta: reconocemos que fabricar m¨®viles y coches y edificios requiere establecer una profesi¨®n formal relacionada con el cuerpo de conocimiento en cuesti¨®n y un ecosistema de competencias sin¨¦rgico. Tenemos expertos que entienden la electr¨®nica por detr¨¢s de la pantalla del m¨®vil y su dise?o; de hecho, todo un ej¨¦rcito de investigadores y tecn¨®logos trabajan, por ejemplo, en crear m¨®dulos inal¨¢mbricos m¨¢s eficientes ?que sean un 10% m¨¢s peque?os o livianos que los actuales.
Si hici¨¦ramos lo mismo en educaci¨®n, tendr¨ªamos, en todos los pa¨ªses, muchas entidades investigando sobre c¨®mo aprenden los ni?os a leer en su idioma materno, c¨®mo se entienden los conceptos cient¨ªficos, qu¨¦ impacto tiene el tama?o de la clase en el aprendizaje, y en qu¨¦ puntos se equivocan los ni?os cuando aprenden a resolver las ecuaciones lineares. Pues no lo hacemos. Y por eso tenemos tel¨¦fonos m¨®viles mejores cada pocos meses mientras que la educaci¨®n sigue languideciendo, d¨¦cada tras d¨¦cada.
No s¨®lo se puede cambiar esto, sino que es nuestro deber cambiarlo si queremos que nuestros hijos tengan un futuro mejor. Y la respuesta, en mi opini¨®n, no es un planteamiento filos¨®fico, tipo ¡°descentralizar¡± o ¡°centralizar¡± o ¡°delegar m¨¢s en los profesores¡±, o incluso ¡°m¨¢s" o ¡°menos¡± ¡°pruebas¡±, sino crear y fomentar de forma muy sistem¨¢tica una ¡°Ciencia del Aprendizaje¡± que genere un cuerpo de conocimiento.
La verdad es que probablemente nadie en el mundo hoy sepa c¨®mo solucionar nuestros problemas educativos. Admitir esto es un paso importante
La ciencia del aprendizaje
Un mito persistente de la educaci¨®n es que ense?ar a los ni?os no es f¨ªsica cu¨¢ntica, que tenemos todas las respuestas y nos falta la voluntad pol¨ªtica o que los profesores son ineficientes, o que hay un defecto administrativo por detr¨¢s del fracaso de nuestros sistemas educativos. La verdad es que probablemente nadie en el mundo hoy sepa c¨®mo solucionar nuestros problemas educativos. Admitir esto es un paso importante.
Pongamos un ejemplo sencillo: Todos los ni?os necesitan aprender qu¨¦ son los n¨²meros decimales. Por eso tenemos cientos de miles de textos o cap¨ªtulos sobre el tema de los decimales. Pero al mismo tiempo, todo profesor necesita informaci¨®n sobre c¨®mo ense?ar el tema. El o la profesora deber¨ªa saber a qu¨¦ dificultades se enfrentan los ni?os para entender los conceptos en decimales, y qu¨¦ soluciones y estrategias funcionan para resolver dichas dificultades con distintos tipos de ni?os. Como es l¨®gico, por tanto, deber¨ªa haber miles de textos disponibles sobre esos temas. Sin embargo, en cualquier lugar del mundo, a un profesor le costar¨ªa encontrar siquiera alg¨²n texto o cap¨ªtulo que leer antes de entrar en la clase de decimales.
Una Ciencia del Aprendizaje ser¨ªa un campo interdisciplinar, con elementos de la educaci¨®n, la psicolog¨ªa, las ciencias cognitivas, la inform¨¢tica, la inteligencia artificial y las neurociencias. Concretamente, estudiar¨ªa las ideas falsas que tienen los estudiantes respecto a distintos conceptos, y qu¨¦ estrategias servir¨ªan para atajarlas. Intentar¨ªa contestar a preguntas relacionadas con dificultades que tienen los estudiantes con la lectura, y qu¨¦ estrategias son ¨²tiles. Se adentrar¨ªa en la teor¨ªa, pero tambi¨¦n estar¨ªa firmemente afincada en la pr¨¢ctica.
El problema de aprender de memoria, el ¨¦nfasis en ciertas aptitudes, los t¨ªtulos, las notas en las vidas de millones de estudiantes son problemas que plagan la educaci¨®n
Se ha argumentado que la instituci¨®n social que m¨¢s se parece a la escuela (con sus uniformes y horarios) es la c¨¢rcel. El problema de aprender de memoria, el ¨¦nfasis en ciertas aptitudes¡ªmuchas veces a costa de otras¡ª, el sinsentido de la educaci¨®n formal, los t¨ªtulos, las notas en las vidas de millones de estudiantes son problemas que plagan la educaci¨®n en la mayor¨ªa de sociedades. Ir¨®nicamente, el objetivo de la educaci¨®n es despertar pasiones y hacer florecer los talentos de cada cual y ayudar a que cada uno los descubra.
Creo que las evaluaciones de resultados (que muestra qu¨¦ aprenden los ni?os y hasta qu¨¦ saben los profesores) son importantes. Pero la evaluaci¨®n debe estar bien dise?ada, y debe ser de impacto reducido. Una evaluaci¨®n de impacto reducido implica que las acciones que se emprenden a raz¨®n de las mismas deben respaldar y centrarse en la mejor¨ªa, no en el castigo. Estas evaluaciones ayudar¨ªan a sacar a relucir claramente los retos educativos: un requisito previo a dedicar la energ¨ªa a solucionarlos.
La necesidad de un nuevo plan de estudios
El mundo ha cambiado, debido a fuerzas como la globalizaci¨®n y la tecnolog¨ªa. La educaci¨®n del futuro tiene que prepararse para un mundo diferente. Aptitudes como la colaboraci¨®n y la conciencia de distintas culturas (algo que no se ha recalcado lo suficiente en los planes de estudio actuales) deber¨ªan tenerse en cuenta. El aprendizaje personalizado tendr¨¢ que dejar de ser un t¨¦rmino de moda, y convertirse en algo que permita a cada uno de los estudiantes descubrir y desarrollar su propio talento.
El aprendizaje personalizado significa que no se agrupar¨¢ ni ense?ar¨¢ a los estudiantes en clases conformadas ¨²nicamente por estricto orden de edad, sino que se promover¨¢n y desarrollar¨¢n los intereses individuales. Un plan de estudios elemental, troncal, consistir¨ªa en ciertas cosas que conocemos bien: lenguaje, matem¨¢ticas y ciencias, y tambi¨¦n ciertos aspectos olvidados en las aulas tradicionales, como la creatividad y las artes, y otros aspectos nuevos (como el pensamiento emprendedor) que tambi¨¦n deber¨ªan ser parte del plan de estudios troncal.
Una vez un estudiante completa las clases obligatorias, podr¨ªa adentrarse en las materias de su elecci¨®n. Un estudiante podr¨ªa profundizar m¨¢s en fracciones, otro en las pir¨¢mides de Egipto, y un tercero en las barreras de coral. Todo ello ser¨¢ posible cuando se utilice de verdad la tecnolog¨ªa para que el aprendizaje se entreteja de pasi¨®n. La inteligencia artificial se nutrir¨¢ de datos de millones de estudiantes y ayudar¨¢ a los ni?os a aprender de forma m¨¢s eficiente y con los m¨¦todos que mejor les cuadren. Como hay dos tipos de escalas de aprendizaje (una, los millones de estudiantes que necesitan recibir una educaci¨®n de calidad, pero otra escala que existe s¨®lo en la mente de cada ni?o) la individualidad s¨®lo puede florecer cuando la vastedad del aprendizaje est¨¢ a disposici¨®n de todos y cada uno de los ni?os, a su elecci¨®n.
La inteligencia artificial se nutrir¨¢ de datos de millones de estudiantes y ayudar¨¢ a los ni?os a aprender de forma m¨¢s eficiente
El futuro del aprendizaje
Si logramos llegar a esto, la escuela del futuro ser¨¢ muy distinta y mucho m¨¢s fascinante e interesante que las escuelas de hoy. Los estudiantes pasar¨¢n una parte importante de su tiempo, creo yo, interactuando con aparatos inteligentes que les ayudar¨¢n a aprender de forma individualizada, a su ritmo y a su estilo. Pero esto no significa que haya menos interacci¨®n personal.
En el tiempo restante, los ni?os interactuar¨¢n con otros ni?os guiados por un adulto. Este ¡°profesor¡± ser¨ªa muy distinto de los profesores de hoy, ser¨ªa un experto en identificar y sacar el potencial a relucir. En esta sesi¨®n, los ni?os se contar¨ªan unos a otros, emocionados, lo que hubiesen aprendido. El adulto les presentar¨¢ a expertos que tambi¨¦n estar¨ªan apasionados ante la perspectiva de conocer a ni?os inteligentes con inter¨¦s y talento en su misma especialidad. Los ni?os aprender¨ªan aptitudes sociales, como dar y recibir comentarios y encajar el fracaso y trabajar en equipo: aptitudes cr¨ªticas para las que las escuelas de hoy a menudo no tienen tiempo.
Si podemos aportar el trabajo, arduo, que necesitamos hoy, la promeso de una educaci¨®n plena que ayude a cada persona a contribuir a la sociedad y a ocupar su puesto ser¨¢ una realidad.
Sridhar Rajagopalan es Fundador de Iniciativas Educativas (EI), India, experto de Fundaci¨®n de la INnovaci¨®n Bankinter.
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